Tocaba su mejilla con delicadeza, lo miraba con dulzura, y es que, que hermana no puede adorar a un hermanito pequeño. Me levanté de la silla de descanso, me fuí hacía la ventana, veía pasar mucha gente por las aceras de el frente, algunas parejas, alguna que otra familia, la mayoría, algunas personas solitarias...esa soy yo, una persona solitaria, solo busco la felicidad...pero, me da miedo encontrarla, para luego no ser feliz...
Alguien tocaba la puerta...
-¿Se puede?- Esa cabellera roja se reconocia en cualquier lado, y esa sonrisa se adoraba en cualquier momento....
-¡¡Renesme!! ¡¡Ylenia!! - Fui corriendo hacía ellas, las abrazé y les di un beso en el cachete a cada una...-¿Cómo estaís?
De repente, alguien entró en la habitación...la mire de arriba a abajo, para no hacerla sentir incomoda, estaba sorprendida...es una chica de nuestra edad, rubia de pelo rizado, casi de nuestra estatura, con esos ojos verdes...se reconocía.
-¡¡¡Alison!!!- No podía creerlo, mi prima Alison esta aqui con migo y mis amigas, aqui en Minnesota, aqui con mi familia...-¿¡Qué haces aqui prima!?- Mi cara estaba asombrada ella vive en Florida, la capital (Tallahasee).- ¡¡Estas muy lejos de casa Alison!!- Mis amigas se quedaron mirando todo el teatro entre familia...pero se notaba que contenían las risas.
-¿Te acuerdas que nuestras madres acordaron, "que algún día", viviremos juntas por un tiempo...?- Exageraba con las manos y sus Francesitas pintadas.- Pues...¡¡Me quedo a vivir con tigo!!
Nos dimos un abrazo, gritando de emoción, hace tiempo que no la veo, eso me hizo mucha ilusión...
-Chicas perdón...ella es Alison Olsen, viene de Florida...su madre es la hermana de mi madre...somos primas...-Se me escapo una risita entre los dientes.
-Encantada, yo soy Reneesme, Reneesme Martín, soy una de las amigas de tu prima.- Rene sacó su mejor sonrisa, dandose la mano y dos besos por las mejillas.
-Encantada.
-Yo soy Ylenia Laudson, encantada, tambien soy una de sus amigas.- Se acercaron y se saludaron, Yle le cogió una de sus manos calidas.- ¡Que bonitas! ¿Las hicistes tu?
-¿No,no, que va es de la pelu!- Se rieron juntas las 3, me encanta ver a mis amigas conversar con mi familia, me siento a gusto con ello, me siento aliviada de que se lleven bien...saque una sonrisa, ni muy grande, ni muy pequeña...solo lo justo.
-Aleida, me tengo que ir...mi madre quiere que valla a ayudarle a hacer la mudanza, ¿no te importa?- Mi prima me miro con cara de suplica, esa cara me hace gracía...¡parece una niña pequeña! no, mejor aún...¡¡Una muñeca!!
-¡Claro que no! ¡Si eso despúes nos vemos!- Alison, cogió la mano de Ylenia y se fueron por la puerta corriendo por la prisa.-¡¡Prestamela un ratito!! ¡¡Luego te la devuelvo!!- Se escuchaba por todo el hospital, los gritos de Alison.
-¡¡Vale, pero tengan cuidado!!- Me acerque a la puerta, pero ya era demasiado tarde, se habían ido...
Sonreí.
-Me cae bien tu prima, eh...- Señala con el dedo índice hacía arriba.
-La verdad...la hechaba mucho de menos...-Mire al suelo, y despúes mire hacía mi hermano, se escuchaba el cardiograma, ese sonido lo odio...siempre en las peliculas, ese sonido, ese maldito sonido, significa malas noticias, sobre todo cuando, acaba y empieza...el largo.
*
-Haber...dile a este hombre tu nombre entero, ¿de acuerdo?
- Smith, Ruth Smith, señor...- Ruth miro hacía el suelo, estaba avergonzada, tenía miedo de como sería la expresión de su madre cuando la vea con un extraño...la mataría.
-Muy bien...señorita Smith, vamos a ver...- El policía se colocó la mano en la barbilla, estaba pensantivo, pero con cara cansada, se notaba que no dormía bien desde hace dias...- Y aqui estas, pequeña, espero que os sirva de ayuda, pues bueno...que tengan un buen día.
Salimos de la comisaría de policía, nos dirigimos a la parada de autobús más cercana. Se movia con dificultad con la silla de ruedas, la intente ayudar...pero ella no quería. Su expresión enseñaba, la dura vida de un discapacitado, ellos hacen todo lo posible para seguir adelante, ellos no paran hasta cumplir su sueño y mejor aún...todavía conservan su fé...
-Vamos a haber...-Noah se dirigió a los carteles de la parada de autobús, para ver su salida.- La 357, entonces...
-¡¡Señor Smith!!- La niña levanto la voz...
-¡Ya voy!- Noah seguía mirando los carteles sin darse cuenta de lo que sucedia...
-¡¡¡NOAH!!!- Esta vez Noah se dio la vuelta lo más rapido posible.
Un hombre se estaba llevando a Ruth, lo estaba viendo con sus propios ojos, no lo penso dos veces... y empezó a correr.
-¡¡Cabrón!! ¡¡Sueltala!!- Noah corría con el corazón en la mano, esta a punto de cogerlo y lo consigue...-¡¡No te acerques más a ella, hijo de puta!! ¡¡Es solo una niña!!
Cruzaban el paso de peatón, chocaban con la gente que pasaban por su camino, se quejaban, no veían que esa niña la estaban secuestrando, pero eso a Noah no le importa, lo que más importa para el en ese momento dado, es salvar a esa niña. Llegaron a un callejón, donde el hombre daba vueltas buscando una salida, pero Noah llego a tiempo, antes de que esa niña desapareciera de el mapa.
Noah se tiro encima de aquel hombre, empezó a darle puñetazos a ese hombre...le dejó la nariz sangrando, el labio superior partido y sus manos llenas de sangre. El hombre consigue huir, pero Noah se quedo con su cara, con esa cicatriz nadie podría olvidarlo. La niña en una esquina viendo todo lo ocurrido, no dejaba de mirar a aquel hombre, desde que Noah la dejo ahí, segura, de que nadie le haga daño...
Noah se acercó a ella, y le cogió de un brazo, ella lo rechazó, y se giró hacía la pared.
-Tu sabes que no te haré daño...
-¿Ruth estas bien?- Su mano tocaba la frente de la niña.
-¡¡Tuve miedo N-Noah!!- Sus lágrimas no paraban de salir, sus mejillas estaban rojizas.-¡¡Tuve m-mucho miedo!!
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Los pensamientos de Aleida
Novela JuvenilAleida Ross está a punto de descubrir cuál sería su destino, conocerá la verdad e intentará hablar con sus mejores amigos (Laurea, Cindy, Ylenia, Reneesme, Noah y Nick) por el resultado de que ella intentara gustar al chico que quiere desde hace 3...