Capítulo XXXV ®© Cena Bajo Las Luces Nocturnas - Parte III -

111 33 26
                                    

Narra Sara Parker.

Bailamos un buen tiempo, entre risas y miradas coquetas entre ambos.

- ¿Tienes frío? -Cuestionó él.

- Sí -Confesé con una ligera risita.

- Ten. -Dijo Harry quitándose el saco que traía sobre el cuerpo.

- ¡Alto!, no quiero que, por mi culpa, tu sufras frío. -Musité impidiendo que lo quitara de sí.

-Descuida, no tendré frío mientras tu no lo tengas Sara. -Sonrió.

-Pero..

-Ten. -Lo situó sobre mis hombros y luego yo adentré mis brazos en las mangas, era muy grande.

-Eres un mutante -Reí.

-Eres tan infantil -Sonrió.

-Cállate -Ordené entre risas.

-Vamos, aún hay una sorpresa más.

-¿Sí?

-Yep. -Sonrió dejando a la vista sus blancos dientes.

-¿Te puedo preguntar algo? - Harry mi observó dudo y acepto haciendo un gesto con su cabeza- Los chicos... ¿Que hacen aquí?

-Pensé que seria bueno que vinieran, ¿No te gustó la idea?

-Me encantó, eso solo que pensé que esto seria un poco mas íntimo. -Me sonroje al decir las últimas palabras.

-Tranquila que para ello, habrá mas tiempo. Te quiero para despertar en las mañanas contigo, no para irme después de ... -Hizo una pausa nerviosa - Ya sabes -Sus mejillas estaban ardiendo.

- ¿Con la boca llena de mal aliento, totalmente somnolienta y mas enojada de la que acostumbro? -Entre cerré los ojos.

- No olvides también con el cabello alborotado. Sí, eso quiero Sara Parker.

Y con esas ultimas palabras dichas, nuestros labios magnéticamente se acercaban con fuerza, amaba besar los labios de Harry.

Nos dirigimos al hermoso árbol cubierto de luces que se encontraba allí y tomamos asiento bajo éste.

" Siempre se cambia el amor de tu vida,
O por otro amor, o por otra vida "

-Leyó en voz alta y me sonrió- Eso hago. -Sentí como un intenso color rojo se apoderaba de mis mejillas, mordí mi labio inferior- ¡No hagas eso! -Exclamó.

-¿Qué cosa? -Cuestioné confundida.

-No muerdas tu labio... ¿Sabes lo que causa en mí eso? -Sonreí.

-No..-Dije dudosa.

-Vuelves un nudo mis pensamientos y hormonas. -Reí.

-¿Qué?, tú sonríes, estamos a mano, ¿No? -Sonreí.

-Vale vale... -Susurró con su mirada hacia otro lugar, curvando sus labios en una sonrisa- Toma.

Harry me entregó una galleta de la fortuna, y dejo una para él.

- " Si no puedes llamarla, ¿Por que sigues sentado ahí? Ve a verla " -Dijo Harry confundido.

-Que mensaje tan extraño -Mencione para abrir luego mi galleta.

- ¿Qué dice la tuya? -Giró su cabeza y me quedó mirando directamente a los ojos, de nuevo.

- Ahm.. -Tomé la galleta en mis manos y la abrí, el papelito salió o más bien, cayó al suelo- "¿Quieres ser mi..." - Terminé mentalmente la nota, no comprendía.

No bastó con leerlo una vez, debí leerlo aún más veces para comprenderlo, y aun así no comprendía.

- "¿Quieres ser mi aliada?" -Musité en voz alta, le miré incrédula y él, nada más sonrió dulce.

-Tal vez no lo entiendas, te explicaré. Ambos buscamos el amor de nuestra vida, pero ¿que pruebas tenemos de que existan? Tal vez nunca los encontremos y jamas amemos de verdad. - Lo seguí mirando a los ojos - Entonces Quiero que seamos aliados en busca del amor de nuestras vidas y si ellos no aparecen, pues contigo. -Dijo con una risa y mirando a las luces.

- Seremos aliados, por una causa, por una razón, por un ideal. Compartir los mejores momentos juntos hasta que encontremos el amor.

- Quiero que tu seas el amor de mi vida.

- Yo también quiero eso.

Ambos sonreímos.

Sentí como Harry se levantaba de mi lado y quedaba frente a mí, con esos penetrantes ojos verdes que tanto amaba. Sonreí, sonreí como jamás lo había hecho, estaba más feliz que nunca.

Salté de mi lugar y me tiré sobre él, haciendo que ambos cayéramos sobre el suelo. Su melodiosa risa se hizo presente y yo uní nuestros labios en un lento y dulce beso, que, por falta de aire, se deshizo.

- Sara -Susurró él a mi oído- Sara, mírame. -Ordenó.

- ¿Si? -Levanté la mirada, estaba segura de que mis ojos brillaban en ese momento.

- Quiero mi vida junto a tí.. -Corrió uno de los cabellos que se escurrieron por mi rostro hasta tras mi oído- Te Amo.

-Deseo lo mismo. -Sonreí- No quiero un marido gordo y flojo te lo advierto.

Rió nuevamente y yo le seguí, tomó mi mentón y acercó mi boca a la de él, para besarnos, por primera vez, como aliados.

-¡Rayos! Tendré que hacer muchos cambios.
.
.
.
.
.
.
.
Continuará.

¿Cuanto durará esa felicidad?

Aaaaaw. Ya hacia falta algo dulce ¿no?
¡Me tarde en escribir este capítulo por que no tenia muchas ideas!
Sarry (Shipeado) ahora son aliados

¿Que quieren leer en el siguiente capitulo?

¿¡Muy Parecido al Amor!?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora