One shots/Harry styles

All to well/Part II

Y sé que fue hace mucho tiempo
Y que la magia ya no está aquí
Y puede que esté bien
Pero no me siento del todo bien

Puse el periódico de lado y pase mis manos por la cara en signo de frustración. Diablos, era el cuarto día buscando un trabajo decente de medio tiempo, hace poco menos de la semana Harry había llegado temprano a comer, solo para informar los detalles del divorcio.

La casa, manutención y educación a sus hijos no les faltaría, eso le aseguro Harry, mas sin embargo tenia que buscar un trabajo para poder costear su vestimenta y productos personales.

Podría estar con la ropa que tenia por un año, a ella eso no le molestaba, el problema era encontrar un piso cerca de su casa, o ex casa. Se imaginaba que por esta zona no era nada barata las rentas de pisos.

Aunque fuera en el maldito suelo, con una simple cobija.

Saldría adelante.

Harry había sido muy claro en cuestión de fondos monetarios, quería recibos absolutamente de todo, no quería que se gastara un solo centavo de su bolsillo para _______.

Apretó sus labios, recordando la discusión con su esposo, porque seguía siéndolo, no tenia el valor suficiente para firmar el acta. Esta seguía donde mismo, mismo mueble, arrinconada y abandonada con intenciones de jamas volverla a leer y por supuesto tampoco firmarla.

Podría hacerlo.

Podría hacer esto sola, no necesitaba un hombre.

No necesitaba a Harry.

No necesitaba mas estrés en su vida, podría conseguir un abogado del centro familiar, pero con el dinero y poder que tenia Harry, en una llamada quitaría la custodia de los niños.

Así que opto por seguir las reglas de Harry, aunque estas estuvieran descabelladas.

No terminaba de maquinar como su esposo, se había convertido en menos de una semana, tal vez llevaba meses o años sintiéndose frustrado con su relación, pero no había mencionado nada por los niños.

Había optado por tomar sus cosas y dormir en la habitación contigua a la de los niños, era pequeña con una cama individual, antes era utilizada por una niñera, pero se había cansado de ver alguien mas criar a sus hijos, así que esa niñera solo había durado un par de semanas.

Tenia una pila de periódicos de la ultima semana, donde había remarcado con un plumón fosforescente, anuncios de trabajos de medio tiempo.

Pero.

Pero, ¿Quien contrataría a una mujer de casi 29 años, sin una carrera, y prácticamente madre soltera?

Un pequeño anuncio había captado su atención, era simplemente en una sucursal de venta de ropa, no era el gran trabajo, ni la mejor paga, pero era el único trabajo en el que habían podido acordar una cita. Las demás ofertas siempre quedaban en llamarla o dejar su currículum para próximas vacantes.

Sabia con seguridad que no llamarían de nuevo.

¿Como había cambiado tanto su vida en una semana?

Tendría que entrar en una terapia para poder soportar todo este dolor.

Rió internamente.

No tenia ni para pagar un viaje redondo en autobús hacia el centro, menos lo tenia para un medico.

Su móvil vibro, con un pequeño tono en particular, una de sus canciones favoritas empezó a sonar en el.

Sonrió por que sabia que su mejor amiga siempre estaba para ella.