Él (Marco Asensio)

Capítulo 28

Por fin llega el día que tanto tiempo hemos estado esperando. Estoy cogida del brazo de mi padre avanzando hacia Marco, antes de soltarme mi padre me dice:

- Enhorabuena mi niña, espero que seas muy feliz - me da un beso, se va a su sitio y yo me pongo al lado de Marco.

- Estás impresionante - me dice.

- Tú también - le digo.

El cura empieza a hablar y llega el momento de la pregunta del millón.

- ¿Quieres recibir a Irene, como esposa, y prometes serle fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, y, así, amarla y respetarla todos los días de tu vida?

- Sí, quiero.

- Irene. ¿Quieres recibir a Marco, como esposo, y prometes serle fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, y, así, amarlo y respetarlo todos los días de tu vida?

- Sí, quiero.

- Puedes besar a la novia - dice el sacerdote mirando a Marco y él me besa.
Después miro a mis padres que están en primera fila llorando a moco tendido, Carla también está llorando e Isco aunque quiera aparentar que no se ha emocionado.
Luego nos vamos al jardín donde están listas las mesas para cenar y durante la comida Carla coge la copa y el tenedor y empieza a pegarle para que la atiendan y acaba rompiendo la copa y todos se ríen.

- Bueno luego los novios ya la pagan. Yo quería felicitaros - dice mirándonos. - Espero que seáis felices porque os lo merecéis y tendrías que darme las gracias, sobretodo tú Marquito, que si no hubiera sido por mi no habrías vuelto a ver a Irene.

- Es verdad, todo la razón. Gracias Carlita - le responde Marco y yo me rio.

Después mientras todos empiezan a emborracharse y a bailar, Marco me lleva a un jardín apartado para estar solos.

- Yo preferiría hacer el discurso en privado. A ti no te puedo dar las gracias por aparecer en mi vida porque fue gracias a Carla y además sé que tú no querías saber nada de mi pero si te doy las gracias por hacerme feliz todos los días. Me acuerdo cuando yo te decía que acabaríamos juntos y tú ponías cara de "más quisieras". Te amo - yo no puedo parar de llorar y le abrazo.

- Yo te quiero mogollón Marquito. Tienes que reconocer que estabas demasiado seguro de ti mismo, muy subidito, y si me pareciste muy guapo pero no me interesabas para nada y al final mira.

Cuando ya es tarde Marco y yo nos vamos para irnos de viaje una semana. Como dijo el día que me llevó a Miconos, para la luna de miel nos vamos a las Maldivas.

Ha pasado una semana ya desde que llegamos a las Maldivas y hoy ya nos toca volver, no me quería ir yo quería seguir tirada en la arena con Marco al lado o dentro del agua pero toca volver a la realidad además a Marco solo le queda una semana antes de empezar la pretemporada.

- Marco me quiero quedar aquí, si de verdad me quieres no me obligues a volver - digo haciendo un poco de teatro y el se rie.

- Te quiero pero no podemos quedarnos, si quieres cuando vuelva a tener vacaciones volvemos - dice y me da un beso.

Hola traigo malas noticias...
La historia llega a su fin, le quedarán dos o tres capítulos.