No me diste los buenos días. Ni siquiera me lanzaste una mirada cuando pasé por tu lado. Quería que me mirases.
Tu amigo se acercó a mí una vez, pude ver como intentabas detenerle. Él te contestó algo y tú le soltaste.
Me alegró saber que alguien quería hablar conmigo durante un rato. Él me preguntó cómo iba con los examenes. Me invitó a salir esa tarde.
Me enteré de que no habías querido contarles nada de lo que había pasado. Eso me dolió.
¿Tan poca importancia le dabas?
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Cartas para él
Short StoryTreinta y nueve cartas para el que parecía el amor de su vida.