DETERIORO

EPILOGO

Chicos, muchas gracias por la respuesta a mi iniciativa de apoyo para las personas afectadas por el sismo del pasado martes. Los invito a que si gustan, sigan comentando las frases que yo se las haré llegar junto con un donativo en especie <3 #MéxicoDePie 

Sin más los dejo con el breve epilogo de Deterioro y a continucaión una serie de datos interesantes sobre la historia y su secuela.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------

EPILOGO.

POV Katniss.

—Ven conmigo— Prim no me da tiempo de nada más, me toma del brazo y me lleva a donde desea.

Entramos en el bosque, aquel que tanto ha llamado mi atención desde que llegamos a casa de Madge. Mi amiga dirige mis pasos y no me permite vacilar ante el dolor de las plantas desnudas de mis pies al pisar las rocas y ramas en el suelo. Le pregunto por nuestro destino, sin embargo no me contesta.

Cambia su agarre y ahora me lleva de la mano, promete que va a evitarme el dolor de ser abandonada por Peeta. Que hay un lugar mejor donde él y yo estamos juntos.

—Sube— Primrose señala un árbol de gran tamaño frente a nosotros.

—No puedo hacerlo sin zapatos— le replico, espero una respuesta negativa de su parte pero no llega.

—Confía, volarás como un sinsajo— ante la mención del pájaro no me niego más. Puedo confiar en ella.

Ligeros copos de nieve caen sobre mi cuerpo, es la primera nevada. Peeta dijo que haríamos algo especial. Las lágrimas corren por mis mejillas y me esfuerzo por avanzar a través del tronco. Prim me grita, me apresura y me golpea. Giro para replicarle pero resbalo y caigo.

Grito tan fuerte como puedo, es como si por el sonido algo dentro de mí se hubiera roto en muchos pedazos.

Abro los ojos de golpe, no puedo ubicarme durante los primeros minutos a pesar de ver las máquinas conectadas a mí alrededor, el lugar completamente impecable y la aguja en mi antebrazo. Extrañamente me encuentro en un hospital.

Muevo la cabeza de un lado a otro pero un dolor atroz en la nuca me provoca náuseas y nuevas lágrimas desbordan mis ojos. Mi vista es doble y las manos me tiemblan. Trato de tocar mi rostro, para sentir el tic en mis ojos, sin embargo no logro mi cometido, mis muñecas y tobillos se encuentran encadenados a los barrotes de la cama.

No lucho. No grito. Solo acepto.

Un ardor en el brazo me indica que acabo de recibir una dosis de calmante y caigo en la inconsciencia.

Las voces se hacen presentes, mamá me llama, Madge llora bajito, Finnick trata de bromear, Gale me habla como mi psiquiatra y Peeta... él no dice nada. Ocasionalmente llego a verlo en mis estados breves de conciencia pero rara vez el chico Mellark me llama.

El tiempo pasa, creo que las fiestas han terminado y he arruinado todo para mi familia y amigos.

Mamá llega un día acompañada de Madge y Boggs, mi maestro de la facultad. Me sorprende verlo ahí, nunca creí ser muy importante como para que mi maestro favorito me notara, pero lo hizo y se preocupa por mi salud. Extrañamente no se acerca, permanece junto a la puerta, observándome, pero su presencia ya es halagadora.