Capítulo 17

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–¿Cómo vamos a leer un libro que no entendemos? –Chloe se llevó las manos a la cabeza frustrada. Acababan de cambiarse de ropa y de comer algo, y ahora que habían abierto el libro se daban cuenta de que estaba en otro idioma.

–Al menos tiene dibujos, tal vez eso nos baste –Nino se encogió de hombros ante la mirada fulminante de Chloe, quien lo miraba como si acabase de decir una estupidez.

–¿Y si viene algo en clave que sea fundamental para derrotar a Hawk Moth? –la rubia se llevó las manos a la cadera– ¡Eso no se puede deducir por dibujos!

–Cálmate Chloe –Alya se acercó a la rubia y le puso las manos sobre los hombros– tal vez Nino tenga razón y podamos sacar algo de los dibujos que vienen, no hay que ponerse histérica.

Chloe inhaló y exhaló con fuerza, tratando de calmarse. Nino se dirigió hacia el libro, dispuesto a ayudar en lo que fuese. Estaba abierto por una página en la que se podía ver a un hombre de piel morada y detalles dorados, con una especie de espiral de fondo. En el margen de las páginas había varias inscripciones en ese idioma que todos desconocían. El moreno se sintió atraído hacia lo escrito, ignorando parcialmente el dibujo, por lo que se quedó observando fijamente una de las inscripciones. Para su sorpresa, las palabras empezaron a tomar forma en su cabeza y allí donde antes había signos extraños ahora podía leer lo que había escrito claramente. Parpadeó pensando que era una ilusión y que las palabras se irían, pero allí se mantuvieron, plasmadas sobre el papel.

–¡Chicos! –sus cuatro amigos giraron la cabeza hacia él, interrogantes– ¡Ya se puede leer!

Los chicos se acercaron rápido hacia el libro, emocionados por leer lo que decía, pero tan solo veían la escritura codificada.

–Nino, sigue igual –Adrien miró a su amigo como si estuviese loco.

–¿Pero es que no lo veis? –el moreno señaló el libro con ambos brazos– Ahí pone claramente: "para obtener el poder supremo debes activar ambos Miraculous a la vez".

Los cuatro chicos restantes se miraron entre sí, confusos y sorprendidos al mismo tiempo, para luego mirar a Nino todos a la vez.

–Nino, eres el único que puede leerlo –le explicó Marinette– nosotros no vemos nada.

–¿Pero por qué yo si puedo leerlo? ¡No había visto este idioma nunca!

–Yo te diré porque –Wayzz, el kwami de Nino hizo acto de presencia por primera vez en toda la noche.

–¿Dónde te habías metido? –preguntó el chico sorprendido de verlo.

–Llevaba todo el tiempo oculto dentro de la chaqueta de tu traje, hasta que te has cambiado de ropa y me he quedado con los demás kwamis –Wayzz lo miró con reproche– y créeme, he estado contigo todo el tiempo–repitió condescenciente, mirando al chico como si tratase de decirle algo.

Nino no comprendía a que se refería su kwami, hasta que se acordó de lo que había estado haciendo momentos antes. Miró a Alya de reojo, la cual estaba tan sonrojada como él.

–Y no eras el único, Wayzz, yo también he estado presente en ESE momento –el kwami de Alya salió de detrás de ella, provocando que la chica escondiese su rostro entre sus manos avergonzada.

Adrien, Marinette y Chloe estallaron en carcajadas al ver las caras de sus amigos.

–No sé de qué os reis tanto, Adrien y Marinette –la kwami de Marinette se metió en la conversación– Plagg y yo también os pillamos a vosotros en uno de ESOS momentos.

–Porque vosotros, jóvenes calenturientos, os olvidasteis de que estábamos allí, escondidos entre vuestra ropa –Plagg, el kwami de Adrien, se acercó a Tikki y se cruzó de brazos mirando a su portador.

Nino y Alya miraron con diversión a Marinette y Adrien, quienes ahora eran los que estaban avergonzados. Chloe, en cambio, seguía desternillándose.

–Como te decía, antes de que me interrumpiesen –Wayzz volvió a llamar la atención de Nino– tú puedes leer el libro porque es una de tus habilidades –el kwami sonrió orgulloso.

–Osea, que soy el único que puede leerlo –Wayzz asintió– ¡Genial!

Nino cogió el libro con ambas manos y se dispuso a leer lo que decía.

–Como he dicho al principio ambos Miraculous deben ser activados a la vez, cuando esto ocurra se producirá una transformación similar a la de la imagen –el moreno señaló al hombre de morado y dorado– una vez hecho esto, obtendreis el poder necesario para derrotar a Hawk Moth.

–¿Y ya está? –preguntó Marinette– ¿Solo tenemos que transformarnos a la vez?

–Aquí pone eso –indicó Nino señalando la hoja– no dice nada más.

–Pero, ¿cómo liberamos ese poder? ¿Cómo se usa? –Adrien se acercó al libro, observando la ilustración por si le daba alguna pista. Nino pasó página, para descubrir que había más instrucciones sobre la transformación.

–¡Aquí lo explica! –el chico mostró el libro emocionado de poder ser de tanta utilidad– teneis que activar vuestros poderes especiales a la vez.

–Eso tiene más sentido –Marinette sonrió decidida– tal vez debamos practicar lo de transformarnos a la vez –la pelinegra se giró hacia su novio, quien asintió.

–A la de tres –propuso el rubio, situándose frente a la chica– uno, dos y...

Adrien no llegó a pronunciar el "tres" pues un estruendo en la casa los sobresaltó. Las luces se apagaron y se encendieron las de emergencia, la puerta de la habitación fue cubierta por una reja metálica y las ventanas quedaron bloqueadas.

–¿¡Qué está pasando!? –preguntó Alya sorprendida y asustada a la vez acercándose a Nino, cogiéndole de un brazo.

–No tengo ni idea –le respondió el chico, cogiendo a la chica de la mano que ella tenía sobre su brazo.

La luz de emergencia tan solo les permitía verse unos a otros, sumergiendo al resto de la habitación en penumbra. Los kwamis se colocaron al lado de sus respectivos portadores, listos para transformarlos si era necesario.

–Es el protocolo se seguridad –explicó Adrien– pero no debería haberse activado, solo mi padre puede activarlo y está de viaje.

–¿Estás seguro de eso hijo? –los cinco chicos miraron a su alrededor buscando el origen de aquella voz, pero no pudieron encontrar a nadie– me parece mentira que seas tan ingenuo.

–¿Papá? –la voz de Adrien salió en un susurro debido a la confusión.

–No me puedo creer que ninguno aún se haya dado cuenta de quien soy en realidad –la voz parecía venir de todas las partes de la habitación, envolviéndolos y provocándoles a todos escalofríos. Los cinco chicos estaban aterrorizados. Nino tuvo que ahogar un pequeño grito de lo asustado que estaba, hasta que sintió como Alya apretaba su mano. Inmediatamente se sintió más calmado, y cuando miró a la chica a los ojos se dio cuenta de que esa era la intención de ella, que él se calmase.

–Yo sí –Chloe alzó la voz con determinación, dando un paso al frente saliendo de la posición defensiva que habían formado los cinco sin darse cuenta– tú eres Hawk Moth.

Una carcajada resonó en la habitación, retumbando en las paredes y perforándoles los oídos a los presentes.

–Exactamente.

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N.A.

Como le dije a una chica en el capítulo anterior he estado muy ocupada esta semana como para actualizar. Ha sido mi última semana de vacaciones y he querido aprovecharla al máximo, por eso dejé wattpad un poco de lado. Pero prometo que aunque tarde un poco de más en actualizar no abandonaré el fanfic, solo os pido un poco de paciencia, sobre todo ahora que he empezado mi último curso antes de irme a la universidad y no tendré tanto tiempo como antes para escribir.

Y sin más, espero que tengáis un buen día :)

Compañeros de investigación-AlynoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora