CAPITULO IV: ¿MALAS Y BUENAS NOTICIAS?

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-¿Qué pasó con el?- pregunte más preocupada que nunca, ya que a pesar de que lo había visto un par de veces lo consideraba como una hermano para mí y claro era la felicidad de Isi.
-Me llamaron del teléfono de la dirección para decirme que lo habían atropellado con un auto, ahorita esta en el hospital muy grave, tengo miedo de perderlo- dijo entre sollozos, no podía creer lo que me estaba diciendo, ¿Darren en el hospital y muy grave? Quería llorar pero tenía que ser fuerte por ella.
-Tranquila, ya veras que todo estará bien- le dije lo más calmada que pude.
-Ven, vamos por algo de comer, eso te hará sentir me mejor- dijo Mafer que parecía estar igual de mal que yo.
Nos dirigíamos a la cafetería cuando vimos llegar a Yunuen por la puerta, y si, es otra de mis mejores amigas.
-¡Hola!- Dijeron Isi y Mafer al unísono, parecía que les alegraba verla y sinceramente a mí también, en este tipo de momentos nos faltaban buenas noticias y el que ella llegara antes de lo esperado era una de ellas.
-Pero. ¿Qué haces aquí? ¿No llegabas en una semana?- pregunto Isi que a pesar de sus ánimos lo dijo muy sorprendida y contenta, pero más contenta que sorprendida y eso me alegraba.
-Si lo sé, pero el hotel en el que estábamos se lleno de pulgas y mi mamá no quiso pagar otro, y pues aquí estoy amigas, de cualquier forma me alegra haber venido antes, las extrañe mucho-dijo y nos abrazo, obviamente nosotras le devolvimos el abrazo, se nota que nos extraño ya que ese abrazo casi me deja sin aire, eso y porque ella es muy fuerte, juntar la fuerza y el sentimiento de extrañar a alguien en ella suele ser muy peligroso.
-Volviendo a temas más serios, ¿por qué estaban así antes de que las saludara? No crean que no me di cuenta que no tenían muy buena cara.
-Bueno... no es sencillo- dijo Mafer mientras ponía la cara más seria del mundo.
-Ve al grano por favor, me preocupan y quiero saber qué sucede.
-Bueno en ese caso... Es Darren, llamaron a Isi de la dirección y le dijeron que él estaba en el hospital muy grave, porque lo atropellaron.
-No puedo creer lo que me estás diciendo Mafer, lo siento tanto Isi pero ya verás que saldrá de esta, como siempre.
-Eso es cierto siempre se mete en problemas y se termina saliendo con la suya, como la vez en la que Darren se metió en la casa de su vecino por su balón pero se terminó rompiendo una pierna al saltar la reja para meterse nuevamente a su casa, lo castigaron por una semana, pero terminaron siendo unas vacaciones para el porque lo trataron mejor que nunca por su pierna rota- Dije satisfecha al ver que les saque una sonrisa, tal vez no era la anécdota más graciosa del mundo, pero el hecho de saber que siempre se salía con la suya nos resultaba divertido.
-Gracias por hacerme sentir mejor como siempre.
- No tienes porque agradecer Isi, lo hacemos porque te queremos- dije con toda la sinceridad del mundo que espero se haya notado.
Caminamos un poco más antes de que terminaran tocando el timbre para entrar a las clases, y el resto de la tarde transcurrió normal, al llegar la hora de salida simplemente me despedí de todas y le dije a Isi que me mantuviera informada por si pasaba algo más con Darren.
Finalmente llegue a mi casa, le di las buenas noches a mi mamá y me fui directo a mi cuarto, me cambié, me lave los dientes y por fin me acosté repasando mentalmente todo lo que me había ocurrido este día, la caída con Alejo, lo qué pasó con Darren, la llegada de Yunuen antes de lo esperado, que de hecho eso no fue malo pero aún así... Muchas cosas por un día, con todo esto me olvide de mi objetivo inicial, destacar en todos los aspectos posibles este año, de cualquier manera mañana será otro día y otra oportunidad para cumplir mi objetivo, aunque no lo podré hacer hasta que sepa que Darren ya no está en peligro.

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