Es una puta necesidad la de volver a sentir la navaja sobre tu piel, ver como todo el dolor que sientes se vuelve algo físico. Que por un momento olvidas toda la mierda que ocurre y te centras en cortar, de ver esas marcas otra vez y no recordar que todo a tu alrededor está mal, tú estás mal.
Las palabras de mi madre se repiten una y otra vez por mi cabeza.
«¡Estúpida niña inútil!» «No sabes más que estorbar» «Tú y tu padre son el uno para el otro, no hacen nada más que molestar» «Si no hubieras nacido, todo habría sido diferente»
Mi madre hoy me ha repetido el por qué mi padre nos ha abandonado. Vale, me lo ha gritado en la cara.
Cada día, no hace más que emborracharse al llegar del trabajo de medio tiempo que tiene como bartman en un bar. Ja! ¿Irónico, no? Trabaja en un bar y se viene a emborrachar acá, para luego terminar echándome la culpa en la cara de todo lo que le pasa.
Cada mañana, me levanto pensando que toda la mierda que tengo de vida pueda cambiar. Luego veo a mi madre tomar un vaso lleno de alcohol y toda idea de "Volveremos a estar bien" se desvanece de mi mente.
Es difícil la vida, lo sé. Tiene sus cosas malas y todo en algún momento estará bien y bla, bla, bla. Pero, ¿Cuándo ocurrirá aquel cambio en mi vida? Digo, no me porto mal, trato de ser paciente con mi madre y ser la mejor en clases. ¿No crees, ser que está escuchándome, que ya es suficiente para mí?
Dios, desearía que mi vida cambiara aunque sea un poco. Así poder dejar de sentirme una mierda cada vez que mi madre me grita algo.
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Espero la lean u-u
Subiré algunos capítulos para que vean de qué va la historia.
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