El pasado no perdona

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Naruto respiro hondo, admirando la gran construcción que se encontraba en frente suyo, el edificio era un rascacielos color negro, muy elegante y demasiado imponente. Volvió a tomar un poco de aire, para encaminarse en el interior de sus lujosas instalaciones.

Aun le costaba trabajo creer que, después de diez largos años de ausencia, ahora se encontraba de regreso en su amado pueblo natal. Desde que se fue, había cortado comunicación con casi todos, excepto con su abuela, quien era la que lo mantenía al tanto de los datos relevantes que sucedían, así como del estado en el que se encontraba.

Le había pedido a su abuela que no le hablara de nada sobre los Uchiha, En ese prolongado lapso de tiempo, también había evitado las noticias y los periódicos, había sido difícil, pero no imposible y sólo utilizaba su computador personal para buscar la información de su interés y emplearla a todos los negocios que debía cerrar, siempre se limitaba a la información básica, y rehuía cuando se mencionaba algo del complejo empresarial Uchiha o de la familia Uchiha.

También le había pedido a su abuela que, así mismo, no les dijera nada a ellos sobre el. Durante mucho tiempo, Tsunade le recriminó su forma de proceder y lo inconsciente e irracional de sus acciones, hasta que un día término reventando y tuvo que decirle absolutamente toda la verdad, y los motivos reales de su viaje. A Tsunade no le sorprendió para nada este hecho, ya que era algo que sinceramente ya se esperaba de Sasuke, ya que sus actitudes hacia Naruto jamas fueron del todo normales. Lo que verdaderamente le sorprendió, fue conocer la versión de su muchacho y enterarse de los sentimientos que este albergaba por el menor.

La mujer sintió compasión de su nieto y prefirió dejar de agobiarlo mas con el tema. Tuvo que haber sido bastante duro para su muchacho el tener que alejarse de una persona a la que él quería bastante, como era el caso de Sasuke.

Pero eso ya era cuestión olvidada, eso ya era cosa del pasado y sus sentimientos por Sasuke ya habían desaparecido, así que con toda confianza podía regresar a su pueblo y podría retomar lo que dejo en un pasado y quiso volver a tener.

Una parte de si, siempre se había cuestionado que había sido de la vida de Sasuke en estos años, seguramente seria el novio de una hermosa mujer o algún doncel de buena posición economía, y estaría dirigiendo, a la diestra de su padre, el gran imperio de su poderosa familia. Una extraña molestia que prefería ignorar invadía su pecho, pero prefería ignorarla, ya que Sasuke era parte de su pasado y en su pasado debía quedar.

Dio un ultimo suspiro, antes de adentrase en el edificio. Asombrándose de lo elegante y fino que era. La corporación Sharingan Inc. Es un grupo empresarial que se desenvuelve en múltiples campos, desde la producción farmacéutica y la atención hospitalaria, hasta la tecnología y los nuevos avances tecnológicos.

Naruto sabia, por las noticias y por su trabajo, que la corporación Sharingan había surgido de la unión de la herencia de dos poderosos hermanos, los cuales, bajo el mando del menor, habían convertido su proyecto en una de las empresas más rentables y grandes del mundo.

Por recomendación de su antiguo jefe, Hiruzen Sarutobi, había enviado su currículum a la empresa. A pesar de poseer bastantes títulos a cuestas, sabia que habían personas mas jóvenes y mejor capacitadas que él, por lo que seria que jamas sería contratado.

Pero la vida siempre da giros inesperados que traen consigo grandes sorpresas, y para él, la situación no fue diferente, a la semana fue llamado para la firma de contrato. En cuanto había sido llamado, inmediatamente empaco sus cosas, entrego la vivienda en la que vivía y se mudo a casa de su abuela, la cual lo había recibido con los brazos abiertos. De eso ya habían pasado dos días.

Con paso firme, se aproximo hasta la recepción, donde una chica de cabellos rosas y ojos jade, ataviada en un uniforme de oficina negro con camisa roja y pañuelo blanco, se encontraba atendiendo a todas las personas que allí se encontraban.

Lo suficientemente VarónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora