Los Hijos de La Luz "El Cristal y la Cinco Espadas"

El Secreto del Monte Ararat IV

A la mañana siguiente nos encontramos en el lobby del hotel pagamos la cuenta, al salir del hotel nos subimos a una de las minivan que se encontraba parqueadas afuera. Durante el recorrido de regreso a Van, nos quedamos dormidos. Al llegar al aeropuerto el conductor de las minivan nos despierta diciéndonos — Ya llegamos —, nos despertamos y antes de bajarnos le damos las gracias.

Al entrar al aeropuerto Dimitri se acerca al cubículo de la aerolínea en la cual compro los tiquetes de regreso a Estambul. Al tenerlos en sus manos, no los entrega y pasamos todos los puestos de control, mientras esperamos el llamado de abordaje decidimos ir a la cafetería, ya que no tuvimos oportunidad de desayunar.

Después de un rato nuestro vuelo es anunciado. Al llegar al aeropuerto internacional de Estambul Atatürk, salimos de inmediato para el hotel. Al bajarnos del taxi y entrar al hotel vemos al padre Damián, sentado en uno de las sillas de la sala de recepción del hotel, con su rosario enrollado en la mano.  

Al vernos entrar se levanta de la silla y camina hacia nosotros, entre tanto los amigos de Dimitri se dirigen a la recepción para registrase. El Padre Damián al acerca a nosotros, nos dice — No saben cuánto he rezado, para que todos ustedes estén bien. Pero dígame ¿qué pasó con el seguidor de Baltasar? —.

— No era un seguidor de Baltasar ¡era Baltasar! —le dice Dimitri en voz baja a su tío, para que nadie lo escuchen.

— Le contaremos todo lo que paso, pero antes permítenos registrarnos —le dice Alan

— No será necesario, ya lo hice —nos dice él.

Santiago al acercarse al Padre Damián le dice — Disculpe Padre la recepcionista nos dijo, que usted nos registró —.

— Si, aquí están llaves de sus habitaciones, la 408 y 412 es de ustedes señoritas; y las habitaciones 404 y 415 es la ustedes caballeros —nos dice el padre Damián entregándonos las llaves.

Anderson quitándoles las llaves a Dimitri dice — Bueno iré a descansar un poco antes de que nuestro vuelo salga hacia Madrid, ya que el trayecto es un poco largo —.

— Espéranos Anderson, no eres el único que quiere descansar —le dice Guido.

Al irse los amigos de Dimitri el Padre Damián nos dice —Ahora si me van a decir ¿qué paso? —.

En ese momento Alan bosteza y Dimitri le dice — Te lo contaremos todo más luego tío, venimos muy cansados —

— Está bien, hablaremos más luego —nos dice el Padre Damián.

En las horas de la noche nos encontramos con el Padre Damián en el restaurante del hotel. Le contamos todo lo sucedido en el Monte Ararat. Al terminar nuestra conversación llegan los amigos de Dimitri, y pedimos algo para cenar.

Durante la cena noto a Santiago más cansado de lo que había llegado y le dije — ¿Qué te pasa?, Santiago —.

— Porque la pregunta, Luna —me dice él.

— Te veo sin ánimo —le dije.

— Tanto se me nota.

— Si —le responde Livi.

— No pude dormir muy bien —.

— Y eso ¿Por qué? —le pregunta Mónica.

— Pensado ¿en quién subió con nosotros?, al monte Ararat.

— Sea lo que sea, pienso que no era de este mundo —dice Live.

— ¿Por qué dice eso? —le pregunta Santiago.