|| 3 ||

6.5K 379 16
                                    

Camila:
Planeaba llevarla a uno de los mejores hoteles y hacerle todas las cosas que deseaba...
Pero mientras conducía, entendí que si no había tenido su primer beso...Aún es virgen.

No podía, honestamente con otra chica me habría valido un sentimo que aun fuera virgen, pero con Lauren me sentí en la obligación de hacer que su primera vez fuera especial.

Me detuve frente a una pequeña tienda.

–¿Que hacemos aquí?.–Preguntó cuando entramos al lugar.

–Tú solo toma lo que te guste, yo iré por algo de comer.–La vi caminar hasta dónde estaban las cervezas, y tomar un sixpack, yo fui por bocadillos.

–Gracias.–El hombre que estaba atendiendo solo miraba las tetas de mi ojiverde, le di el dinero llevandomela lejos de ese idiota.

–¿Puedo tomar?.–Señaló las cervezas.

–No no puedes, ya tienes suficiente alcohol dentro, estas.–Tome el paquete.–Son para mi.

Ella se río y me dio un cortó beso, haciéndome suspirar.

–Quiero enseñarte un lugar.–Conduci hasta el pequeño parque cerca de un gran hotel.–Quiero que me beses.–Exigí.

–No tienes que pedirlo.–Me acorraló cerca de un árbol, y comenzó a besarme como si fuera una experta, cuando la cosa se puso mas caliente decidí frenarla.

Estuvimos un rato dando vueltas por el parqué, ella me habló de su familia, yo de la mía. Me contó de su infancia, haciéndome reír con sus vivencias, yo le conté mis chistes malos, y ella se reía, hablamos de nuestros problemas mientras comíamos lo que habíamos comprado hace un rato.
Por primera vez me sentía bien hablando con una chica, sin necesidad de besarla para que se callase.

–Luego en clase de matemáticas, dibujé al profesor con un sostén en la cabeza.–Me reí fuertemente al imaginarla haciendo eso.

–Yo creí que eras un angelito.

–No lo soy.–Me miró directamente causando en todo mi cuerpo un escalofrío, muchas imágenes se formaron en mi cabeza sintiendo algo apretado en mis pantalones.

–No sigas mirándome así.

–¿Por qué?.–Ella lo sabía perfectamente.

–Estas haciendo que pierda mi auto-control, y no quiero hacerlo.–Ella se río de mi, se acercó lentamente dándome un beso, que no quería seguir pues sabía como terminaría.

–No te controles, no quiero que lo hagas.–Mordió mi labio inferior mis manos fueron a su trasero, apretándolo.–Sé que quieres...Yo quiero.

–No, esto debe ser especial para ti, sera...Sera tú primera vez.–No quería decir eso en voz alta, pero lo hice, solo por el hecho de haberme acostado con la mayoría de chicas de la escuela no quería decir que fuera un témpanito de hielo sin sentimientos cursis.

–Solo vamos.–Llevo sus uñas hasta mi espalda pasándolas lentamente.

–Vamos.–Perdí el control llevándola hasta el auto, tomé las botellas de cerveza, cada una de un tirón y entramos al hotel.

**

–Will necesito una habitación.–Saludé a mi amigo, era uno de los recepcionista.

–Claro, ¿Tu acompañante tiene 18 años?, no quiero problemas.

–Si los tengo.–Lauren habló con seguridad, aunque yo sabía que no los tenía.

Me dio las llaves y tomé el ascensor del lujoso lugar.

–¿Que haces?.–Pregunte asustada, mirando como su mano desabrochaba mis pantalones.

–¿No es obvio?.

–Espera a llegar a la habitación.

–Hablas mucho, dejame hacer lo que mi mente me pide hacer.–Se pegó a mi besándome ferozmente.–Al fin.–Me jaló fuera del ascensor, buscamos la habitación, pasé la tarjeta para abrir la puerta y ella me pegó contra esta.–Veremos si es cierto lo que todas las animadoras dicen.–Me quedé callada, no sabía que hacer, siempre era yo quien tenía el control, ahora ella esta bajando mis pantalones.

–Oh...–Solté un quejido sintiendo sus frías y suaves manos tocar mi miembro.

–Es lindo.–Opinó riendo tiernamente, me besó mientras comenzaba a subir y bajar su mano.

bajo lentamente hasta ponerse de rodillas frente a mi, solté un gemido cuando sentí su cálida boca recibir mi miembro.

***

–Yo...Yo...–Quise aguantar lo mas que pude pero la imagen de ella metiéndolo y sacándolo de su boca me ponía a mil por hora.

Ella se alejó rápidamente dejándome sin mi ya cerca orgasmo.

–¡¿Por qué mierda te detienes?!.–Pregunte molesta.

–Tranquila, tengo algunas cosas que probar.–Dejó caer su vestido dejándome ver ese perfecto cuerpo cubierto solo por su ropa interior, sentí una punzada en mi necesitado amigo.

Me llevó hasta la habitación con mi pene al aire, me tiró en la cama posicionándose encima de mi, restregándose sin vergüenza alguna en mi, haciendo que la habitación se llenará de gruñidos de placer.

–¿Estas segura?.–Pregunté besando sus suaves labios.

–Si...–Respondió con algo de temor.

–Si quieres que me detenga, solo dimelo y lo haré.–Quité su sostén dándome gusto acariciando sus pálidos pechos, mordiendo sus rosados pezones, baje sus bragas y me detuve a admirar su cuerpo desnudó, sus mejillas se tornaron de un rosado carmesí. –Eres perfecta.

–¿A todas les dices lo mismo?.–Me enoje un poco por su comentario, pero esta noche ella era y esperó siga siendo la única.

–Las demás eran lindas, pero tú eres perfecta, fuiste hecha para mi, y serás mía. –La besé profundamente cerrando mi promesa.

Posicione mi miembro en su entrada, mojándolo aún mas con sus fluidos, comencé a entrar en ella, deteniendome cuando su rostro mostraba dolor.

–¿Estas bien?.–La miré preocupada, ella asintió en respuesta.

–Sigue.–Entre de vez lo poco que faltaba sintiendo lo apretada que estaba.

–¡Ahh!.–Soltó un gritó de dolor, y una lágrima resbaló por su mejilla, la limpié rápidamente dándole pequeños besos y caricias hasta que se tranquilizó.

–Si sientes que te hago daño, solo dimelo porfavor y me detendré. –Le dije, sabiendo que aunque me dijera, seria casi imposible detenerme.

Comencé con el viene y van de caderas, sintiéndome en la gloria cuando entraba hasta el fondo.
Mis movimientos comenzaron a tomar fuerza y sus uñas se enterraron en mi espalda, quité rápidamente mi camiseta para sentir nuestros cuerpos completamente unidos, besé sus cuello dejando un notable marca, ella era mía ahora.

**
Estábamos por comenzar la tercera ronda, pero su cuerpo estaba demasiado cansado. La tome en brazos uniéndola a mi.

–Camz...Te quiero.–Susurro entre dormida y despierta.

–Yo también Lauren.–Besé su frente y me dispuse a dormir.

+×÷

Admito que no soy buena para escribir smut, pero bueno xd
Gracias por leer, esperó estar actualizando mas seguido:)

"Cinderella" ||CamrenG!P||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora