Padre soltero [Joel Pimentel]

16. Momentos incómodos

Antes de empezar quería decirles que me gustaría que sigan a:

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Narrador Omnisciente:

Vaya sorpresa que se llevaron al entrar, uno, dos, tres gemidos se escucharon fuertemente por todo el departamento, Holly abrió los ojos como platos, rápidamente Christopher le tapó los oídos y la llevó a su departamento. -Tío ¿Qué fue lo que se escuchó en el departamento? -Pregunta inocente Holly. -Tal vez tu padre se asustó y gritó. -Dice tratando de sonar indiferente. -Vamos a ver, a lo mejor le pasó al feo. -Dice preocupada. -No pequeña, mejor vamos un poco más tarde. -Dice Christopher nervioso. -Papá se enojará. -Contesta Holly. -No más de lo que yo estoy con él. -Dijo cruzándose de brazos, la pequeña no entendía nada, solo se encogió de brazos y se sentó en el sofá. - ¿Quieres ver un poco de televisión? -Pregunta amablemente Christopher. -Bob esponja. -Dice emociona. Él asintió y prendió la tv, colocando el programa que Holly había pedido. 10 minutos después habían regresado al departamento de Joel, pero esta vez Christopher se había asegurado. - ¡Joel Pimentel de León! Te quiero aquí en menos de 1 minuto. -Gritó Christopher.

Joel's Pov:

Asustado. Estaba muy asustado. Christopher y Holly había llegado ¿Y yo? Yo tenía a Antonella encima mío, dando pequeños saltitos ¿Se entiende lo que estoy haciendo? Porque no quiero ser más específico. Traté de calmar mi respiración, la cual estaba DEMASIADO agitada. -Holly acaba de llegar. -Dije tratando de levantarme. - ¿No podían llegar más tarde? -Pregunta un poco cansada. -Le pedí a Chris que la traiga a las 7:00 p.m. Se ha demorado. -Dije poniéndome los pantalones. -Cámbiate ¿Sí? No quiero que Holly te vea de tal manera. -Dije y salí de la habitación. - ¡Papito! -Corre hacia mí y logro cargarla. -Que bueno que no te pasó nada. -La miré con confusión. -Porque seguro gritaste ya que algo te asustó ¿Verdad? -Pregunta inocente. - ¿No entiendo princesa? -Hace 10 minutos vinimos, pero mi tío Chris dijo que mejor vayamos a su departamento, de seguro algo te había asustado. -Dijo un poco preocupada. -Ah, eso... Sí, fue una cucaracha, nada del otro mundo pequeña. -Dije acariciando su mejilla. -Necesito hablar contigo, Joel. -Dice Christopher serio, sabía perfectamente a lo que se refería. - ¿Puede ser mañana? -Pregunté con temor. -No. -Dice muy serio. - ¡Holly! ¿Cómo te fue con Chris? -Pregunta Antonella apareciendo. Holly me miró seria, más seria que Christopher, sus miradas me ponían más nervioso de lo que ya estaba. -Tío ¿Quieres sábanas nuevas? -Preguntó. -Por cierto, e fue muy bien. -Dice seria, y se zafó de mis brazos, logrando bajar. -Antonella ¿Te parece si nos vemos mañana? En la oficina. -Le dije y ella asintió ¿Por qué en la oficina? Porque es el único lugar en el que se puede comportar como una dama ¿Por qué? Ni idea, pero por mí, mejor. -Adiós mi amor. -Se despidió de mí con un laaargo beso en los labios. -Adiós Holly. -Se despide y retira. -Holly, princesa ¿Puedes esperar en la habitación? -Traté de sonar lo más convincente posible. -No hasta que el cuarto esté limpio, ordenado y con sábanas nuevas... De seguro ya están oliendo a perfume barato y corriente. -Dice cruzándose de brazos. -Prometo cambiar las sábanas, pero por favor, espérame allá. -Le pedí. Ella son pesadez se fue a la habitación. - ¡Seis y cincuenta y nueve en punto ya estaba enfrente de la puerta de tu casa! Siete en punto ya estábamos adentro y a tu noviecita se le ocurre gemir ¡Tres veces! -Me reclama. -Ya lo sé. -Dije apenado. - ¿No pensaste en que tu hija podía llegar? -Pregunta enfadado. -Enserio lamento el incómodo momento que acaba de pasar. -Dije muy apenado. -No te digo que no tengas sexo con Antonella, pero -Lo interrumpí- Yo no quería tener relaciones con ella. Cuando se fueron me puse a ver una peli y me quedé dormido, no sé cuanto habrá pasado, pero sentí que unas manos me acariciaban... Desperté y era ella, me beso en forma de saludo, pero su "beso" subió drásticamente su intensidad, y bueno, me dejé llevar, pasó ESO, y bueno, pero en realidad, no me gustó ni en lo más mínimo, apenas y duramos unos 20 minutos, porque luego escuché tu grito. -Terminé de contar. -Ojalá no se repita esta incómoda situación. -Dijo. -Adiós hermano. -Se despidió...

Pequeña, enserio lo siento. -Dije tratando de encontrar la mirada de Holly, oculta en las sábanas, recién cambiadas por cierto. -No te creo. -Dice con cierto enojo. -Pero hablo enserio. -Le pedí disculpas. - ¿Me prometes que no lo volverás a hacer? -Pregunta mirándome por una pequeña rendija entre las sábanas. -Te lo prometo mi princesa. -Dije y la abracé. Fue entonces que ella se acurrucó en mi pecho y cayó en los brazos de Morfeo, en este caso, eran los míos, su lugar favorito para dormir desde que es pequeña, ha sido mi pecho y ahora que tiene 8 no es la excepción.

1 semana después:

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