CAPÍTULO 1

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2010

Es de madrugada, noto profundamente el cansancio acumulado más la situación vivida hace apenas una hora. Ando por la calle, aun así, con una sonrisa de oreja a oreja. El hecho de cumplir poco a poco mi sueño hace que una felicidad repentina invada todo mi ser, seguramente si hablara con alguien, emanaría alegría y la contagiaría como siempre, curiosamente, he hecho inconscientemente.

Miro la Luna por un momento, he ido muy deprisa y estoy a dos casas de la de Jordi. Brilla como nunca antes había visto y eso hace que pasear por calles sin farolas no sea tan fatídico. Me proporciona una cierta tranquilidad, al igual que todas las acciones que van a suceder a este día.
Cuando alcanzo el suelo después de haber saltado estratégicamente la verja, veo a mi mejor amigo sacando la cabeza por su ventana.
- Eres idiota – le susurro cuando estoy a su lado.
- Y por eso soy tu mejor amigo incondicional y principal cómplice de tu libertad.
- ¿Siempre tendrás la razón? – le abrazo para que no piense que me voy a ir sin haberlo hecho antes.
Me ayuda a subir a la ventana, aunque soy bastante atlética y simplemente lo hace por pura cortesía. Así es Jordi, Gabriela tiene mucha suerte con él. Tiene el portátil encima la mesa, con la web de Kayak.es en la pantalla, datos introducidos e incluso billete pagado. Destino: Austria. Sólo de ida. Lo miro, veo orgullo en sus ojos y a la vez tristeza por mi marcha.
- Sabías que tarde o temprano ocurriría.
- Sé que prefieres el temprano y yo el tarde. Siempre hemos sido dos polos opuestos, por eso nos avenimos tan bien.
- Ya lo hablamos hace unos días, sólo hablaré contigo y si la policía te interroga dirás la verdad. Pero les harás prometer que continuarán como si no lo supieran, al menos hasta que den el caso como abierto y lo dejen de investigar aunque mi familia insista.
- Has visto demasiadas películas.
- Y tú me has acompañado a verlas siempre.
- Touché.

Miro el reloj del portátil, el tiempo ha pasado más rápido de lo que creía, debo coger el primer autobús a Barcelona, que pasa a las 6:10. Tengo dos horas. Como Jordi empieza los jueves a las diez podrá recuperar el sueño, así que repasamos el inicio de mi aventura punto por punto.
Aprovecho para comer algo, debo estar energizada para sobrevivir al día movido que me espera. Dos horas de vuelo, que sale a las 9, llego al aeropuerto a las ocho menos cuarto como muy tarde y podré hacer el chequeo y todo. A las 11.30am habré llegado a Viena, pero debo coger un tren hacia una ciudad cercana, donde me reuniré con la embajada Española y me llevarán hasta mi universidad. Hablaré con el director y lo más seguro es que me haga el "tour" por los establecimientos. Asistiré a alguna clase para asegurarme que las imparten como me han explicado y me acercaré a la profesora o profesor que haya para que me ayude a contactar con los alumnos que vivan en la residencia de estudiantes situada en dicha ciudad. Me acoplaré cuando el papeleo esté listo y haré la ruta para ir a estudiar que llevaré a cabo durante el tiempo que tarde en hacer mi carrera. Diseño gráfico es complicado, hacerlo en inglés tal vez aumenta la dificultad, pero mi fuerza de voluntad será suficiente.  

La huida soñadaWhere stories live. Discover now