VEINTITRÉS

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— ¡LA CONI LE ROBÓ EL SOMBRERO AL PROFESOR!.— todos los culiaos de mi curso cantaron al unísono.

Ibamos de camino al Cajón del Maipo arriba del bus culiao pasao a vómito.

— ¡¿Quien yo?!.— respondió con cara de ahueoná.

— ¡SI, TÚ!.— volvieron a gritar.

— ¡Yo no fui!.— se tocó la teta, digo el pecho dramáticamente.

— ¡DEVUELVE LA HUEÁ DOMÉSTICA CONCHATUMARE!.— gritó él payaso culiao del Fabi.

Todos se cagaron de la risa, yo intenté no reírme. Pero reí igual y se me escapó un peo ninja, obviamente me hice la hueona. Así que saqué colonia de mi mochila e hice como que me estaba echando. Pero era sólo para camuflar el peo culiao hediondo qué me acabo de tirar.

— Bien conchatumare, me voy a poder comer al Fabián en él campamento piola.— sonrió la Cami.

— Pela culiá. — achiné mis ojos.

— Adivina qué tengo en la mochila.— sonrió con care' vía y levantó sus cejas pa' arriba y pa' abajo.

— Supongo que pastillas pa' no quedar preñá.— hablé con voz de mamá preocupá.

— A parte de eso ahueoná conchescuche.— me dijo tiernamente.

— Dime la hueá luego mongola reculiá.— me desesperé.

¿Desde cuándo esta culiá se las da por hacer adivinanzas?.

Puta la perra culiá pesá, era para darle más suspenso a la hueá po fome conchatumare.— se cruzó de brazos taimá. — Traje mota.— respondió por fin.

— Interesante.— me toqué la barbilla cómo hueona.

Cuándo llegamos a la hueá dónde ibamos a acampar. Él profe nos dió indicaciones de las hueás qué teníamos que hacer, obviamente me paso por la zorra sus indicaciones. Me viré a fumarme un cigarrito por ahí. Cuándo me devolví a donde estaba el campamento, ví al Nico hablando por su celu. Y cómo soy terrible sapa, me escondí detrás de un matorral y escuché.

— Javi, ¿estai segura de la hueá qué me estai diciendo?.— arrugó su frente.

¿de qué hueá estará hablando?

No llorí po, yo núnca te dejaría sola.— dijo con la voz terrible cortá.— Si mi amor, te lo juro. Son sólo tres días los qué vamos a estar aquí, apenas llegue, te voy a ir a ver mi chanchita.— dijo con voz tierna, qué me llegó a dar asco la hueá.— Yo también te amo, chao.

Cortó y se fué pa dónde estaban todos. Yo me quedé ahí escondida por un rato y después me fuí cómo si nada al campamento.

Maraca culiá, por fin te encuentro. Cachai qué me pasó una hueá terrible penca.— me dijo la Cami súper bajoniá.

— ¿Qué hueá te pasó? Ya sé, él Fabi la tiene chica.— abrí mis ojos.

— No seai hueona, mona culiá. Me llegó la ruler.— hizo cómo qué lloraba.— No voy a poder culiar.

— Dile al Fabi qué te haga el beso del payaso po.— me tapé la boca pa no cagarme de la risa.

— Y yo qué quería culiar en un matorral, era mi sueño frustrado.— dijo con pena, era obvio que lo que decía era de puro hueveo.

¿o no?

Ya había anochecido y la Cami se había sacado unos pitos, la hueá es qué estaba toa volá viendo las estrellas. Me puse a Pink Floyd y me fuí a la conchatumare, me voltee para decirle una hueá a la Cami, pero la muy conchatumare se había virado. Debe estar con el hueón del Fabián, me importó un pico y seguí viendo las estrellas.

— Tss... ¿Quién cómo tú? Playa, acostá viendo las estrellas.— escuché que dijeron.

Estaba tan volá qué pensé que era el Nico, pero cuando miré quien chucha era, me desilusioné brijido.

— La qué puede puede.— dije tranquila.

Él Nacho se acostó a mi lado y no dijo ni una hueá, no sé cuánto tiempo pasamos así. Pero era un silencio cómodo.

— Creo qué me enamoré de ti, Dani. — susurró el Nacho.

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Nota de autor:

¡ALCANCÉ CHUCHETUMAREEEEEE!

Son exactamente las 23:47, pensé que no iba a alcanzar a actualizar antes de las doce, pero cómo soy tan pulenta, lo logré.

Espero qué les haya gustado este capitulo culiao, siento qué lo hice muy al peo. Pero fué con inspiración y bueno, la intención es la que cuenta.

✌😘😘😘

¿Tení cigarro?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora