¿Qué? No, no, y no. Aquello no era posible. --¡No!—grito eufórico, angustiado--. No hagas esto, Hyukjae. Yo no te quiero perder.
Hyukjae pasó a su lado, dejándolo a él inerte parado a un lado de la cama.
--Quien perdió fui yo—declaro, mirándolo por sobre su hombro--. Te perdí, Donghae—y salió de prisa de la habitación, sin volver a mirar atrás.
Tras cerrar la puerta a su espalda, sabía muy bien lo que estaba haciendo. Sabía claramente que estaba dejando ir a su Donghae.
--Así tan fácil, después de todo lo que han pasado para estar juntos... Lo dejaras sin luchar--. Grazno Heechul, parado en la sala deteniendo su huida.
--¿Acaso hay un sentido por luchar por lo nuestro? Puede que esto sea lo mejor para ambos—contestó secamente, caminando hacía la salida. Tenía intenciones de irse de ahí. Más la mano de Heechul volvió a detenerlo.
--No seas ridículo, Hyukjae. Ustedes han pasado por tanto y todo lo han superado. Ahora no es momento de que te rindas. No lo hagas. No le dejes ir...
Hyukjae se zafó bruscamente del agarre de Heechul--. Soy un cobarde porque ya no tengo ganas de luchar, Heechul. Le he hecho tanto daño. No, no puedo hacer esto. No quiero aferrarme a él—declaro con firmeza, antes de salir a zancadas grandes del departamento.
Dejando a Heechul en shock. Pero es qué, ¿acaso nadie podía entender el dolor en su corazón? ¿El dolor de haber perdido a su alma gemela sin tener oportunidad de luchar por ella? Parecía que no. No quería ir a casa y escuchar las preguntas que le harían al verlo tan mal. No quería escuchar la voz de Donghae. No quería las molestas llamadas de sus compañeros o de su manager. Tampoco quería la lastima de las personas. Nadie podría entender el dolor que atravesaba su corazón, ni el porqué estaba tomando esa decisión después de todo lo que habían pasado juntos. Apagando su móvil, reviso su cartera que por suerte tenía lo suficiente para esta noche. Abrazándose a su chaqueta, se adentró a la fría noche y camino en busca de un hotel donde pudiese pasar la noche. Donde pudiera derrumbarse y dejar caer sus lágrimas. Un lugar donde pudiera ser Lee Hyukjae, el hombre enamorado y herido a causa de Lee Donghae.
POV HYUKJAE
Tras caminar por largo rato bajó la fría noche, sumido en mis penas y aguantándome las ganas de llorar, logro encontrar un hotel. Poniendo mi mejor cara, mi mejor sonrisa, me acerco a la recepcionista a pedir una habitación. Minutos después, me indicaba hacía donde caminar para llegar a mi habitación. Dándole las gracias, me marcho a la pequeña habitación que sería testigo de mis lágrimas, de mi dolor, de mi corazón herido intentando levantarse. La habitación era más pequeña de lo que imaginaba; una cama pequeña se posaba en medio, una puerta esquinada y un gran ventanal daba la vista oscura de Seúl. Aunque ahora, realmente no importaba mucho tener lujo o comodidad. Sólo quería echarme a llorar. Sólo importaba estar solo para poderse desahogar, gritar, llorar y maldecir. Para que estas cuatro paredes blancas fueran testigo del dolor que era causado por la estúpida idea de dejar libre a Donghae.
Cierro la puerta a mis espaldas y camino hacia el ventanal, parándome delante de él admiro las luces que acompañan esta noche. Una gota recorre mi mejilla derecha, sin apartar la vista subo mi mano a mi mejilla. Tocando mi lágrima, la primera de esta noche. Sin dejar de mirar las lucen centellantes, recuerdo cada memoria de nosotros juntos, me debilito hasta dejarme caer de rodillas. Cubro mi rostro con ambas manos, amortiguando el grito desgarrador que viene de mi corazón. Poco a poco voy quedando ajeno a todo, sintiendo únicamente mi dolor, ese que quema por dentro, que me hace desear correr a ti, pero mis piernas débiles y temblorosas no me dejan. Me apoyo del marco del ventanal, luchando por levantarme sólo para arrastrar mis pies hasta la cama. Me acuesto de costado, mirando el paisaje del ventanal que va formando tu rostro sonriente, ese que pensaba era sólo para mí. Veo tus ojos llenos de amor, amor que pensé era sólo mío. Quiero dejar de llorar, de pensarte, de sentir dolor pero entonces el recuerdo del porqué tome la decisión de soltar tu mano, vuelve a mí. Gritándome que he hecho lo mejor para los dos. Que he hecho bien dejándote ir.
ESTÁS LEYENDO
{EUNHAE} LA SEMILLA DE TU AMOR.
FanfictionPAREJA: EUNHAE GENERO: Relación hombre-hombre, mención de parejas hetero. Mpreg (embarazo masculino) TEMA: ROMANCE. DOLOR. LUCHA. ACEPTACIÓN. ADVERTENCIA: Contenido de escenas explicitas. ACLARACIONES: LA HISTORIA PERTENECE, EXCEPTO LOS NOMBRES...