Just Wanna Be Somebody.

Capítulo 19. {Parte 2}

Amanda.

Llegamos al apartamento y se me hizo extraño estar con Niall y Johanna, aunque normalmente se pasaban el día en nuestro apartamento, al menos Niall, porque Joha seguía viviendo con su madre y no tenían mucha intimidad.

Mi madre, tenía que llamarla. Cogí el móvil y marqué su número. Un pitido.. Dos.. Tres. Corto. Otra vez. Comunica. La llamaré después.

-Zayn, ¿me ayudas a colocar las maletas? ¿Zayn?-Me asomé al comedor.-Oh, venga ya..-¿Por qué demonios hay una play en el apartamento? Zayn y Niall, como no.-Joha, controla a tu novio que está descontrolando al mío.

-Eh, será al revés.-Apareció saliendo de la habitación y me sorprendió verla con unos pantalones cortos y una camiseta larga.-Voy a correr, ¿te vienes?

Lou.

¿Alguna vez había pensado en Andy como algo más que mi novia? ¿Cómo alguien con quien quería pasar mi vida? Moví la minúscula caja que tenia entre las manos. Mejor deja de pensar, tío, que vas a reventar. Solté la caja y suspiré. Escuché unos pasos y la metí en mi espalda, estaba bastante incómodo pero no se podía enterar.

-Oye, ¿has visto por casualidad mis pendien.. que tienes ahí?

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Comienza a sonar un teléfono móvil.

-No, no pienso volver a casa, olvídate. Tengo que verle.

-¡Si no vuelves ahora, no pienses que te abriré la..!-Colgué.

Tenía que ir al hotel, con un par de transbordos lo conseguiría.

Fui a la boca del metro, y entre brazos al aire y cuerpos sudorosos, conseguí encontrar un hueco en el que meterme, del que tendría que bajar dos paradas más tarde.

El siguiente metro al que subí no estaba tan lleno, e incluso pude sentarme, me hice una coleta, que no pensaba mantener mucho, pero necesitaba respirar un poco, sabia lo que se me venía encima.

Salí de la boca del metro y caminé un par de calles más, allí estaba el hotel, uno de los hoteles más prestigiosos de California, aunque estaba bastante lejos de la playa.

Deshice mi coleta a la vez que intentaba entrar en esa marea de chicas que no paraban de gritar en la puerta del hotel.

Me iba a costar verle. Me puse las gafas de sol e intenté entrar en el hotel, acento americano y me dejarían pasar. Ahora solo faltaba averiguar la habitación.

Johanna.

Salí a andar con Amanda, ella decía que necesitaba hacer ejercicio, pero yo no creía eso.

Fuimos a la playa, ya que nuestro apartamento estaba a solo unos pasos de ésta, no sé como podía permitirse la familia de Liam tener esas casas sin ocuparlas.

Vimos unos carteles y esa noche pensábamos ir de fiesta, al menos las chicas queríamos y no creo que nadie se negase.

Esta noche no, a la siguiente venía un cantante famoso, que por casualidad me sonaba... ¿Y esos rizos?

[Escena regalo.] «Escuchar I want mientras lees esto.»

Me excité al ver que no llevaba nada debajo de la gabardina. Esto no podía estar pasándome a mí. Llevaba meses deseándola, vamos Liam, tienes la oportunidad de tenerla en tus brazos, no lo dejes pasar.

Desabroché mis pantalones torpemente, no quería hacer el ridículo pero no podía ir más rápido, me iban a estallar. Ella me ayudó, al agacharse y bajar mi ropa interior, puse las manos en su trasero y la subí a mí. Que poco autocontrol me quedaba, no sé como podía no haber pedido una habitación antes, total, podía pedirla quien quisiese, mientras tuviese dinero. Creo que no lo había hecho antes porque no quería dejar de verla y pensé que ella no querría hacer esto conmigo.

-Lauren..-Susurré, mientras rozaba mis labios por su cuello. Intenté apartar el pelo de su cara, pero apenas podía concentrarme en agarrarla.

-Calla, no digas nada, vamos a hacer esto y después hablaremos.-apoyó su mano en mi nuca y me acercó más a ella, yo bajé mi cabeza a sus pechos, besándole seguidamente. Succioné uno de sus pezones con lentitud, dando un mordisco a la vez que la apoyaba más en la pared.

Seguí besando cada parte de su pecho y cuello, la tumbé en el sofá, tumbándome sobre ella sin paré de besarla, hasta que me introduje dentro de ella, soltando un gemido sordo. ¿Cuánto tiempo había esperado a hacer esto?

Me moví apoyando las manos en el sofá, mientras la besaba, sus labios parecían de caramelo, tenían el grosor acertado y su lengua se movía contra la mía acariciándola de una manera increíble. Me había estado perdiendo esto tanto tiempo..

Noté sus pequeños dedos acariciar mi espalda, separé mis labios de los suyos mordiéndolos suave y estiré un poco de ellos. Me acerqué a su oído y sin rozarla, susurré sobre ésta.

-Dime una sola razón por la que esto no se tenga que convertir en una costumbre.

Puso sus piernas alrededor de mi cintura y dió un húmedo beso en mi clavícula.

-No hay ninguna, si consigues aguantarme, me tendrás todo el día contigo.-Soltó un gemido, cuando me impulsé contra ella, salía y entraba en ella como si la vida me fuese en ello, subió encima mía y lo demás lo hizo ella, solo recuerdo, que cuando llegué a lo más alto la primera vez que pude tenerla en mis brazos, pensé que podía ser un ángel, besé a un ángel.

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Bueno, este capitulo va dedicado en primer lugar a Lauren, porque me ha dado una alegría y porque me apoya siempre, como muchísima gente, pero ella es muy exigente y que le guste me mata. En segundo lugar, gracias a TODOS MIS LECTORES, porque me apoyan porque cada vez somos mas y porque esto es muy importante, GRACIAS ♡