I will be your daddy (Dylan O'brien)©

Capítulo 12.

Luna

Mensaje nuevo.

Daddy: Mañana es viernes, iré por ti a la salida de tu escuela.

Yo: Bueno, daddy ¿qué haces?

Daddy: Pensando en ti muñequita ¿y tú?

Yo: También daddy, pronto es tu cumpleaños.

Daddy: Sí bebé, vas a estar conmigo aquí.

Yo: ¡Sí!

Daddy: Es hora de dormir, 11:15 pm.

Yo: No. *Inserta emoji triste*

Daddy: Es una orden.

Yo: No. *Inserta emoji con la lengua afuera*

Daddy: ¡Uhm! Te daría unos buenos azotes.

Yo: Pero no estás aquí.

Daddy: No deberías retarme muñeca.

Yo: No lo hago.

Daddy: Sé una niña buena, y ve a dormir ya. Las princesas hacen caso y sino recibirán su castigo. Y tú querida, vas a recibir el tuyo.

Yo: Ya iré a dormir, daddy. *inserta emoji triste*

Bostecé.

Daddy: Buenas noches, princesa.

Yo: Buenas noches daddy, te quiero.

Ultima conexión a las 11:30 pm.

"Te quiero" me repetí mientras me arropaba con mi manta blanca, ¿en qué me había metido? No lo sé, pero me gustaba y de repente unas ganas inmensas de estar con dominik me invadieron.

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La alarma sonó y me levante unos minutos después, me metí al baño y me preparé para ir a la escuela, mi uniforme, el desayuno y listo. Mire a mí alrededor y note que mis padres se habían ido, al fin- pensé. El chofer llegó y me dirigí al colegio, mientras llegaba decidí mandarle un mensaje a Dominik.

Yo: Buenos días daddy, ya desperté.

No obtuve respuesta.

Yo: Daddy, ¡Necesito de su atención!

Tampoco.

Yo: ¡Daddy! Ya estoy llegando a la escuela. *Emoji triste*

Yo: Ya llegué, adiós daddy.

Y todavía no obtuve respuesta.

Me baje del carro y me dirigí a el salón de clases, Valeria y Jack no habían volteado a mirarme, estaba siendo ignorada por ellos completamente, pero en realidad eso no me importaba mucho.

Las clases pasaron rápido, al fin hoy era viernes y tenía una semana de vacaciones, dormí en la última hora y cuando terminó, salí lo más rápido que pude.

Pero daddy no estaba allí, ¿dónde se habrá metido? Mire mi celular y tampoco habían mensajes de él.

Espere sentada por 15 minutos sola, a las afuera de la escuela; iba a comenzar a desesperarme cuando sonó la bocina de uno de los autos de daddy frente a mí. Mis mejillas enrojecieron al verlo, estaba feliz de verlo y él también sonreía.

―Sube, bebé ―dijo y eso hice.

―Hola, daddy ―dije brincando despacio encima de él.

―Perdona nena, es que estaba... arreglando algunas cosas.

― ¿Qué cosas, daddy?

―Lo sabrás cuando lleguemos a casa.

―Está bien, daddy― Dominik comenzó a manejar y yo jugaba con mi cabello.

― ¿Cómo te fue, muñequita? ―pregunto mientras íbamos rumbo a mi casa.

―Bien, aunque dormí en la ultima hora ―dije eso último en voz baja y luego agache la mirada. Daddy me miro por un segundo.

―Te dije que durmieras temprano ―Su voz era autoritaria, y eso me gustaba, hice un puchero. Me gustaba este papel de niña pequeña.

―La próxima vez solo trata de obedecerme ― dice mientras acaricia mi muslo.

Daddy estacionó el auto y tomo mi mano para subir las escaleras. ¡Oh! Había olvidado empacar mis cosas en mi casa.

― ¡Daddy!

― ¿Qué pasa bebé?

―Oh oh, olvide empacar mis cosas.

―Ah eso, no te preocupes princesa ―dijo sonriendo.

― ¡Daddy! Debo buscar mis cosas en casa.

―Tranquila cielo, tengo todo arreglado ―me tomo de la mano y entramos a la casa.

Dejamos mi bolso en la sala y Dominik me dijo que subiera, allí estaba la "sorpresa" que me tenía. Cuando entre en una habitación note que había un oso gigantesco, las paredes eran rosadas, y había una cama con peluches y con mantitas rosadas, mi emoción era notable, fui al closet y lo abrí, estaba llena de vestidos y de todo lo que necesitaba. Me emocione tanto que me abalance sobre Dominik y él me alzo.

― ¡Gracias, daddy! ―enterré mi cabeza en su cuello.

―Tranquila pequeña, no es nada ―me beso la frente.

Después de almorzar y demás, Dominik me dijo que era hora del baño.

Dominik pov.

Tome a mi pequeña de los brazos y la alce, la puse sobre la mesita que está en el baño y preparé la bañera, para que mi pequeña se pudiera relajar. Me quite la camisa y el pantalón, cuando la bañare estaba lista le desabotone la blusa y le baje la falda, Luna es preciosa y solo me la imaginaba entre mis piernas, pero debía calmarme. Baje su short y sus bragas, ella estaba sonrojada, se veía tan ingenua e inocente, es adorable. Yo estaba impactado por su belleza, su cuerpo era hermoso y saber que pronto iba a ser mío.

Ella confiaba en mí, y no quería defraudarla.

Metí a mi pequeña en la bañera y luego me metí yo atrás de ella, tenía su pequeña espalda contra mí, lave su espalda su cabello, sus brazos, y masaje sus pequeños pechos, ella se sobresaltó pero enseguida relajo sus músculos, después restregué su pancita y por ultimo sus piernas y su entrepierna, que necesitaban más cuidado, Luna es tímida e inocente pero ella confía en mí.

― ¿Daddy? ―pregunto con sus adorables ojos azules verdosos.

―Sí querida.

― ¿Puedo usar este? ―me mostró uno de los vestidos que le había mandado a comprar, era corto y de color rosado pero era muy lindo.

―Claro, bebé.

Le puse bragas nuevas y encima el vestido, la peine y la acosté en su cama nueva, encima unas mantitas.

―Daddy, duerme conmigo por favor ―suplico haciendo un puchero, no me pude resistir a eso.

―Está bien muñeca, pero solo un rato, tengo cosas que hacer.

―Bueno, daddy ―dijo y me jalo con sus manos hacia ella, la abrace quedando su cabecita en mi pecho y ella subió una de sus cortas piernas en mí, le acaricie el cabello hasta que quedó dormida.

―Buenas noches, princesa ―susurre.