CAPITULO 10

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El viento revolvía su cabello mientras ella corría perdida entre los arboles, de pronto vio un enorme castillo en llamas frente a ella rodeado de pobladores de varios reinos en una batalla campal y en medio un sombrío hombre con enorme capa obscura arriba de un dragon del cual solo se distinguía un piel blanca con aros de fuego. Entonces un montón de flechas empezaron a acercarse en dirección a ella y en una intento de escape echó a correr buscando al mismo tiempo a su familia con la mirada hasta que su cabeza se lleno de voces

"alterado fue el destino..."

"...no quiero ser como tú!!"

"...¡ponernos a todos en un riesgo así! ¡Esa cosa ni siquiera estaba atada ¿y si nos hubiera comido?."

"¿Lo atacaste?"

"..busca el interior"

"cambiaste, era como si dentro de ti solo hubiera un ..."

"...un dragón?!!"

En un respiro profundo la chica despertó de su terrible pesadilla.

- ¿Estas bien? - se acercó preocupado el joven.

- Sí, creo que sí.- después de horas de vuelo decidieron tomar un descanso en una especie de isla, el lugar no parecía tener mucha vegetación ni mas fauna que unos cuantos insectos y aves, pero era lo que necesitaban para descansar, tierra firme y un poco de leña para prender fuego.

- ¿Un mal sueño?

- Sí, eso debió ser

- ¿No lo recuerdas entonces?- le preguntó curioso mientras continuaba echando leña al fuego frente a ellos.

- No recuerdo del todo.- luego empezó a hablar entre dientes para recordar, habito que había heredado de su madre.- "alterado fue el destino...el interior"

-¿Estas diciendo ...algo?- preguntó tímido el castaño.

- Es solo que hay cosas del pasado que uno llega a entender más mientras pasa el tiempo.

- Como lo que acababas de decir,supongo.

- Es de... un relato de Dunbroch, una leyenda.

- Ahora siento curiosidad.

- En realidad, no es la gran cosa y es algo enredoso así que ...

- Tengo tiempo.- hizo una sonrisa encantadora.

- Oh bien, te explicare un poco, pero nada de interrupciones.

- Promesa domador de Dragones.

- Bueno, resulta que en Dunbroch existió un Rey y tres Lords que con sus pueblos lucharon una batalla contra los enemigos que deseaban atacar sus tierras, pelearon con valor y al vencer proclamaron un Rey con la condición de que al tener a su hija la princesa, habría de contraer matrimonio con uno de los descendientes de ellos a fin de mantener su alianza, pero esos no eran los planes de la princesa que egoísta saboteó la competencia con la que se eligiría a su futuro prometido, lo hizo sin importarle los tragicos acontecimientos que esa acción podría causar, su madre, la Reina y ella discutieron de tal modo que la princesa recurrió a una bruja para que hiciera cambiar a la Reina y evitara su matrimonio...- hizo una pausa mientras el ojiverde parecia un pequeño niño encantado por aquel cuentecillo.

- ¿Y bien?- reclamó.

- La Reina si cambio, se convirtió en un oso. La princesa aterrada intentó revertir aquel desastre, pues de lo contrario su madre sería cazada por el Rey quien buscaba venganza ya que un oso llamado Mord'O le había arrancado una pierna y por poco había matado a su familia años antes:

Destino y LibertadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora