Capítulo 4: "Jodidamente odioso".

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La tarde en mi nueva casa se había vuelto uno de los mejores momentos durante toda mi vida.

Tony y sus amigos son realmente graciosos.

Jaime es el más gracioso de los tres. Hasta el momento se ha puesto en ridículo unas veinte veces. Sus chistes sin sentido son realmente divertidos. Me ha dicho, en su particular forma de hablar, que estaba soltero; luego guiñó un ojo y siguió contando chistes. Eso me provocó una carcajada de al menos dos minutos.

Mike es el más infantil. Hace pucheros y lloriquea como un niño. Es muy parecido a mi. He descubierto a mi alma gemela. Sin contar a Tony, con quien si que me divierto. A veces es muy misterioso, pero vaya que amo el hecho de que sea así. Es una característica distintiva de él.

Si bien era callada y "rara" antes de venir a esta ciudad, acá siento que puedo ser realmente yo. No más esconderse, ni quedarse sin hacer y/o decir algo cuando no estoy de acuerdo, quizás... quizás pueda dejar de hacerme daño de una puta vez. Bah, ¿A quién engaño? Eso es tan difícil de superar.

Pero en fin...

No he dejado de reír desde que corrímos a escondernos luego de escuchar un "Cesar Antonio Perry Soto si no desapareces en 5 segundos juro que te haré buscar cada trozo del jarrón nuevo, de porcelana china, que rompiste. Y haré que los pegues con tu propia saliva si es necesario". Resulta que terminamos jugando a las escondidas y yo, que tengo piernas de lana, tropecé al bajar las escaleras por lo que los tres chicos comenzaron a reír sin parar, contagiandome también.

En este momento, estamos los cuatro viendo "Son como niños". Sí, la película es antigua, pero resulta realmente entretenida si la ves con estos tres estúpidos comentando una idiotés cada dos segundos.

-Sigo insistiendo que la hija del loco, que está con la vieja, es igual a Mike -Dice Tony mientras apunta hacia la pantalla. Jaime ríe por lo bajo, al igual que yo.

-¿No es obvio? Soy igual o más sexy que aquella rubia que mencionas -Dice Mike mientras pone poses sensuales, haciendonos reír a carcajadas.

-¡Que estúpido eres, Michael! Se refiere a que eres la hija fea. Sí, aquella pequeña de cabello negro. -Volteamos a ver de dónde provenía la voz. Un chico un poco más alto que yo, de ojos marrones y largo cabello, se encontraba detrás de nosotros con una bolsa en las manos.

-¿Has traído tacos, Vic? -Pregunta Mike con los ojos brillando de felicidad. Con que ese es Vic... pues, no está tan mal... Dios! ¿Qué cosas digo? ¿Cómo me puedo fijar en él?

-Sí, he traido tacos, Michael. ¿Y ella? -Pregunta Vic mirándome. -Mira, sé que Tony te ha dicho miles de cosas como que te ama y esas cosas pero no te hagas ilusiones con él. Debes saber que sólo eres un pasatiempo como todas. Por favor, vete, es mejor ahorrarse lágrimas y en especial, tiempo...

Esto es el colmo de los colmos ¿Me ha confundido con una de las putas de Tony? Lo que faltaba. El lindo chico resultó ser un maldito bastardo. ¿Así trata a todas las chicas con las que Tony sale?

-Vic -Tony carraspeó- ella es Bonnie, mi hermana... Pequeña Tortuga él es Vic.

Vic me analizó, de pies a cabeza, unas tres veces antes de volver a mirar a Tony -¿Ella es la dulce y tierna chica de la que hablabas? Pero si se ve igual a las...

-Vic, creo que deberías callarte -Interrumpe Jaime. Lo cual agradezco porque si hubiera  terminado la frase, juro que lo mataba ahí mismo.

-Un gusto conocerte, Vic. -Dije para luego subir a mi nueva habitación sin siquiera mirar en su dirrección. ¡Maldito y más maldito! ¿Cómo puede siquiera llegar a pensar que parezco una cualquiera? O no, no creo... o más bien, estoy segura de que tengo una cara y un cuerpo poco producidos. Menos me visto provocativamente como parecer una facilona ¿O sí?

Esto es jodidamente odioso. Y para remate, alguien toca a mi puerta interrumpiendo la paz que podría haber tenido dentro de unos minutos.

-Pase -Logro decir aún enojada.

-Hey! ¡Pequeña tortuga! -Dice Tony entrando a la habitación, cerrando la puerta tras de él- Sé que Vic fue grosero pero es que tiende a alejar a las chicas con la que estoy. Es algo así como el más maduro de los cuatro y bueno... no quiere que lastime a las chicas y miles de estupideces más que dice la gente coherente.

Río ante su comentario -Bueeeeeno, no importa. Aunque hubiera sido más decente de su parte venir él a disculparse...

-Está sirviendo los tacos -Dice justificando.- Vamos a comer, pequeña tortuga.

-Está bien, Tony Turtle.

Bajamos y nos encontramos con la mesa arreglada. Vale, sólo habían platos y unas servilletas.

Siento unos brazos en mi cintura y volteo rápidamente para ver a Jaime reír como loco.

-D...deberías ver tu... tu cara -Dice Jaime tirado en el suelo, riendo.

-¿Q-qué tiene mi cara? -Digo tocándome la frente y las mejillas para darme cuenta de lo sonrojada que estoy.

-Niña Tomate, ven a sentarte para comer -Dice Vic. Todos ríen mientras yo, aún sonrojada, camino hacia la silla junto a Tony. Maldigo mil y una veces a Vic. Maldito estúpido. ¡He quedado en ridículo por su culpa!

-Ya, pequeña tortuga. Vic sólo está siendo amistoso contigo -Dice Tony colocando su brazo izquierdo en mis hombros. ¡Sí, claro! amistoso...

-Sí, solo quiero ser amigable -Vic muestra sus dientes en una perfecta e inigualable sonrisa. Cualquiera que la viera se enamoraría por completo de ella. Ese debe ser su método de conquista, supongo.

-¿Podemos comenzar a comer ya? - Interrumpe Mike mientras con alegría mira los tacos, ya en su plato.

-Sí, ¡A comer! -Grita Tony quitando su brazo de mis hombros para tomar un taco.

El resto del día fue realmente aburrido. La llegada de Vic, según yo, arruinó nuestra tarde entretenida.

Estabamos en la sala, sentados sin siquiera dirigirnos la palabra. Es un silencio de paz.

Ya cuando me comienza a dar sueño, me levanto y voy a mirar por la ventana.

Miro por ésta y un escalofrío recorre mi cuerpo. Decido cerrarla de golpe para así dirigirme a mi habitación rápidamente.

Al girarme choco con algo, o mejor dicho con alguien. Un torso duro está frente a mi. Levanto la mirada encontrandome con unos ojos cafés. Aquella mirada jamás podré identificarla.

Sentía que al mirarme podía ver más allá de la fachada que llevo. Podría descubrir mis más oscuros secretos y miedos. Era impresionante la intensiad con la que sus ojos iban dirigidos a mi. Como si supiera que es lo que estoy pensando en este mismo instante.

No podía mantener la mirada. Vic cada vez me provocaba más nervios con su cercania.

- ¿M...me dejas p-pasar? -Pregunto aún con los nervios a flor de piel.

-¿Te pongo nerviosa?- Por su cara se asoma una estúpida y arrogante sonrisa. ¡Genial! Ahora creerá que estoy loca por él. -Provoco eso muy seguido -Suelta de repente. Y esa fue la gota que arrebalsó el vaso.

-Eres malditamente molesto, Vic. ¡Púdrete! -Lo empujé lo suficientemente fuera como para apartarlo e intenté seguir mi camino hacia mi habitación. Pero no. Una mano me agarra la muñeca, deteniendome por completo. Los cortes recientes siguen causandome dolor, por lo que la fuerza que ejerce Vic, me provoca gemir de dolor.

-Espera, Bonnie -Dice Vic aún sosteniendome.

-¡Suéltame! -Grité mientras me zafaba de su agarre. Lágrimas comenzaron a salir por el dolor. Vic levanto lentamente mi manga de la sudadera, dejando ver aquellos cortes que tanto había tratado de ocultar.

-¿Por qué? -Susurra Vic en un tono apenas audible. Bajo la manga de la sudadera y sin dar explicación corro a mi habitación, como debería haber hecho desde un principio.

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Bueeeeeeeeeeeno

Aquí otro capítulo xd

Espero les guste y la lean. Más rato subiré  capítulo de "Let yourself go"

Espero sus votos y comentarios n-n

Bulletproof Love (Pierce The Veil)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora