{EUNHAE} LA SEMILLA DE TU AMOR.

Capítulo 23. "Soy un hombre"

-Vamos al hospital–Escucho la voz de ella mientras te veo.

Sollozas por el esfuerzo, sudas y al tocarte tu cuerpo arder en calentura. Te has desmayado

Hemos llegado al hospital. Te han llevado en camilla pues tu cuerpo ardía en fiebre mientras tú ibas delirando y sollozando por palabras que no entendíamos. Estaba asustado y llorando mientras era abrazado por Zoé, quien intentaba calmarme. Solo habíamos venido los dos al hospital contigo aunque los demás quisieron acompañarnos, ella les negó el permiso.

-Sería muy arriesgado-Era lo que les había dicho, prometiendo mantenerlos al tanto de tu salud.

Ya han pasado algunos minutos y nadie nos dice nada. Mis nervios están a flor de piel. Afortunadamente mi llanto ya había pasado pero mis nervios me traicionaban dando vueltas de un lado a otro en el pasillo, mordiéndome las uñas.

-¿Puedes tranquilizarte un poco?– Me regaño Zoé.

Pero no podía, si había algo que odiaba era verte enfermo y no saber que tenías, inmovilizado sin poder hacer nada.

-El estará bien, ven a sentarte-Ella palmeo un asiento a su lado-Anda, antes que acabes con mis nervios por verte venir de un lado a otro-Ella se notaba tan tranquila mientras yo no podía con mis nervios.

Un doctor por fin se nos acercó:

–Pacientes del señor Lee Donghae-Su semblante era serio y eso me hacía sentir más nervios.

-Lo somos-Zoé hablo por mí.

-Doctor Chung- Se presentó, mirando una tabla con papeles que tenía en su mano, mirándonos a nosotros serio y con el semblante preocupado, juro que si no me decía que pasaba, arrancaría esos papeles de sus manos para leer lo que pasaba con mi Hae- Síganme por favor.

Mire a Zoé quien solo camino detrás del doctor, tomando mi mano dándome fuerzas para caminar.

Al entrar a la oficina del doctor, ahí en un rincón en una camilla estabas recostado mientras una doctora tomaba tus datos. Al verme tus ojos comenzaron a llorar.

-Hyukkie-llamaste por mí, pidiendo acercarme a ti-. No me dicen que tengo, solo me miran raro, como ella.

Se refería a la doctora que nos miraba raro haciendo sentirnos incomodos.

-Puede retirarse-Se escuchó la voz del doctor pedir a la enfermera, quien antes de abandonar la habitación nos miró sería y con un semblante de haber visto un fantasma.

-¿Puedes ponerte de pie?-El doctor le pregunto a Donghae.

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-Puedo hacerlo-Con la ayuda de Hyukjae el castaño fue levantándose lentamente, sintiendo un poco de mareo.

Los tres se sentaron frente al escritorio del doctor, esperando por una respuesta que el doctor no les daba y sólo los miraba de igual forma extraña que la enfermera.

-Si esto fuera una gripe, ya hubieran dejado salir a Donghae–Zoé cansada de la mirada del doctor, decidió romper el silencio – Así que suéltelo de una vez.

El doctor antes de hablar tomo un fuerte respiro-¿Son pareja?– Señalo a Hyukjae y a Donghae.

-Lo son–. Respondió por ellos Zoé, dispuesta a maldecir si se atrevía a insultarlos. El doctor apunto aquello en una hoja.

-Antes de hablar de lo que pasa contigo, Donghae. Necesito que los tres estén tranquilos – El doctor, por muy exagerado que pareciera, tenía alcohol y algodón preparado por cualquier cosa.