SuperCorp-Confía En Mí

11

   Él me mostró una sonrisa risueña. Yo retrocedí unos pasos sin saber cómo reaccionar. Sacha está en la lista, ¿será bueno o malo? ¿Los profesores saben que él también ha estado investigando el tema? ¿Me habrá estado mintiendo todo este tiempo?

   —¿Estás bien? —Levanto una ceja —. Te ves un poco rara.

   —Sí, es solo que... tengo un amigo que se apellida igual —dije nerviosa.

   Sacha asintió y yo retrocedí hasta la puerta. La abrí y me fui rápido de ahí.

   Había mucha gente en los pasillos. Eso significa que ya acabaron las clases. Salí del colegio y cerré un poco los ojos cuando unas gotas cayeron en mi rostro. Perfecto, estaba lloviendo y mis poderes iban a estar débiles.

   Seguí con mi camino hasta que varias personas se colocaron al frente mío. Yo los miré confundidos. Eran tres chicos más altos que yo y dos chicas que tenían una risa burlona.

   Yo fruncí el ceño y traté de pasar por un lado, ignorándolos. Pero uno de los ellos me tomó del brazo.

   —Oye, pero ¿qué...?

   —¿Tú eres Kara Danvers? —preguntó una de las chicas.

   —Uh... sí. ¿Qué quieren?

   El que tenía agarrado mi mano comenzó a jalarme. Yo me retenía​, pero los otros chicos comenzaron a empujarme bruscamente. Con mis poderes débiles y además que no he estado tantos años en la Tierra, debo ser sincera que ellos estaban logrando moverme.

   No quería hacerlo, pero tenía que usar un poco de mi fuerza. Agarré el brazo del que me jalaba y traté de liberarme, pero no pude. ¿Qué rayos pasa? No tengo mis poderes.

   Miré con miedo al tipo, ahora no podía defenderme. Él sonrió y siguieron jalándome. La gente alrededor solo me observaba con lástima o sin interés. Yo miré para todos lados, buscando ayuda de alguien que conozca.

   Y en ese momento la vi. No sé si era mi imaginación, pero está mucho más hermosa que antes. Aunque sea un día lluvioso, Lena irradiaba una belleza especial. Como si hayamos creado un contacto, ella volteó cuando yo la vi.

   Ella me miró confundida, pero no pude hacer nada más porque me empujaron hasta llegar atrás de la "Zona A". Uno de ellos me tiró al suelo y yo me arrastré hasta que mi espalda tocó el frió muro.

   —¿Sabes quién soy yo? —preguntó el más grande de todos. Podía ver que sus ojos estaban rojos del odio y su rostro estaba tenso.

   —N-no —respondí con miedo y nerviosismo.

   —Soy el ex-novio de Maggie —. Yo lo miré extrañado —. Era muy feliz saliendo con ella, hasta que llegó tu estúpida hermana y lo arruinó todo.

   —¿Y yo que tengo que ver con eso? —pregunté molesta.

   Bueno, puedo entenderlo un poco. No es bonito cuando tu novia te engaña con otra chica. Alex podrá ser un poco extrovertida, pero me sorprende que haya hecho eso.

   —Lamentablemente, tu hermana no está aquí, pero... puedo lastimarte a ti. Así tal vez, Alex Danvers aprenderá a no hacer eso de nuevo.

   Agarró mi polo del cuello y me levantó. Vino otro de los chicos y me dio un gran golpe en el estómago. Había pasado mucho tiempo desde que no sentía un dolor tan grande como ese. Sabía que en este momento no tenía mis poderes, pero igualmente me daba miedo golpearlos y que les haga mucho daño.

   El tercer tipo, me arrancho mi mochila y tiró todos los papeles y libros al suelo para que se mojen con la lluvia. Yo suspiré y apreté los puños. Cálmate, Kara. No vayas a hacer una estupidez, pensé. Las chicas comenzaron a reír y yo bajé la cabeza. Los golpes seguían y cada vez sentía más que me quedaba sin energías. El supuesto ex-novio de Maggie, que hasta ahora no me había golpeado, me soltó y apretó sus puños. Me pegó fuertemente en la cabeza y yo caí totalmente al suelo. Puso su rodilla encima de mi cabeza y apretó con fuerza, haciendo que me quejara. Cerré los ojos, tratando de buscar un poco de paz, hasta que escuché su angelical voz.