Blood Promise-Un cambio en la historia

Capítulo 9

Oskana y Mark nos miraban detenidamente mientras procesamos la información

Era increíble, Paul llevaba en su cuello una pieza que nos conectaba con Rose, una pieza que podría cambiarlo todo. Podía cambiar lo que pasaría con Rose y contado lo que creíamos, nadie podía pensar que las despiadadas bestias que acechan las noches y matan a diestra y siniestra pudieran tener sentimientos, o por lo menos algunos de ellos.

Y que Rose pudiera ser uno de ellos.

–Janine tenía que escuchar esto – dijo Tasha

Y eso era cierto, ella había salido a buscar a Abe, todos habíamos olvidado que hoy era viernes, el día que Abe había prometido llevarnos con el hombre que nos diría en donde se encontraba.

¿Pero realmente él sabía algo?

Me refiero a que tal vez Rose sigue aquí, en Baia, entonces no tendría sentido ir a verlo si ya sabíamos en dónde estaba, pero dudaba que ella se hubiese quedado aquí esperando a que nosotros fuéramos tras ella.

¿Cierto?

O tal vez ella quería eso, quería que la buscáramos.

Si Rose era una no-viva eso significaba que ella era la misma de antes atrapada en ese cuerpo frío, creo que ella estuvo aquí con Paul para llamar nuestra atención

– ¿Estás diciendo que Rose es una no-viva? – Dimitri sonaba tan sorprendido como yo.

–No quiero ser pesimista – comenzó Christian –, pero Rose no me pareció nada compasiva o con sentimientos cuando hizo que una chica se volara la cabeza en el jardín o manejando a un niño de diez años.

Odiaba admitir que lo que decía era verdad.

–No pensemos en eso ahora, apeguémonos a lo que sabemos – dijo Tasha –, vamos a hablar con el tipo que dijo Abe. Es el plan original.

Todos estuvimos de acuerdo con eso, Janine llegó antes de que Mark y Oksana se fueran y acordamos que ella iría con ellos para escuchar la historia, no podíamos ir todos según Abe.

Oksana dijo que tenía un par de libros que podríamos ver así que tuvimos que dividirnos.

Janine, Christian y Tasha se quedarían a revisar los libros, intentamos convencer a Adrian de que hiciera lo mismo, pero nos dio una lista de los porqués debía ir. Dimitri, Eddie, Adrian y yo iríamos con Abe. Así cubriremos dos lugares en una noche.

–Ella se enojara – dijo Paul, cuando todos estábamos a punto de irnos

– ¿Quién se enojara? – preguntó Abe

–Rose, ella me dijo que después de que escucharan la historia debían irse – avanzó unos pasos y comenzó a susurrar –. Rose me dijo que les dijera que tenían hasta las doce para estar fuera de Baia o ella se haría cargo de ustedes.

–¿Eso es todo lo que dijo?

–Si, por ahora

Compartí una mirada con Christian– No te preocupes, encontraremos a Rose.

Agradecí sus palabras, pero mi mayor miedo era que ella nos encontrara antes.

El lugar al que nos llevó Abe no era nada parecido a lo que imaginaba. Esto era como burdel, mujeres Dhampir bailaban en distintos escenarios, algunas en tubos, con muy poca ropa. Y había hombres Moroi por doquier, era como un lugar de reuniones para ellos, bebían y después se conseguían una puta.

Era asqueroso

No pude evitar notar las miradas de muchos, sabía que sería reconocida en algunos lugares, pero no quería que la gente me viera en un lugar como este.