La Bitacora de Jehan [Completa]

Golpe de Suerte

Primer día en Paris:

Ha llovido todo el día, la ciudad tiene ese aroma peculiar de calle húmeda,

Al parecer, nadie sale de sus casas cuando Paris se tiñe de gris.

Punteó y salió con libreta y carboncillo en el bolsillo interno del levita dándose cuenta de lo silenciosa que era la capital cuando llovía, solo se escuchaban las gotas en los tejados, ni un alma en el camino y las farolas encendidas desde temprano; de camino a ninguna parte tal como si estuviera para él puesto ese anuncio, afuera del pequeño establecimiento, solicitaban una persona que supiera latín y otra larga lista de idiomas, había valido la pena salir con tal torrencial, entró al local logrando que el hombre que en su pequeño puesto escribía, le mirara casi asustado de ver el estado de su ropa húmeda

-Buenas tardes, Monsieur- saludó notando recién que no había llevado sombrero al momento en que hizo el ademán de quitárselo, por lo que optó por quedarse con las manos a la espalda- acabo de ver su anuncio- admitió logrando que el hombre al fin pestañeara

-Ah sí, ¿Qué idioma sabe y dónde lo aprendió?- indagó yendo por algo para ofrecerle con que secarse

Sí, definitivamente le temían a la lluvia, solo había caminado un par de calles, no es que estuviera goteando, solo era un poco de humedad, pero igual aceptó el paño que le extendió mientras respondía, era un trabajo más bien fácil, no precisamente bien remunerado, pero sin duda era más de lo que ganaba el promedio y sería leer para traducir libros al francés, algo que de por sí, haría incluso si no le pagaran

-¿Un estudiante?- preguntó el hombre meditabundo- sí, bien, bien- repitió para sí mismo

¿Qué podía perder? No todos los días podría decirse que salió de casa y volvió con un empleo, casi dos horas después pudo salir de ese lugar con un empleo y un horario que cumplir, no podía quejarse, su jefe tenía apariencia de ser una gran persona, lo que era un alivio para él, porque incluso el sujeto insistió en que esperara a que dejara de llover y le acusó de "muchacho incauto" por decirle que quería andar bajo la lluvia.

Era un buen hombre, se convenció Jehan, sin él, no sabría siquiera como llegar a la universidad  ahora solo debía hacer el recorrido y como si fuera poco, el hombre le dejaría llevarse los textos a casa cuando tuviera examenes y no pudiera ir, eso sin duda debía celebrarlo. Tal vez debió haberle dicho al señor Bennoit que también sabía otros idiomas, pero era demasiado trabajo y su mente recitó las palabras de su padre: si lo que quieres es ser literato, deberás ser estudiante por unos años a tiempo completo, es tu prioridad" había recalcado y por eso mismo se negaba a que trabajara, pero si el dinero que le mandara era para él, tenía que trabajar para garantizar el bienestar de Dante y el alquiler que debería pagarle, además otras personas podrían necesitar el empleo y habría que ser demasiado egoísta para quedarse con varios de esos cargos 

Por ahora, debía ir a celebrar porque no había nada mejor que una fiesta para conocer personas y la situación de Dante era algo que aún no se salía de su mente, pensó por un momento en el señor Bennoit, pero él no era una opción, ya lo había comprobado, mientras hablaban pasó un gato y lo espantó denominándolo como "endemoniada criatura", el pobre animalito solo buscaba protegerse de la lluvia, pero tal vez con el tiempo cambiaría de opinión o eso quiso creer hasta que el hombre comenzó un recital de estornudos, el pobre caballero era alérgico a ellos, lo que lo descartaba como posible cuidador de Dante

Y recordando eso, rondó las calles de Paris hasta perderse, pero tal como el empleo, encontró la cantina y al parecer, medio Paris estaba en ese lugar, no le cabía un alma y aun así encontraron donde sentarle y ofrecerle un brandy para el frio antes de traerle la cerveza; aceptó y la expresión de sorpresa al ver el tamaño del vaso, causó un par de carcajadas de los extraños con los que compartía mesa, pero igual bebió solo para darse cuenta lo mal que sabía y las risas volvieron a retumbar chocando los vasos con el suyo a modo de brindis