2

5.4K 317 85
                                    

20 de Noviembre

Hoy era la fiesta de Christopher, y Erick ya no pudo soportar los gritos de felicidad de Zabdiel.

–¡Es que no lo puedo creer! Voy a ver a Christopher por más que 15 minutos, ¡es genial!– dijo Zabdiel. Erick bostezo, tapándose la boca.

–Si, si. ¿Ya te puedes cambiar?– dijo el oji-verde.

–No se que ponerme. ¿Blanco o negro?– preguntó Zabdiel. Erick se encogió de hombros.

–Negro. Ya sabes– caminó hacia el armario de su amigo, escogiendo una playera blanca con pantalones negros y zapatos negros. –Ya, ahí tienes lo que te vas a poner.

–Que asco. ¿Piensas que a Christopher le va a gustar eso?

–Si no le gusta se puede ir a la verga– Erick sonrió con falsa inocencia. Zabdiel rodó los ojos y empezó a ponerse la ropa que le escogió el cubano. –Buen chico.

Zabdiel sacudió la cabeza y se perfumó antes de salir de su casa. Erick iba atrás de él, casi corriendo porque Zabdiel caminaba rápido.

–Oye, espera. No te emociones tanto– se recargó sobre el carro, respirando. –Uff, necesito ejercicio.

Zabdiel se rió. –Si, claro. Súbete– se subieron al carro azul y Zabdiel empezó a manejar. Erick le subió a la radio porque no le gustaba el silencio.

–Iu, cámbiale– dijo el puertorriqueño. Erick se encogió de hombros.

–¿Por?

–Mi coche, mi música. Ahora cámbiale o te dejo aquí mismo, en la calle– lo amenazó. Erick se rió.

–Claro, déjame, a ver cómo te va con Chris– dijo entre risas. Zabdiel suspiró y gruñó.

–Solo lo hago por mi relación con Chris.

[••]

Erick y Zabdiel entraron al la casa grande, tapándose los oídos.

–Mierda, sabía que iba a ser así– gritó Erick. Zabdiel solo asintió porque no escuche nada de lo que dijo su amigo. Siguieron caminando hasta que se fueron afuera, donde no estaba tan fuerte la música. Zabdiel miraba por todos los lados, buscando a Chris.

Erick caminó hacia una banca que tenía afuera, alrededor de una fuente.

–Okey, yo pienso que nos quedamos unos cinco minutos y luego nos vamos. Apesta a alcohol y cigarros– dijo el cubano.

–¿Eso que tiene?– preguntó.

–No me gusta.

–Bien. Ayúdame a buscar a Chris y luego nos vamos– dijo. Erick sacudió la cabeza.

–Tengo que ir al baño, ahorita vengo y te ayudo– se paró de la banca.

–No te tardes. Mándame mensajes para que sepa que estás bien.

–Si, papa– Erick rodó los ojos antes de empezar a caminar. Otra vez entró a la casa ruidosa, mirando a como las personas se besaban con ganas.

Lo Que Me Hiciste - Joerick [✔]Where stories live. Discover now