Princesa Por Error {GMLRS}

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— Señores y señoras, les presentamos a la nueva princesa de Londres, Selena — las puertas se abren y salgo con mi vestido que me llega hasta los pies.

Espera, no os he contado porque estoy con un vestido y gente por todos los alrededores. Bueno, básicamente soy princesa. Nunca me imagine que esto fuera a pasar.

— Princesa, podría decir algunas palabras — el rey de España, el que mis padres han invitado, me saca de mis pensamientos.

— Oh, si, perdón, estaba sumida en mis pensamientos — me subo en el mini escenario — Probando, ¿hola? Perdón, es una de mis manías. Bueno, como han escuchado soy la nueva princesa, Selena — me quedo por un momento pesando, esto no estaba ensayado — Mira, yo no voy a dar un discurso diciendo lo maravilloso e increíble que es ser princesa.

— Yo antes de ser princesa era — miro a donde están "mis padres" diciendo con señas de que paré — Y no voy a acabar aquí, yo antes vivía como cualquier persona, en una casa, con mi padre, iba a la universidad, y por si preguntáis, mi madre está muerta, si, lo e soltado tal que así. Yo antes de ser princesa era pobre, mi padre era un drogadicto, si lo se muy fuerte, e pasado momentos inexplicables, y yo no sabía que iba a poder explicar todo esto frente a miles de personas. Muchas gracias por haberme escuchado. Papá, mamá, lo siento si no era esto lo que esperabais, pero necesitaba explicarlo — todos los que estaban sentados se levantan y aplauden, yo me quedo bastante sorprendida.

— Vale, esto a sido un poco raro y a la vez sorprendente. Señoras y Señores, la princesa de Londres, Selena — y otra vez vuelven a aplaudir. No me imaginaba que iba a pasar esto, pensaba que me iban a abuchear o algo por el estilo.

•••••

— Ha sido increíble, gracias a todos ustedes por haber venido y haber prestado un poco de su tiempo para verme, adiós y muy buenas — y por fin ya se van todos, estoy agotada. He bailado creo que con todos los príncipes, y me han dejado los pies bonitos.

— Hola Selena, por lo que veo estás bastante chuf — Daniel se sienta a mi lado, presto toda mi atención en él.

— Si tu supieras, nunca en la vida me han pisado los pies como si la vida les fuera en ello — los dos soltamos una pequeña risa — Bueno, voy a recoger todo el desorden de aquí — me levanto dispuesta a recoger, pero mi madre me interrumpe.

— Selena hija, las sirvientas lo recogen — y a la fuerza me vuelve a sentar.

— Mamá, también podía ayudar, tengo dos brazos y dos piernas, puedo ayudar perfectamente — me vuelvo a levantar y mi madre me mira con cara de pocos amigos.

— Como se notas que vienes de familia baja — ya empezamos otra vez.

— Sí, vengo de familia baja, me han educado como a cualquier adolescente, me han enseñado que cuando deja una cosa tirada las recoges, y yo aquí veo mucho desorden. Así que si me disculpas voy a recoger — me voy de ahí echando humos por las orejas. Me molesta mucho que otras personas recojan algo que nosotros hemos ensuciado.

Daniel

Miro a mi madre que se sienta a mi lado y agacha la cabeza.

— Soy la peor madre del mundo, ¿como se me puede pasar por la cabeza y decirle eso?

— Mamá, no eres la peor madre, eres la mejor, solo que Selena no es... Como nosotros.

— Ya, eso lo se. Voy a pedirle perdón, es mi hija y no quiero que se sienta incómoda en cualquier momento — se levanta de la silla y se va.

Selena

Estoy con las sirvientas ayudándolas a recoger.

— Princesa no hace falta que nos ayude — ya me estoy empezando hartar de que me digan princesa.

— No me llames Princesa, soy Selena, no me gusta que me llamen Princesa.

— Vale, lo siento no se volverá a repetir — vale, tendría que haber sido más cuidadosa.

— No, lo siento yo por hablarte así. Pero llámame Selena.

— De acuerdo Selena. Yo soy Wendy.

— Y dime Wendy, ¿cuanto tiempo llevas trabajando aquí? — pregunto muy intriga.

— Pues yo estaba en un momento bastante difícil, no teníamos suficiente dinero, y aparte tengo dos hijos, una niña que se llama Lina, y un niño que se llama Jack, son una ricura. Y pues veía que no íbamos muy bien, pero al poco tiempo vi que la reina solicitaba sirvientas y pues aquí estoy.

— Selena, ¿podemos hablar un momento? — mi madre entra por la gran puerta.

— Claro, adiós Wendy — me despido de ella. Sigo a mi madre hasta el sofá.

— Creo que ya estarás cansada de que este pidiendo disculpas a cada segundo, pero esto es nuevo para ti Selena, y no quiero que te sientas incómoda en cualquier — sin esperarlo más le doy un abrazo.

— Si que estoy un poco cansada de tanta disculpa, pero eso no quita de que vosotros me hayáis acogido, y no parecerá normal que una princesa recoja, pero ya sabes, no me gusta que otros recojan lo que nosotros hemos ensuciado.

— Selena, me encantaría que algún día nos enseñarás a vivir como personas normales o algo por el estilo.

— Vale, me parece bien, pero a mi también me encantaría que me enseñaras lo que hace una princesa, ¿de acuerdo? — alzo la mano y mi madre la alza para dar comienzo a una nueva vida.

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Hellooo

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