ENTRE LOS WINCHESTER (SUPERNATURAL) #3

CAPÍTULO 6. RED SKY AT MORNING (II)

Capítulo 6. Red Sky at Morning (II)

____ (Tn)

Solo fui capaz de observar cómo Dean se alejaba y me volví a sentir incompleta otra vez. Lo que yo pensaba iba a ser un tranquilo cumpleaños terminó siendo...no sabía ni siquiera que había sido eso, solo tenía el corazón en un puño y mis pensamientos estaban revueltos, tenía demasiadas ganas de llorar en aquel momento, pero no me lo permití. No iba a romperme en un lugar lleno de gente, no iba a romperme de nuevo.

Sentí que alguien se acercaba a mí, me giré y mi mirada se encontró con la de Lawrence. Lo poco que lo había tratado me hizo ver que era un buen chico, dedicado a sus estudios y sentía demasiado dolor por la muerte temprana de su hermana, pero quería aparentar lo contrario.

-Lawrence, -mi voz sonaba ahogada, sentía el nudo formándose en mi garganta lentamente- ¿podrías llevarme a casa? No me siento muy bien.

Solo una mirada bastó para que él asintiera, caminamos hacia Sam, quien estaba bailando de nuevo con Gert. Su mirada se encontró con la mía, no la pude sostener por la vergüenza ya que hacía unos minutos le había admitido a su hermano que lo que sentía por Sam no era suficiente para olvidarlo, ya no me podía engañar por más tiempo.

-Lawrence me llevará a casa-le informé cabizbaja.

- ¿Está bien? -preguntó preocupado, sentí su mano tocar mi brazo y levanté la mirada-Puedo decirle a Dean que...

-No, -negué rápidamente con la cabeza, no quería estar en el mismo auto que Dean en ese momento-ustedes quédense un rato más.

-Déjala, mi Adonis, estará en buenas manos con Lawrence-dijo Gert con una sonrisa, se le había subido la champaña.

Sam me miró serio y asintió de mala gana, entonces Lawrence y yo nos fuimos. Vislumbré a Dean un momento junto a Bela, sin embargo, no me acerqué hacia ellos, aunque sentí su mirada cuando salí del edificio.

En el auto solo pude mirar por la ventana perdida en mis pensamientos, no me sentía bien y lo único que quería era llegar a aquella casa y dormir en el suelo, no era una idea muy tentadora, pero no podía compartir habitación con Sam en ese momento.

-Me hubiera gustado bailar más contigo-dijo Lawrence rompiendo el silencio, me sonrió-Pero tus amigos tenían otros planes.

Me reí sin gracia.

-Lo lamento, ellos son...-me detuve, no sabía que decirle.

-Se ve que te quieren-siguió con aquella sonrisa fácil que yo siempre quise hacer- se preocupan por ti.

-Son como mis hermanos-susurré con la mirada perdida en los recuerdos.

Al menos los de aquel pasado, cuando éramos niños.

Lawrence no dijo nada más, llegamos y le agradecí por la agradable noche que había pasado en su compañía, por haberme llevado a casa y sin más entré en la casa abandonada. Todo estaba oscuro por lo que encendí una vela y subí las escaleras, los pies me dolían y estaba cansada de usar aquel hermoso vestido, varios mechones se habían salido de mi peinado y solo quería quitarme el maquillaje de una vez por todas.

Tomé mis cosas del cuarto que compartía con Sam y me fui al más alejado de los chicos, abrí la puerta y entré. Dejé caer las cosas en el suelo y cerré la puerta de golpe, le puse seguro y me dejé caer lentamente hacia el suelo sintiendo como lentamente me rompía en dos pedazos, las sensaciones del pasado y del presente me mantenían en aquel estado de confusión que me exasperaba. Mis hombros comenzaron a temblar mientras el llanto se incrementaba, dejé que los sollozos salieran de mi garganta y entré en un laberinto de dolor que solo me hacía mal, no sé por cuanto tiempo me quedé así.