KakaSaku

Nunca le importó

Cuando tenía doce años, no le había importado enamorarse de su profesor, después de todo era un amor platónico.

Cuando cumplió quince, no le importo sonrojarse cuando su sensei le regaló aquellas hermosas rosas que se molestó en llevar hasta la puerta de su casa.

Al llegar a los dieciocho, menos le importó haberle dicho todo lo que sintió cuando era una niña, aquella noche en el cumpleaños de Naruto, bajo los efectos del alcohol.
Mucho menos le importó después sentir el rostro de Kakashi tan cerca, a punto de besarla, si no hubieran sido interrumpidos por Gai-sensei.

Nunca le había importado lo que pensaran los demás, ella simplemente sentía, ella solo escuchaba a su corazón.

Dos meses después de su confesión Kakashi se había animado en invitarla a salir, no le importo que la vieran salir de ese restaurant del brazo de él, tampoco le importo cuando se le quedaron mirando ese grupo de señoras mientras ella se paraba en la punta de sus pies para besarlo.

Él siempre lleno de prejuicios y dudas, y ella tan libre y confiada.

Ya llevaba veinticinco años de vida, y no le importaba caminar de la mano del hombre que estuvo enamorada toda una vida, no le importaba compartir la cama cada noche con él, mucho menos despertarlo en la mañana. No le importaba abrir la puerta para despedirlo cuando se iba a una misión, mucho menos cuando escuchaba tras la puerta "él le saca catorce años". A ella no le importaba nada, solo le importaba él, todo era por y para él.

Ahora mucho menos le importaba que la vieran caminando por el centro de Konoha mientras acariciaba su vientre con un embarazo avanzado, mientras él, aún nervioso la abrazaba sobre los hombros.

— Kakashi — lo miró

— ¿Hm?

— No me importa lo que piensen los demás sobre nosotros

— Lo sé, siempre he sabido eso

No le importó como la miraban con desaire mientras ella besaba llena de amor al hombre de su vida.