One shots/Harry styles

I will die (Parte II)

-Lo había olvidado con todo lo de la mudanza- Me levanté.

-Te extrañaré- Me dijo cerca de los labios.

-No creo que mas que yo- Elimine la distancia que había entre nosotros.

Me beso tiernamente y ese beso fue cambiándose algo intenso y necesitado.

Se escucho un claxon.

-Llegaron por mi- Me miro.

-Claro, Te amo- Lo mire tiernamente.

-Creeme yo mas- Cerró la puerta.

Muero por su ausencia que me hace extrañarlo, que me hace soñarlo, cuando mas me hace falta.

Cuanto daría porque a mi lado despierte enredado en la cama.

Me hace mucha falta, soy yo quien lo espera, quien le llora y quien lo anhela los minutos y horas.

Muero por besarlo.

El timbre se hizo sonar y fui a abrir, una visita me vendría muy bien, desde que Harry no esta me he sentido muy sola.

Abrí la puerta y ahí estaba él. Me recibió con un abrazo lleno de cariño, ambos pasamos a nuestro departamento.

-Estas aquí, no puedo creerlo- Lo miré incrédula.

- Estos meses fueron eternos para mí, te extrañé- Contesto tomando mis manos. Mientras ambos estábamos sentados en el sofá del Living de nuestro departamento.

Los dos poco a poco fuimos acortando el espacio que había entre nosotros, hasta que esos centímetros se acabaron completamente.

Sus cálidos labios sobre los míos, el me empujaba, hasta que quede completamente recostada en el sofá y sobre de mi Harry besándome. Me levante bruscamente.

- No haremos nada que tu no quieras hacer, _______- Me dijo Harry  comprensivamente.

- No es eso es solo que no es el mejor lugar- Conteste.

Él se volvió a acercar a mí y comenzó a besarme, mientras caminamos hacia mi habitación.

Cerré la puerta y en la obscuridad de la habitación, el me acorralo en la puerta y volvió a besarme.

Con delicadeza fue quitando mi blusa, mientras yo desabrochaba los botones de su playera.

Él fue bajando sus labios por mi cuello.

Yo desabroche y quité sus pantalones y el quitaba mi short.

Él tomó mi mano y sin despegar nuestros labios me dirigió hacia la cama, donde me recostó delicadamente para después el posarse sobre mí cuidando que no cayera su peso en mí.

Poco a poco nos fuimos deshaciendo de lo que quedaba de ropa.

Después de besos y caricias, fuimos un cuerpo, un alma nos unimos completamente.

-Te amo- Me dijo.

-Te amo- Respondí.

Por ultimo, nos cubrimos con las sabanas y me recosté en su pecho desnudo y el me abrazó, para así dormir juntos.