Las semanas pasaron, y cada vez todos estábamos, de nuevo, más unidos. Desde aquel día, digamos que algo cambió, de nuevo, con Jimin. Se abrió más, compartía sus emociones con más ganas y por lo general comprendíamos poco a poco por qué era así. Mis amigos no se extrañaron cuando les decidió contar lo que yo sabía, que no iba a clase, que vivía solo con su padre, y aquellas excusas que servían para ocultar sus misterios. Surgieron preguntas, incógnitas, pero como siempre fueron evadidas de una forma u otra. Sin embargo, nadie supo de la fiesta que hicimos, ni de lo que compartimos meses atrás, ni nada que no tuviesen por qué tener en su conciencia. Jimin volvió a caminar conmigo a casa las veces que Jungkook no se ponía insistente, y volvió a madrugar para encontrarse conmigo para ver el amanecer e ir contando las pocas estrellas que quedaban antes de que el sol se escapase del horizonte. Hablábamos, nos reíamos, y en un abrir y cerrar de ojos, ya era año nuevo.
La fiesta había sido bastante novedosa. Por fin, Yoongi se había dignado a comprar un árbol de Navidad, aunque decorarlo con fotos de su perro Holly no había sido del todo navideño, excepto por una de ellas que estaba colocada cerca de la punta, con el animal portando un gorro de Papá Noel rojo de terciopelo, que miraba a cámara con una sonrisa, si es que los perros pueden hacer eso. También había bolas de cristal pendiendo de las ramas artificiales, y no mucho más ya que puso la excusa de que no era millonario, y que prefería gastarse sus ahorros en otras cosas, como en "sobrevivir". Pese a aquello, todos nos habíamos divertido, y habíamos pasado un tiempo de lo más placentero. Volvíamos a ser una familia otra vez, y el nuevo integrante hizo que el ambiente cambiase después de tantos años a uno más nuevo y amigable.
Cuando llegó la hora de ir a ver el amanecer, cambiaron las cosas.
Seokjin y Hoseok, por fin, habían confesado lo suyo a todos. Aparentemente no fue una sorpresa, pues Jimin y yo no éramos los únicos que nos lo olíamos. El único que casi se cae de la silla fue Jungkook, pero lo aceptó casi al instante en el que escuchó las palabras de los chicos contarse todo lo que se querían y desde cuándo lo hacían.
Desde ahí, todo empezó a dar vueltas, al menos, para ellos.
Yoongi estuvo al borde de perderse entre el alcohol de no ser por la fama de buen bebedor que tenía. Seokjin y Hoseok se retiraron "un momento" de cuarenta minutos al cuarto del mayor, y Namjoon y Jungkook se quedaron dormidos viendo una película que echaban a las tres de la mañana.
Jimin y yo fuimos los únicos en cumplir, en nuestro lugar de siempre, a las cuatro de la mañana.
—¿Te das cuenta de que siempre venimos a las cuatro cuando queremos estar solos?
—Sí, esta podría volverse nuestra hora. —Contesté, mirando al frente.
Todo estaba callado, excepto el mar.
—Tae.
—¿Sí?
—¿Y si cuando termines de estudiar nos escapamos?
—¿Escaparnos? ¿Dónde?
—Lejos de aquí. —Sus ojos estaba cristalizados, y las estrellas se reflejaban en ellos. —Donde nadie sepa que estamos ahí, y podamos vivir como queramos. Piénsalo, no tendríamos que lidiar con responsabilidades o cosas que no nos gustase hacer. No tendríamos que depender de la opinión de nadie, y seríamos mayores de edad. Podríamos hacer lo que quisiéramos. Y no tendríamos por qué volver. Y podríamos vivir... felices. —El chico agachó la cabeza y la hundió en sus rodillas, que las tenía flexionadas entre sus brazos. Me sorprendió escucharle decir eso, pues de Jimin nunca me lo hubiese esperado. Algo le agobiaba, y no sabía el qué. Quería desaparecer, desvanecerse, como yo muchas veces había planeado. Sin embargo, su sentimiento era distinto. Me transmitía algo más fuerte, me transmitía miedo.
—¿Y dónde quieres ir? Yo no sé mucho inglés, así que tendríamos que quedarnos en Corea. —Inocente, cuestioné el último problema del plan de mi amigo.
—No... No es eso.
Nos volvimos a callar, y los segundos se hicieron eternos.
—Ent...
—Sácame de aquí. Por favor. —Acerqué mi mano hasta su cabello, que removí con cariño. No sabía por qué, pero acepté. Acepté y aceptaría todo lo que me pidiese, porque él había hecho un mundo a mi lado que no podía desperdiciar. Me miró, y entonces mi guante tocó su mejilla, que estaba congelada pese a que no la estuviese sintiendo.
—Lo prometo, Jimin.
Y volvieron a pasar las horas, hasta que el sol asomó por el horizonte.
Cuando llegamos a la casa de donde habíamos salido, todos nos esperaban mientras preparaban el desayuno, y Jimin no soltó mi mano en el rato que nos reuníamos para comer. Necesitaba hablar con él en serio, sobre por qué era así, sobre qué le atormentaba. Decidí esperar unas semanas, y quise disfrutar de lo que nos quedaba antes de tener que volver a clase. Al terminar, abrimos los regalos del "amigo invisible" que habíamos organizado, como cada año, y de nuevo pude ver una sonrisa en el rostro del de pelo naranja. Namjoon le había regalado una pequeña pecera con medusas falsas, que se movían cuando el agua chocaba contra ellas cuando se pulsaba un interruptor que creaba una corriente ascendente, y en ese momento, me sentí un poco celoso. Yo no le había regalado nada, y tampoco sabía cuándo era su cumpleaños.
Cuando nos fuimos a nuestras casas, tomé una bocanada de aire.
Me propuse cambiar, y serenarme para prepararme para confesarle todo a Jimin. Tenía que reunir el valor para hablar con él de esas cosas, y para descubrir de una vez qué pasaba con él. Yo era débil en comparación con él, y no podía dejar que aquello me atacase a la hora de ponernos serios.
El invierno acabó tan rápido como había llegado, dando paso a una nueva etapa. Una etapa que marcó algo en mí, y en él.
Y pasamos una hoja del libro que estábamos escribiendo, un helado día de primavera.
Ey.
PerDÓN POR TARDAR.
Tengo mis razones.
Se llaman: exámenes.
PEro vaya, que no me queda mucho para terminar.
Como habréis notado, este ha sido un capítulo de transición. Digamos que a partir de aquí las cosas van a cobrar sentido. Pensaba hacer este fic más largo, pero creo que sería demasiado. No he calculado cuántos capítulos le quedan, pero sí tengo claro el orden de los próximos acontecimientos.
Pero poco a poco, ¿vale?
Nos vemos en el siguiente capítulo~.
(BTW estoy pensando en cambiar de portada, así que si a alguien le apetece, acepto cualquier sugerencia y diseño que hagáis.)
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Orange waves - Vmin [PAUSADA]
FanfictionTodas las mañanas, Taehyung veía a un chico mirando al mar. Todas las tardes, Taehyung veía a un chico mirando al mar. »Prohibida la copia, adaptación o traducción total o parcial de la obra. Todos los derechos reservados a la autora...