Unidos mas que por el tenis-parte II

Sobreviviendo

Capítulo 28: Sobreviviendo.

Narrado por Ryoma:

Sakuno y yo nos encontrábamos frente a su casa, ella no había pronunciado ninguna palabra en todo el camino, yo al estarla viendo de reojo note que se encontraba muy pálida y con la mirada perdida.

Busque entre el bolso de Sakuno sus llaves para poder ingresar a la casa, al hacerlo note que la casa estaba vacía pero lo que me asusto en sobremanera fue sentir como la mano de Sakuno se separaba de la mía cayendo de rodillas en el recibidor, temblando levemente y seguido de eso el llanto se hizo presente.

–Saku ¿Te duele algo? ¿Te sientes mal?– dije con inmensa preocupación.

Ella agito su cabeza en forma negativa.

– ¿Entonces dime que te sucede?– le dije con cariño, arrodillándome frente a ella.

–Lo si-siento– dijo de forma entrecortada –Lo si-siento por a-arruinar tu ca-carrera de tenista– dijo con total sufrimiento.

–No tienes que disculparte, recuerda que yo también soy culpable– le dije levantándola del suelo para llevarla a su habitación. –Ven vamos a tu habitación, necesitas descansar, más tarde hablaremos de esto– le dije apoyando el mayor de su peso en mi para que no se tropezara.

Al llegar a su habitación recosté a Sakuno en su cama y yo me coloque junto a ella rodeándola con mis brazos, por un momento permanecimos en silencio, hasta que ella decidió romperlo.

–Ryoma– dijo con suavidad.

–Si Saku– le conteste con delicadeza.

–Creo que no debes dejar el tenis por mí– dijo con seguridad.

–Mmm eso ya está decidido pequeña– le dije con calma –Yo quiero estar lo más pendiente posible de ti y si estoy entrenando o en un partido no voy a poder estar concentrado al 100%– dije como explicación.

–Lo sé, pero realmente me siento triste de no poder verte jugar, yo se lo feliz que eres jugando tenis y por eso no quiero que lo dejes– dijo con real sufrimiento.

–Es que no siento ganas de jugar, siento que tú eres más importante y quiero tener solo mi atención en tu bienestar– dije decidido.

–Vas a perder tu buena forma si no prácticas y para cuando nazcan los bebes no vas a poder retomar con tanta facilidad los entrenamientos– dijo preocupada.

–Saku, no sé porque te preocupas por eso, si luego podremos recuperarnos juntos– dije tratando de animarla.

–Ryoma, quiero que juegues, quiero ir a los torneos a verte, quiero verte entrenar y de verdad seré muy feliz– dijo suplicándome.

–Pero...–

–Pero nada Ryoma Echizen– dijo interrumpiéndome con tono molesto –vas a seguir jugando tenis por el bien de los cuatro ¿entendiste?– dijo mirándome con fijeza.

La mire por un segundo un tanto molesto –creo que no me vas a dejar otra opción– le dije con sequedad –lo hare, pero en el momento que yo sienta que necesitas que yo este solo a tu lado lo dejare de lado ¿estás de acuerdo?– le pregunte con seriedad.

–Gracias Ryoma eso me pode muy contenta– dijo abrazándome.

–Mañana hablare con Tezuka, pero recuerda que yo no puedo jugar en los torneos por órdenes del director, así que no sé cuándo volveré a jugar– dije zanjando el asunto.

–Con que vuelvas a la cancha seré feliz– dijo con una sonrisa. –Ryoma hay otra cosa de la que quiero hablar– dijo cambiando de humor a un poco desanimada.