bad romance ; jm + yg III

012 ; not

Narrador Omnisciente.

Jimin arrojó su mochila y su abrigo sobre el sofá antes de irse hacia la cocina pensando en preparar algo de comida, ya que por la noche tendrían que llegar sus sobrinos.

Inició a preparar todo, para luego solamente esperar que se cocine.

Cuando fue hasta el living, sintió que lo llamaban y corrió hacia el espejo que estaba colgado sobre la pared de aquel sitio. Miró a este y en vez de reflejarse, aparecía una nota que decía ''Ven''. Automáticamente supo que era un llamado de su Reino.

...

—Ya estoy aquí, ¿qué pasó? —preguntó Jimin mientras miraba a los miembros del Reino ángel.

—Antes de decir lo que pasó, preferimos decirte lo que no pasó.—contestó uno de los miembros con voz autoritaria— El orden que usted, Park, ha prometido con Min se ha roto.

—¿De qué está hablando, majestad? —intentó hablar sin tartamudeos al escuchar su apellido.

—Usted había prometido que no tendría problemas con un demonio, pero lo está teniendo, Park. Confiemos en que usted lo tenía bajo control... Pero al parecer no.—respondió mientras juntaba unos papeles que estaban sobre la mesa del frente.

—Sí, claro. Disculpe, pero sigo sin saber de qué me está hablando, majestad. No he tenido ningún inconveniente con el demonio nombrado. —confesó.

—El demonio nombrado... —habló otro miembro del Reino, pero esta vez una femenina— Min. Este ha entrado en un colapso, las fuerzas del Reino Demoníaco lo han inducido en la Cápsula de Terapia, ya que lo que le había sucedido era incontrolable para ambos Reinos. Nosotros creemos que usted, Park, ha tenido algo que ver con ello...

—Esperen.—suspiró e intentó ingerir todo lo que le habían dicho— No tengo ni la más remota idea de lo que a él le pasó, ni nada por el estilo. No he tenido contacto con él ni nada, no tengo nada qué ver...

—No te estamos culpando, Park.—dijo otra señoría— Solamente queríamos saber la versión de tu parte si tenía que ver, pero ya que no tienes nada que ver, estás libre del cuestionario.

—Claro...—suspiró— ¿Puedo preguntar algo? —Jimin miró a todos asintiendo— ¿Es grave lo que sucede?

—Es de primer rango, y dicho sea de paso mi hijo, tiene derecho a saber lo que sucede. —habló otra señoría, quién era madre de Jimin— ¿Cierto?

—De acuerdo...—habló el señor que había iniciado la conversación— Sí, es grave. El Reino Ángel tiene que firmar un trato en dónde admite la utilización de químicos intensos, para la intervención quirúrgica del demonio que ha tenido ese colapso. Y te preguntarás qué tiene que ver el Reino Ángel con esto... Tiene mucho que ver, ya que quienes tienes el poder de hacer intervenciones médicas son solamente los ángeles.

—Algo entiendo...—se puso firme— Gracias por el informe.

Luego de decir eso, salió de la junta rápidamente al patio para poder pensar con más claridad.

El colapso que había tenido Min causó que las fuerzas lo indujeran a la Cápsula de Terapia. Esa cápsula es exclusivamente para cosas incontrolables, ya que quién entra allí automáticamente entra en un estado de coma, hasta que el ser vuelva a su normalidad.

Tal como apagar una computadora para que vuelva a funcionar bien luego de que se resetee.

Deseó verlo incontrolablemente, no imaginaba en el estado que podría estar Yoongi en aquella Cápsula de Terapia que tenía una dudosa reputación. Sabía perfectamente lo que hacía aquella cápsula, y no era para anda bueno.