Mi pelinegra

Capítulo 13

-Sesshomaru te pido que entiendas que yo tenía una vida antes de conocerte y que te conocí hace tres días- su voz era cautelosa, como si hablara con algún maldito perro callejero que teme que la muerda pero que al mismo tiempo sabe que puede domar.

Desgraciadamente sé que tiene razón pero no consigo calmarme.

-No tengo un pasado como el tuyo con Sara, Kagura o cualquier otra chica que sueles frecuentar- no noto malicia o desdén en su tono de voz, es como si simplemente se limitara a exponer los hechos y eso hace que me calme, mi pasado es algo que a ella debería darle asco, es más, es suficiente como para que deje de hablarme, pero me molesta su tono litigante, esta mujer me enfurece y me calma al mismo tiempo ¡Carajos! ¿Siquiera eso es posible?

Si, con ella si...

Me permito respirar profundo para relajarme y al hacerlo puedo pensar con más claridad.

-Me gustas y mucho- me dice acercándose despacio a mí -Quiero que tengamos una relación, que intentemos ser pareja- me dice mientras pone sus manos en mi pecho, su tacto se siente tan caliente que nubla mis sentidos, ella es una sirena y yo el marinero dispuesto a ahogarse por su voz.

-Quiero saber todo- es lo único que puedo articular mientras la tomo de la cintura y la pego a mí.

Ella asiente inmediatamente y con solemnidad, para después sonreír con malicia.

-Así será, pero primero...- No dice nada más, lo próximo que se es que sus labios se juntan con los míos de una forma tan tierna que me hace estremecer, tardo un par de segundos antes de corresponder, la aferro más a mí, esto es maravilloso, sus carnosos labios son toda una experiencia, su aroma a jazmín es exquisito, ella me sujeta con fuerza, como si no quisiera soltarme jamás y yo le respondo con la misma intensidad.

Poco a poco el aire empieza a faltar y nos separamos para vernos a la cara, sus ojos brillan con intensidad y están ligeramente oscurecidos por el placer, tiene un hermoso tono rojizo en sus mejillas y veo sonríe para mí, mi pecho se llena de orgullo, ella es preciosa y está conmigo, quiere tener una relación conmigo.

Por un momento me permito olvidar todas las reservas que sentía hace un momento respecto a ella.

-No me parece suficiente- dice con voz queda antes de volver a besarme, es un beso diferente, apasionado y voraz, su lengua se introduce en mi boca con experiencia y es delicioso, suelta un gemido de placer y siento a mi libido despertar con fuerza, mi miembro se roza con su vientre y suelto un gruñido de éxtasis mientras la pego más a mi cuerpo, ella toma un poco de impulso y salta rodeando mi cintura con sus piernas, mi miembro se roza con su intimidad y ambos jadeamos excitados, nos separamos y al verla esta furiosamente sonrojada y con un brillo lujuriosos en su mirar.

-Sesshomaru- mi nombre jamás había sonado tan bien, tan candente, dulce y erótico, ella se acerca a mi oído y pasa su lengua por mi lóbulo mientras mueve un poco sus caderas provocando una sensación inigualable, luego muerde mi lóbulo y siento una descarga recorrer mi cuerpo, me susurra unas palabras al oído.

-No sabes cuánto quisiera que me hicieras tuya- su voz está cargada de placer y suena realmente ansiosa, empiezo a simular fuertes embestidas y ella tiembla en mis brazos mientras gime con más fuerza, en un intento por acallar su sentir me muerde fuertemente en el hombro, provocándome aún más placer.

-Rin- oigo que dice con mucho esfuerzo y luego recuerdo que ella está en la casa -Debes bajarme- Me dice cuando no la dejo separarse, para después renuentemente hacerle caso.

Su rostro luce satisfecho.

Me gustaría decir lo mismo, si, fue maravilloso, pero quería más.

Mucho más.

Por siempre más.

-Me alegra saber que no te soy indiferente- me dice viéndome a los ojos y siento que me ruborizo, maldición parezco colegial, esta mujer no es lo que esperaba, cada vez me sorprende más.

-Eso debería decirlo yo- jamás había oído mi voz tan ronca como ahora, esta irreconocible hasta para mí, la deseo, pero más que desear su cuerpo, la deseo a ella para siempre, ya lo decidí, quiero que sea mi novia, mi compañera, mi mujer, mi hembra, mi esposa, la madre de mis hijos... ella es, ella es quien está del otro lado de mi hilo rojo.

Ok, ok, lo sé, sé que estarán pensando que talvez es muy pronto y que Kag en esta historia es muy... ¿Impulsiva? ¿Aventada? ¿Descarada? Jajajaja
Pienso que solo desde la perspectiva de él es algo injusto y muy unilateral, fácilmente prejuicioso, y ya va siendo hora de hacer uno o dos capítulos desde el punto de vista de ella, para que comprendan a la chica también xD

Ya tengo los capítulos 14 y 15 listos, así que díganme si les gustaría saber que pasa por la mente de ella ya, o si primero publico esos dos capítulos y luego hago el pov de Kagome ;)

¡¡Hasta prnto!!