Capítulo Tres

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Día 7

Mis padres se fueron de viaje por dos o tres semanas, ahora ya no hay nadie que venga a recogerme  a la escuela.

Estoy feliz, porque podré ver a Izuku todos estos días.....aunque si solo faltan quince minutos para que termine la escuela he sentido una eternidad.

Al fin escucho decir a la maestra “Nos vemos mañana”....rápidamente agarro mis cosas y salgo del salón.

Recuerdo que Izuku siempre va a entrenar con su maestro, así que me dirijo al lugar que los veo entrenar.

Triste regreso a mi casa, pase más de dos horas esperando y nunca apareció. Entré al patio de mi casa y sorprendido vi a Izuku sentado en frente de la puerta.

Corrí hacía su lado y le pregunte “¿Que estas haciendo aquí?” me sonrío de manera tan tierna respondiendome  “Te estaba esperando”.

Me tomo de la mano y sentí como estaba fría, quien sabe desde hace cuanto me había esperado...la ropa que le entregue no tenia un par de guantes y este día ha sido el más frío de todos.

Agarré ambas manos y trate de calentarlo un poco con mis manos, pero no estaba funcionando.....preocupado abrí rápidamente la puerta de mi casa y lo metí a ella.

Lo deje en la entrada y corrí hacia mi habitación tan rápido como pude, busque un par de mantas y unos guantes......baje y no lo vi en la entrada!!!!

Volteaba mi mirada como loco hacia todas las direcciones, cuando lo vi....estaba sentado en el sillón de la sala (más que sentado diría acostado) abrazaba fuertemente la almohada mientras sonreía.

Me acerque y lo cobije, me miró y un leve sonrojo apareció en sus mejillas con un “Gracias” como respuesta.

Estaba realmente feliz, me senté a su lado y lo contemple por varios minutos. Un “Te fui a buscar donde entrenas con tu maestro....pero no te encontre” salió de mi boca con un tono un poco triste.

Esto hizo que se levantará y se pusiera de rodillas en el sillón mientras me miraba sorprendido. Apretó más la cobija, estiró sus brazos hacia mi y me rodeo con ella para que también me calentará.

“Lo siento” fue su respuesta, estaba sorprendido por sus acciones que no sabia que decir....pero me sentía tan cómodo entre sus brazos que cerré las ojos y apoye más mi cabeza en su pecho.

Los minutos pasaron y seguíamos en la misma posición, no se quien es el mayor.....pero me sentía mimado en esos momentos.

“Puedo verte mañana?” le pregunte tímidamente y un “Si” fue su respuesta. Acordamos que nos veríamos aquí (en mi casa), luego nos iríamos hacia algún otro lugar a pasear y jugar.

Le di mi horarios de clases, pero el no tenía reloj...mucho menos se sabía los números. Le entre un reloj de juguete que me salio en una caja de cereal y le enseñe el número en el que yo salia de la escuela, de esa manera podía venir a buscarme.

Ya era tarde y el tenia que irse, quería acompañarlo por seguridad, pero el me dijo que prefería irse solo. Desde la entrada de mi casa vi como se alejo poco a poco hasta ya no ver su figura....

Día 8

Fui a la escuela, comí, jugué y platique con mis amigos. Sin embargo a la hora de salida salí corriendo desesperadamente para llegar a mi casa y ver a Izuku.

Como había prometido estaba esperándome en la grada que hay al ingreso de mi casa, una sonrisa de felicidad apareció en mi rostro al verlo.

Me acerque y le hablé, mi boca estaba seca y mi cara sudada debido a que había corrido....me miró preocupado y me pregunto si estaba bien.

Le sonrei y solo le dije que estaba un poco cansado. Me senté a su lado para descansar unos momentos y saque mi botella con agua para beber mientras recupera mi aliento.

Le propuse ir al parque para jugar con los columpios a lo cual me mostró una mirada llena de emoción.

Entre a mi casa y tome algunas galletas en caso tuviéramos hambre más tarde, cerré la puerta con llave y le dije “Vamos ” a lo cual asintió la cabeza y me siguió.

Comenzamos a caminar y como si fuera normal para el tomo mi mano y así fuimos en todo el camino.

Estábamos cerca de la casa de una anciana que casualmente nos observaba, una vez cerca de ella la salude con una sonrisa y ella me respondió “Deberias soltarle la mano a esa cosa asquerosa.....no vaya a ser que te contamine su suciedad!!”

Ese comentario hizo borrarme la sonrisa y solo dejarme sorprendido....no entendía porque decía eso, pero no me gustaba.

Voltie mi mirada a Izuku quien nos observaba con ojos vacíos y una sonrisa vacía......un “Monstruo, ojalá te mueras” salió de aquélla anciana.

Rápidamente me enoje y le grité “Quien es un monstruo feo y asqueroso es usted!!”...noté como se sintió ofendida y molesta se fue a su casa.

No me había dado cuenta del daño que esas palabras habían afectado a Izuku hasta que vi que soltó mi mano y se adelanto corriendo.

Se detuvo por un momento y me hizo una señal indicándome que caminara más rápido o nunca llegaríamos al parque, confundido lo seguí sin saber lo que pasaba dentro de su mente.

Seguía con una sonrisa en su rostro, pero era tan rápido que no lograba rebasarlo y mirar sus ojos.

Llegamos al parque y nos quedamos jugando hasta que se oculto el sol, al regreso a casa Izuku trato de tomar mi mano más de una vez.....pero antes de hacerlo siempre se quedaba paralizado y ya no continuaba.

Me dejo en casa y vi como se retiro lentamente, no entendía que le sucedía y esperaba que los demás días volviera a ser como antes.

Día 9

Hoy no hay escuela, y mi hermana esta aquí porque es su día de descanso...no puedo jugar con Izuku y hoy volvió a llover.

El día esta triste, al igual que mi corazón. No puedo ni jugar en el patio porque me puedo enfermar...y no puedo ir a buscar a Izuku porque mi hermana esta aquí y no me dejará ir solo....

Me acerqué a la ventana y lo vi!!!! Estaba realmente sorprendido!!! Llevaba la ropa que le entregué e iba tomado de la mano del señor.

Estaba tan feliz....su sonrisa era tan hermosa. Abrí rápidamente mi ventana para poder llamarlo y saludarlo......pero cuando un pensamiento me invadió haciéndome imposible hablar y ver como se alejaba.

Las últimas veces Izuku había volteado por voluntad propia hacia mi ventana..¿porque esta vez no lo hizo? Si conocía mi casa..

Seguí mirándolo como se alejaba poco a poco y un sentimiento de enojo me inundo, estaba sorprendido de lo que estaba pensando en aquellos momentos.....una tristeza me invadió y lágrimas empezaron a salir de mis ojos.

Dominado del pánico me escondí para que nadie me viera, llorando en silencio....y deseando que esos pensamientos desaparecieran.....

Continuará...

Notas:

—¿Ya descubrieron quien cuenta la historia?

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