- "Quiero verte otra vez" – leí por milésima vez.
Había pasado ya una hora desde que Shawn me envió ese mensaje, yo también quería verlo, ya que todo lo que pasó ayer parece producto de mi imaginación – Oh Dios, no lo hagas sufrir más, contesta – se sentó frente a mí.
-Bella, no sé.
-Te mueres por verlo y no lo conozco, pero ya lo amo.
-Estúpida – reí.
- ¿Qué? – respondió indignada – suena como un tipo decente, que es lo que te mereces, además investigué y... - alzo varias veces las cejas – ese chico se está quedando en uno de los hoteles más costosos de la cuidad – la miré confundida.
- ¿Lo estás stalkeando?
-Claro – dijo como si fuera la cosa más normal del mundo – quería ver si encontraba algo, una foto... no sé, quería ver a tu príncipe.
Suspiré – es tan... lindo – la miré y ella sonrió de oreja a oreja, sabía lo mucho que le emocionaban estos temas románticos y aunque odiaba alimentarle la estupidez me era inevitable en estos momentos – no solo está bueno por fuera, es todo un caballero.
-Lo ves, te mueres por verlo, dile que si ahora mismo.
-Okay – miré mi teléfono nuevamente y respondí con un simple "también yo" bloqueé rápidamente la pantalla y tomé otro sorbo de café. No pasaron cinco minutos cuando mi celular comenzó a vibrar, era él llamando – oh por Dios.
-CONTESTA – gritó Bella más emocionada de lo que debería.
-Hola... ¿Shawn?
-Qué bueno que aún me recuerdas - sonreí - ¿Te sientes mejor?
- Sí, estoy muy bien.
- ¿Lo suficiente para salir conmigo? Digo, si no estás ocupada.
- ¿Cuándo?
-Hoy... en este momento.
-¿En este momento? Pero son más de las 4:00 y estoy en Santa Mónica.
-Lo sé, estaba pensando decirte que saliéramos mañana en la noche, pero adelantaron varias de mis reuniones para este fin de semana, voy a tener que regresar a Canadá más pronto de lo que había planeado, parece que este es mi único tiempo libre y lo único que quiero es verte – mi corazón empezó a latir rápidamente - No quiero irme sin volverte a ver, sobre todo porque no voy a volver a Estados Unidos por un tiempo. Si quieres voy a recogerte, conozco un buen lugar donde podemos ir y...
-Sí... si quiero.
- ¿De verdad?
- Sí, yo también quiero verte – reí.
-Entonces, envíame tu localización y saldré por ti en cinco minutos.
-Está bien, nos vemos – corté la llamada y Bella gritó emocionada.
-NO PUEDO CREERLO, no has tenido una cita en mucho tiempo, tengo que ser parte de esto.
Ella corrió desde mi partió trasero donde estábamos sentadas hasta mi habitación, cuando llegué casi toda mi ropa estaba tirada en la cama - ¿Qué mierda? – ella me calló y sentó sobre la cama mientras pensaba que debía usar para mi primera cita con él. Al final terminé con unos jeans de tiro alto, crop top blanco y chaqueta de cuero. Mi cabello estaba bien, lo dejé suelto, me maquillé y cuando estaba lista empecé a sentirme nerviosa, como había dicho Bella, hace mucho tiempo no tenía una cita y menos con alguien que gustaba. Y sé que lo vi ayer, pero...
