Capítulo 11

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      Los minutos progresaban, Stan seguía sin pronunciar palabra alguna; sentía que si decía algo indebido Craig rompería a llorar o algo así. 

    Pero a diferencia de lo que pensaba él, el otro pelinegro mantenía sus facciones monótonas sin pensar en nada específico.    

– Entonces... ¿Qué tienes en mente? –Craig hablaba mientras buscaba en su mochila 

– Está bien, debo admitir que no esperé nada como esto y pues... no lo sé amigo, es difícil saber como actuar en este caso –

      Sacó una cajetilla de cigarros– Sí... yo tampoco pero aquí estamos, te escucho fuerte y...– Escogió un cigarro para tomarlo entre sus dedos–... Claro –Lo prendió

– Ahhh... –Stan carraspeo y desvió la mirada– Oye no quiero ser el amigo amargado que te diga que apagues eso pero me entro humo a los ojos y me arden –

– Que tragedia para ti –Caló el cigarro y  le arrojo todo el humo– Ups –

– No entiendo como a veces eres genial y otras eres un completo tonto –

– Sí, yo tampoco lo entiendo es como si una fuerza sobre humana me hiciera actuar de esta manera y al momento siguiente cambiar de actitud pero dejando eso de lado todavía no escucho ninguna de tus grandiosas ideas –

– Es que yo... –

     Craig suspiró– Ya lo veía venir –Aspiró del humo pero está vez de una manera más prolongada y luego lo expulsó– Nunca espero nada de ti y aún así logras decepcionarme –

– Eso es de Malcom el de...–

– Esto es serio Marsh, si no hago algo rápido ese mojon llamado Kenny se va a llevar algo muy importante para mí y si eso llegará a pasar déjame decirte que las quemaduras con el cigarro duelen...–Acercó peligrosamente el cigarro a la mejilla de su acompañante– Y mucho...–Lo alejó para ponerlo en su boca

– Pero no tanto como el ver que tu amorcito se va con otro –

     Craig dejo caer el cigarro de la impresión.

– ERES UN CABRÓN...–Estaba a punto de abalanzarse en contra de Stan pero este rápidamente sostuvo los brazos de Tucker

– ¡YA! ¡ESPERA! ERA BROMA, ¡JODER! –

– Suéltame, tus bromas son una mierda –Lo empujó– ¿Me vas a ayudar o no? –Preguntó enojado

– Pues sí, yo te lo propuse y no me voy a echar para atrás –

– Vale, prosigue con el objetivo –

– Kenny sabe muy bien tu punto débil ¿Cierto? –

– Claro que no, no conoce a Stripes V –Señaló Craig

     Stan puso su mano en la frente– Esto será un poco complicado considerando el grado de mentalidad que tienes –

– ¿A qué te refieres? –

– Me refería a Tweek, él es tú punto débil ¿O no? –

– Ah sí, supongo, nunca lo había pensado... ¿Y eso qué? –

– Si conoce tú debilidad a estas alturas de nuestras vidas ya debes de saber la de él –

– Ehhhh... no lo sé... ¿La porno?... –

– Exacto, vamos a ir a su casa y le tomamos las revistas porno, será como un secuestro exprés, no se las devolvemos hasta que deje libre a Tweek –

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