¿Tení cigarro?

QUINCE

Créditos a la maraca culiá de la valentina_acost malo que me webió para que le diera créditos. 💚

Chupame la zorra.

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—¿Cuál película querí ver?.—el Nacho me mostró todas las películas de Netflix.

—¿Cincuenta sombras de Grey?.—lo agarré pal huebeo.

—¿Segura? No me hago responsable de la hueá que pueda pasar.—me sonrió pícaramente.

Sapo conchatumare. La hueá que te puede pasar a vo, mejor será.

—Vo dale.—me lamí los labios.

Antes de poner la película, se fué para el baño y el culiao llegó pasao a perfume— hediondo conchatumare.— Puso la película y cuando se sentó puso sus manos en mis piernas.

Quítala antes que te rebiente los cocos, lacra culiá.

Como era de esperarse, con cuea alcancé a ver la película como diez minutos y el hueón ya me estaba corriendo mano.

«Que comience el juego»

—Mmm... para.—separé nuestros labios.

—¿Qué pasó? ¿Ya te viniste?.—preguntó.

Culiao egocéntrico.

—¡¿Qué?! No, ahueonao.—lo miré.—Lo qué pasa es que...—le hablé con voz sensual.

—Dime po.—quedó en la rama.

—Es que me gustaría que me bailaras.— susurré con la voz de la Luli.

Tierenme un Óscar, ¡por la perraaaaa!.

—¿Quieres qué sea tu vedeto personal, mi amor?.

Iug.

—Me encantaría ¿pero sabìs qué más me encantaría?.—le pregunté.

—¿Qué cosa? Pídeme la hueá que queraí, estoy muy caliente.— el culiao matapasiones.

—Es que me calientan mucho las tangas.—me aguanté la risa.—Pero si no quieres, entonces me voy. ¡Ay, que vergüenza, hueón!.—me hice la timida.

—Por tí, haría lo qué fuera.—me guiñó el ojo.

¿Será hueón? Culiao rápido para convencer, las cagó.

—Bacán.—sonreí y le pasé la tanga que tenía guardada para el momento, lo bueno es que no sospechó nada.

Se fué al baño a ponerse las tangas, mientras yo esperaba cagá de la risa a que viniera el culiao. Sin antes poner el celular en un angulo culiao que no se notara qué esté grabando. Cuándo salió del baño, puso una canción culiá entera ahueoná.

¡pachamama, dame fuerzas para no cagarme de la risa, por fa!.

Comenzó a sacarse la polera sensualmente y sinceramente me daba más pena ajena, que me calentara. El hueón igual le ponía empeño, cuando se sacó la polera me la tiro y grité como loca.

—¡AAAAH! MIJITO RICO.

—¿Te gusta?.—se acercó a mi.

Asentí conteniendo mi risa culiá. Después se desabrochó los pantalones y me miró con pura cara de caliente. Cuando quedó en tanga intento sacarcela.

—¡Nooooo, conchatumare!.—me tapé los ojos.

—¿Qué pasó?.—preguntó con cara de ¿qué wá?.

—Emm...—¿qué chucha le digo?.—Es que yo te la quiero sacar.—me mordí el labio.

Soy seca hueón.

—Estoy demasiado caliente.—se lanzó y yo quedé bajo de él.

Puta el hueón pesa más que la perra ¿Cree qué no pesa por la rechucha?.

Me comenzó a dar besos en el cuello y yo aproveché de sacar la cámara. Después como pude, le pinché a la ahueoná de la Cami.

Ahora sólo falta que sigua el plan la maraca culiá.

—Dani, estay entera rica.—metió la lengua más profundo que la chucha y me dió cualquier asco.

Yapo Cami culiá.

Lo manosié entero, para dejarlo más caliente que la corneta. Y en eso suena mi salvación.

"Mamá".

Salía en la pantalla de mi celular, obviamente no era la vieja culiá de mi mamá po. Era la hueona de la Cami.

—Hola ¿mamá?.—me hice la hueona.

El Nacho se pasó las manos por los cocos y se mordió el labio. Cerdo culiao.

—Ya hueona, hacela piola.—me respondió la Cami.

—¡¿Qué?!.—grité cómo loca culiá.—¡MAMÁ, TRANQUILA! ¡¿DÓNDE ESTÁI?! SI, SI. VOY ALTIRO PARA ALLÁ.—corté.

Soy la puta ama.

—¿Me vaí a dejar así?.—señaló su pichula.

—Lo siento, mi mamá está en el SAPU.—intenté parecer lo más preocupada posible.—Puta, sorry.

Te lo merecí, por tonto culiao.

—No po, Daniela hueón. Por último chupamela. O no sé, un rápidito.—me rogó.

Andate a la conchatumare, dile a la maraca de la Andrea que te haga un mamón po. De más lo hace cagá de la risa la fea culiá.

—Chao, me tengo que ir.—salí hecha un cohete.

Iba caminando para mi casa cagá de la risa. Saqué mi celular y miré el video.

Ésta hueá vale oro por la rechucha.