Sueños Oscuros, Claras Pesadillas

18-Malos Recuerdos

Ya pasó otro día aburrido en la realidad, Huk sigue sin novia, yo sigo siendo el mejor en la clase, etc. Ha caído la noche y ahora es momento de dormir.

Al despertar extraño la mano de Shay arrastrándome del pié. Voy donde July para ver cómo se encuentra. Camino por las malditas manzanas infinitas, y veo que hay vehículos que me llevarían más rápido, pero no me daré por vencido, llegaré a esa clínica siendo un héroe que recorrió solo tantos kilómetros.

—Doctor, cómo está la durmiente que trajimos con un amigo ayer?

—Está estable, aunque no ha despertado aún.

—Se demorará mucho en despertar?

—No lo creo, puedes esperar afuera mientras tanto.

—Está bien.

Menos mal que me dijo que no demoraría, ya llevo aquí CUATRO HORAS y ésta enana no quiere despertar!!! De repente, el doctor abre la puerta y me llama, yo me levanto y corro hacia el consultorio. Al llegar veo a July despierta, parece que sigue un poco desconcertada.

—July —digo.

—July? —responde.

—July, tenemos que buscar a Shay, puede estar en cualquier parte, no la he visto en la capital.

—Capital? Shay?, quién eres tú?

—No bromees conmigo, tenemos que irnos.

—Puede que haya sufrido de pérdida de memoria —comenta el doctor— . Suele pasar con las personas que sufren una contusión tan fuerte en el cráneo.

—Pero, yo caí de la misma altura, y no tenía una sola herida, cómo es posible que yo no sufra de los mismos problemas de memoria?

—No se te ocurrió que ella pudo sufrir todo el impacto por tratar de que tu no sufrieras nada de él?

—No puede ser —digo con la voz temblorosa— . Ésto tiene que ser una maldita broma!!! —grito hacia arriba— JULYYYYYYY!

Creo que he perdido a esa enana rabiosa que me hacía reír, esa misma que estaba enamorada, que quería protegerme a toda costa, que pudo haber dado su vida por mí si el impacto hubiese sido mayor, no me lo creo, entre sollozos empiezan a salir lágrimas, mientras una enana completamente diferente en la camilla me mira raro, no entiende la situación, yo me arrodillo y ella al verme así me agarra con sus brazos y me aprieta contra su pecho, eso me hace llorar aún más.

—Eres una estúpida —susurro para mí.

Entonces caigo en cuenta de algo, de que es una durmiente, y de que al despertarse debería recordar todo en la vida real, entonces me seco las lágrimas con el brazo, la agarro de la mano y me dispongo a buscar al profesor Nuk para que me diga la manera de salir de éste mundo más rápido.

—Espero tener suerte...