KakaSaku

Responsabilidades

Cuando tenía tiempo libre después del hospital, le gustaba pasar las horas en la torre Hokage... Sin que se lo pidieran, realizaba con gran dedicación el trabajo que le correspondía a él... Y allí estaba ella una vez más, sentada en el suelo de su oficina, con un montón de pergaminos que era tarea de él organizar.

— ¿Por qué no te vas a tu casa? — le preguntaba por quinta vez en lo que transcurría la noche

— Porque tú eres un vago y desorganizado

Suspiró — Es mi trabajo, no el tuyo... ¿Quieres ser la séptima?

— No, pero si yo no te presiono, tú no levantas el culo de la silla

— Mi silla es cómoda ¿Quieres probarla? — dijo bromeando

— Mejor levántate de allí y ven a ayudarme, así terminaremos antes

— Pensaba dejar ese trabajo para mañana, estaba a punto de volver a mi casa antes de que llegaras

Lo miró con molestia — Eres el peor Hokage

— Y tú la mejor alumna — sonrió bajo la máscara

— Ex alumna — remarcó la palabra

De mala gana se levantó de su lugar y se sentó en el suelo junto a ella, para ayudarla. Él era el Hokage, pero a veces creía que Sakura se tomaba más responsabilidades que él, y si no hacía lo que le pedía, terminaba recriminándole lo desorganizado, flojo y despreocupado que era.
Ese era el problema, hacía todo lo que ella le ordenaba, siendo que el caso debía ser contrario, pero no se molestaba, después de todo, si no fuera por ella ni siquiera avanzaría en su trabajo diario.

El reloj marcó una hora más, ya pasaba la media noche, y un montón de pergaminos faltaban por organizar.

— Ya puedes irte, es tarde, mañana tienes turno en el hospital

— No puedo dejar el trabajo a medias

— Claro que puedes — la tomó de las muñecas para quitarle el pergamino que acababa de tomar — solo te levantas, cruzas esa puerta, y sales de aquí

Bufó — ¿Y tú que harás?

— Yo seguiré el mismo camino que tú, estoy cansado y necesito dormir

— ¡Ves! — Volvió a tomar el pergamino que le había quitado — Si yo no estoy aquí, tú no haces nada, eres un irresponsable

Se llevó las manos a la cabeza y revolvió un poco su cabello — Sakura... te propongo algo

— ¿Qué quieres? — respondió sin quitar la vista de su trabajo

— Si termino el trabajo antes del siguiente cuarto de hora sin tu ayuda, te tomas una semana de tus responsabilidades de Hokage y me invitas a cenar

Lo miró con molestia — ¿Y si no?

— No volveré a quejarme de tu exigencia y no me opondré a tus órdenes — sonrió

Siempre que Kakashi hacía sus apuestas, las ganaba, y no porque fuera un buen jugador, sino porque siempre hacía trampa, aunque no lo admitiera.
Al igual que ella no admitía que se moría por volver a su casa a dormir, así que estaba dispuesta a aceptar cualquier tipo de trato si con eso podrían terminar luego.

Suspiró — Está bien, tienes quince minutos para organizar los setenta pergaminos que faltan, pero los guardas donde corresponde, no donde te pegue la gana para terminar pronto

— Sí, sí... — sonrió bajo la máscara

Seguido de eso, un par de sellos realizó con sus dedos, apareciendo frente a ella una tropa de Kakashi's que terminó su trabajo antes de lo esperado.

Volvió a sonreírle victorioso — ¿Cuánto tiempo tardé?

— Cinco minutos — dijo molesta

Extendió su mano para ayudarla a levantarse del suelo.

— No quiero verte en una semana por aquí ¿Entendiste? Necesitas descansar, dormir lo suficiente, dedicar más tiempo para ustedes, y no sobre exigirte — dijo acariciando su pequeño vientre abultado

Lo golpeó suavemente en el hombro — Estamos bien, sobreprotector — sonrió

— Volvamos a casa, señora Hatake

Se bajó la máscara y dejó un suave beso en los labios de su exigente esposa.