LA HORRIBLE REALIDAD.

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"Todas las mentiras y realidades prominentes de tu boca, de tus dulces y cálidos labios, todo aquello que sentimos no se puede comparar con aquellas sensaciones que describen todos aquellos libros, tus cálidos abrazos que me consumían en tu ser, tu ser tan perfecto, recuerdo bien la mayor parte de mentiras que me decías cuando me tomabas por la cintura y entre tus brazos, con tus cálidas pero frías manos levantabas mi rostro para mirarme con tus ojos perfectos, esos ojos que le daban calidez a mi alma y te acercabas peligrosamente a mi para unir nuestros cuerpos aun mas, solo para que tu depositaras tus castos besos en mis labios, tus besos, déjame decirte que tus besos eran tu mejor teatro y mi mejor realidad.

Quisiera que estuvieras aquí conmigo para que me mintieras...Miénteme de nuevo, miénteme una vez mas...solo una vez mas, tómame entre tus brazos, tómame por la cintura, bésame, dime que me amas como a nadie en este jodido planeta y dime la mejor mentira de todas "Jamas te dejare" y "Todo estará bien", pero , quiero que sea una absoluta realidad para mi como ya es tu costumbre o mejor dicho, así como lo hacías. "

Al terminar de escribir esto Cristina miro al techo de su gran y vacía habitación, comenzó a llorar recordando todo lo que aquel gran amor había dejado en su vida, una vida que para ella estaba llena de desdichas y ya no era vida si no una gran agonía, el silencio de su habitación era embriagante tanto como para escucharse a sí misma como daba cada suspiro e incluso podía escuchar como es que caia cada lagrima de sus ojos, tomo su almohada y la abrazo con la mayor fuerza que tuvo, mientras repetía para si misma:

-¡¡¡Vuelve!!! mienteme una vez mas, pero vuelve...-

Esas simples palabras fueron las mas difíciles de mencionar para ella como nunca antes lo había sido, ya que las lagrimas que rodaban desde sus ojos hacían que sus palabras se atoraran en su garganta y salieran en forma de gritos y berridos, cuando ella pensó que todo estaría bien su hermano sin preguntar tiro la puerta de un simple golpe, con el estaban su mejor amiga Liz y su mejor amigo Alex, mientras paso su vista por cada uno de ellos para reconocerlos ya que después de todo ella llevaba demasiado tiempo en cautiverio torturando su alma,  pudo notar como es que ya todos habían cambiando demasiado, como es que los  días se volvieron años, y todo el mundo había cambiado, los miro mientras ellos corrían hacia ella de una manera muy desesperada, los tenues y brillosos ojos de Cristina comenzaron a cerrarse mientras una sonrisa se formaba en sus labios...Se desvaneció en el suelo de su habitación, tal vez fue por el sueño, o tal vez por falta de alimento, o simplemente su cuerpo ya no soporto mas.

-CRISTINA!-Gritaron todos al unisono

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Ella despertó en una cama de hospital, la cosa que mas odiaba, al despertar observo por todo el cuarto hasta encontrarse con esos ojos, los ojos los cuales penso jamas volveria a ver, los ojos de "el".

-Cristina, ¿por que estas asi?-dijo el en un tono de preocupación.

-Por que estas aqui?...como es que-El poso uno de sus dedos sobre sus rojos labios 

-Por favor, deja de torturar a tu hermosa alma, ¿que acaso no me amas?, asi que deja de lastimarte, deja de lastimar ese corazón hermosos que alguna vez me entregaste...Oh no alguien viene, esta es mi señal para irme de aquí-el se levanto de una manera rapida pero ella alcanzo a tomarlo de un brazo.

-Por favor no te vallas, quedate aqui conmigo, vuelve una vez mas a mi y quédate aquí conmigo, seamos felices, no te vallas de nuevo-

Dijo ella con lagrimas en los ojos, el la tomo de su mentón depositando un casto beso en sus labios, acaricio su pelo, la miro con una sonrisa amable.

-Vamos, déjame ir, solo por esta vez, aun no estamos destinados a estar juntos de nuevo, así que vamos suéltame- la miro por ultima vez mientras ella lo soltaba, se dio media vuelta

-Pronto estaremos juntos te lo prometo-Dijo con lagrimas en los ojos.

El la miro y le sonrió, movió la cabeza de un lado al otro y con una voz muy amable pero tierna dijo:

-Tu y tu terquedad nuca cambiaran, jajaja-

-Por favor quedate- Ella suplico por ultima vez mientras lo vio alejarse lentamente

-Recuperate por favor- Dijo el el un tono mas preocupado

De pronto ella vio entrar a Liz de una forma muy extraña, ya que no se acerco directamente a ella si no que fue directo al doctor del cual no se había percatado estaba ahí, Cristina trato de preguntar que pasaba, pero por alguna razón ella no podía hablar, se encontraba incomunicada con el mundo, tal vez la falta de alimento y sueño la dejaron sin fuerza para hablar...

-Doctor que es lo que esta pasando?!-Dijo Liz muy asustada y enojada

-Por dios señorita usted no debe estar aquí!-Dijo el doctor tratando de sacarla de ahí

-No me iré de aquí hasta que me diga que todo esta totalmente bien!!!-

La habitación era la mas estresante de todo el lugar, inundada entre luces rojas, alarmas y gritos por parte del doctor y Liz los cuales se encontraban discutiendo mientras hacían todo lo posible por Cristina la cual parecía no reaccionar a nada de lo que hacían, en un intento desesperado Alejandro y el hermano de Cristina corrieron al lugar tratando de sacar a Liz de ahí, justo cuando estaban a punto de cruzar la puerta Cristina abrió los ojos y les hablo.

-LO VI!, ¡¿EN DONDE ESTA EL?!-

-Cristina!-Grito Liz con lagrimas en los ojos y una voz ronca por gritar tanto

-Cristi, ¿estas bien?-Dijo Alejandro en un tono de tranquilidad

-Que te pasa?!, ¿sabes cuanto me preocupe?!, ¿solo piensas en ti no es así?-Dijo su hermano llorando

-PREGUNTE QUE ¿EN DONDE ESTA EL?!- Pregunto ella de nuevo

-De quien estas hablando?!-

Cristina volteo insistentemente hacia todas las direcciones habidas y por haber, mientras lloraba y su corazón latía como loco por el simple hecho de querer encontrarse con el de nuevo, ella solo pensaba en el y en sus hermosos ojos, y su recuerdo florecía en ella como la mejor de las flores en primavera.

-De quien hablas Cristi?-Dijo Liz un poco mas tranquila

-De quien mas tendria que hablar?!Estoy hablando de el, el ser mas perfecto del mundo, el...Estoy hablando de Richard!-

-Richard?....

-Si Liz, vamos se que tambien te agrada, poco, pero te agrada, ayúdame a buscarlo!, estoy segura de que lo vi por aqui, se acerco a mi y me dijo muchas cosas y luego se fue y llegaron ustedes...-Cristina miro a su amiga mas desesperada que nunca-Por favor, el salio en cuanto entraste tu...-

-Cristina, por favor no digas tonterías....-

-NO ES NINGUNA TONTERÍA! por favor solo ayúdame a encontrarlo-

Todos los que estaban en la habitación a excepción del doctor que se encontraba con ellos se miraron mutuamente intercambiando miradas tristes y pensamientos, de pronto Liz tomo a todos de los brazos incluyendo al doctor para sacarlos de la habitación amablemente y poder hablar con su mejor amiga Cristina, al estar en la puerta todos miraron a Liz con cara de preocupación mientras el doctor le hacía una pregunta:

-¿Qué es lo que le va a decir?-

-Solo quiero que usted se mantenga cerca, ellos le explicaran un poco mas a detalle-

-Muy bien señorita estare aqui por si necesita mi ayuda-

Liz movió la cabeza de arriba a abajo para tranquilizar al doctor y darle mas tranquilidad, cerro la puerta rápidamente y miro a su amiga postrada en cama y desesperada por encontrar a aquel chico, comenzó a caminar en su dirección y la tomo de la cara y le pidió se tranquilizara, se sentó a los pies de la cama y se dispuso a decirle todo.

-Por favor quiero que me pongas atención y no quiero que me odies ¿ok?-

-Liz sabes que jamas te odiaria pero ya dime de una vez por todas donde esta el-

Ambas se miraron de una manera suplicante, Liz por un lado suplicaba que ella no la odiara puesto a que ella siente la mayor responsabilidad, y Cristina esta suplicando a que Liz hable y le revele el paradero de su "amor".

MIS SENTIMIENTOS, TUS CARTASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora