MIS SENTIMIENTOS, TUS CARTAS

EFÍMERA FELICIDAD

LIZETTE

Eran ya mas de las 4 de la mañana, yo no tenia ninguna señal de que siquiera Angel siguiera vivo, llevo mas de 2 horas con las llaves de su camioneta en mis manos, he dado mas de mil vueltas en la habitación tratando de decidir que hacer.

Simplemente ya no podía con todo esto, no salio para nada como lo esperaba pero ya no podía mas, necesitaba decírselo, todo mi yo pedía a gritos decirlo en el momento, tal vez fue el calor del momento o la presión o su incredulidad pero todo me empujo a hacerlo.

Marcó nuevamente a Cristina, no existe otra persona con la que el pueda estar, por dios esos dos recurren entre ellos mismos a desahogarse tienen que estar juntos ahora.

Escucho el primer timbre...

El segundo timbre...

El tercero...

-¿Si?-

Escucho del otro lado de la linea, reconozco de inmediato la voz, es Cristina con mucho demasiado sueño, es normal, ya es muy tarde.

-Oye, ¿esta Ángel contigo?-

Pregunto mordiéndome una de mis uñas, realmente no se que puedo hacer si dice que no.

-Liz, me encantaría preguntarte que paso, pero sinceramente solo te pediré que vuelvas a dormir y si no lo has hecho ve y hazlo, todos necesitamos dormir un poco y pensar las cosas porque muchas cosas se dicen al calor del momento y...Liz, no se que le dijiste de Richard a Ángel pero realmente estaba mal y estaba balbuceando cosas muy raras...-

Escuche a Cristina suspirar muy hondo del otro lado de la linea, no podía verlos pero sin dudas podría apostar que bebieron hasta olvidar como deletrear, y si ella no lo hizo, el si.

-Cristina...Cris escúchame, en serio lamento todo lo que esta pasando pero...Solo déjalo así.¿Mañana crees que podamos salir?-

Tal vez ya estaba siendo momento de contarle todo, incluso tal vez Ángel ya se había adelantado.

-Liz, mañana saldré con Alejandro, la verdad estoy muy cansada y mañana sera un día muy largo, ¿te parece si lo dejamos para el próximo viernes o sábado?-

-Claro, escuché que hay una fiesta fantástica, deberíamos ir el viernes y el sábado salir solo nosotras a platicar-

-Claro, descansa, adiós-

Me recosté en la cama del hotel por lo menos ya sabia que Ángel estaba bien y estaba durmiendo con alguien de confianza y no en un parque.

Tal vez estamos en extremos muy...Lejanos y ninguno se ha dado cuenta de eso...

CRISTINA

Colgué e inmediatamente mire a Ángel, se había dormido pero no sabia si se había despertado después o no, tenia la botella en sus manos y lagrimas en las mejillas, ambos habíamos dormido en el sillón de la sala, seque las lagrimas que parecían recientes, vi la hora marcada en el reloj de mi celular, en serio pensé que era mas tarde, no creí quedarme tanto tiempo despierta, deseaba que quien estuviera ahí fuera Richard pero sinceramente no cambiaría a Ángel por nadie, mucho menos después de la actitud reciente de Richard.

Tome la botella entre mis manos, trate de levantarlo un poco, al no poder me resigne y traje un par de cobijas y las esparcí por el suelo, ¿que hice?, simple, solo lo tire al suelo donde todas las cobijas estaban esperándolo impaciente, me dio un poco de risa el hecho de que eso no lo despertara pero tenia mas sueño que ganas de reír en ese momento así que tome lugar a su lado, arme un pequeño muro de almohadas al lado contrario del que se encontraba el, solo por si hacia falta golpearlo sin diñarlo en caso de que regresaran sus pesadillas.