Hey, Stupids!

46. "El Juego de los Secretos"

Alicia

Las olas chocando contra el casco del yate hacen que me despierte y abra los ojos levemente, encontrando la cama de al lado vacía.

Tardo un poco en acordarme de lo que pasó ayer, pero por fin lo recuerdo: los chicos del barco de enfrente, Evan fijándose en el asiático, Caleb y el resto de chicos y chicas haciendo el tonto.

Me levanto con toda la tranquilidad del mundo, escuchando algunos gritos y risas en el pasillo.

Por ello y, deseando salir, me pongo el bikini a toda prisa y un vestido ancho y salgo.

-¡Ali ya ha salido de la habitación! ¡Buenos días! -Caleb se lanza encima de mí, casi haciendo que me caiga.

-Hola, bebés, hoy nos vamos de fiesti por el mar -Charlie aparece con un bolso más grande que su propia cabeza y el móvil en la mano.- Mi marido también viene, él es el encargado de todo.

Ryan y Blake aparecen por el pasillo y se acercaron a toda prisa.

-Hey, tíos, vamos afuera. El resto están ahí.

El rubio no tarda mucho en darle un golpe a Blake y salir corriendo.

Caleb, Charlie y yo salimos afuera, encontrándonos al resto. Evan se da la vuelta hacia Charlie y se acerca toda prisa, caminando como si quisiera marcar sus inexistentes curvas.

-Ay, pero qué conjunto más divino me llevas. Un día de estos me lo tienes que dejar.

-Cuando quieras querido.

Oculto una sonrisa y nos acercamos a los demás. Están desayunando mientras charlan animadamente.

-Ay Bella -Charlie le coge la cara con ambas manos-, pero que alegre estás y que guapa. Mira que colores de cara y que pelo más sedoso...¿Has tenido sexo eh?

Ryan estalla en carcajadas y el resto lo acompañamos mientras Bella se sonroja visiblemente. Lo que me resulta raro porque a Bella no le da vergüenza nada -o casi nada-, por lo menos eso creo.

Me siento al lado de Anaïs y cojo una tostada de todas las que han hecho. La conversación se centra sobre todo en el próximo trimestre y todo lo que ha pasado desde hace unos meses hasta ahora.

Sí, han pasado muchísimas cosas.

Alzo la vista hacia los ojos de West. Siguen siendo tan bonitos como el primer día que los vi, aunque claro, tampoco ha pasado una barbaridad de tiempo. Me sonríe y yo hago lo mismo. Se lleva la mano al aro de su labio y sin saber siquiera por qué me muerdo el labio inferior.

«Oh Dios»

-¿A que sí Alicia?

Miro extrañada a Alex. ¿Qué me ha preguntado?

-¿Eh?

Ella sonríe y sé que es consciente de que me he embobado mirando a West.

-A que no te esperabas encontrar unos amigos tan...como nosotros.

-Desde luego que no -río.

Doy un sorbo a mi vaso de zumo de piña. Charlie nos habla un poco sobre la travesía que haremos y sobre barcos. Sabe mucho y me encanta escucharlo.

-¿No mareará mucho, no? -cuestiona Dylan visiblemente preocupado.

-Pues depende -contesta Charlie-. Pero, por favor, si vas a vomitar que sea en el váter.

Alex lanza una risita y yo sonrío.

-¡Zarpamos, chiquis! -Evan nos saluda a todos desde la parte de arriba. Está junto al marido de Charlie, el cuál lo mira riendo sin parar.