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Tratar de descifrar a Karlie siempre ha sido difícil para Taylor, hay días en los que la ve feliz, otras está seria y cuando más se quiere acercar es cuando la ve triste.
Últimamente la ha visto así, se ve distante y ausente, su amiga Sam siempre hace bromas para que ella sonría pero nunca lo hace, terminó por completo la relación que tenía con Melissa, ella quiere acercarse, ser una amiga para ella en estos momentos, pero a sus oídos ha llegado que es solo una etapa que está pasando, ¿Alguna vez les pasa? de esos días en los que sientes que no puedes con nada, simplemente es tristeza y no hay explicación, tal vez si la haya, pero nos aferra tanto el pensamiento de no ser lo suficiente que la salida es un simple y sencillamente no hay explicación.
Karlie Kloss en si no era una persona popular como muchos pensaban, es verdad que es algo reconocida pero no al grado de "ser alguien" en la escuela. Taylor siempre pensaba que Karlie sin duda era de las chicas más hermosas que había visto, en las clases de inglés siempre se le veía mirar por la ventana hacia el edificio de enfrente en el segundo piso, pues ahí estaba Karlie ya que como eran muchos tenían que separarlos de salón, se pasaba bastante tiempo viendo, ya que la otra rubia salía bastante o salía temprano del salón. Era simplemente encantador verla en el pasillo fumando, verla hablar con Sam y a veces verla sonreír hacia que sonriera como estúpida.
A veces pensaba en Karlie y no la visualizaba a su lado, sentía que no pegaban como pareja y eso hacía que se sintiera triste, ella era muy insegura y vulnerable, su autoestima estaba hasta el piso, sentía que no era nada y no era suficiente para alguien, no se sentía bonita, mucho menos cómoda con su cuerpo, dudaba mucho sobre que ponerse, normalmente usaba un simple suéter y unas zapatillas, su color favorito era el azul y no creía en esos estereotipos de "El azul es solo para chicos" a ella le daba igual y se sentía feliz y orgullosa de ese color.
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Taylor caminaba tranquilamente por los pasillos, tenía en sus brazos sus libros que acababa de utilizar, se acercó a su casillero y como de costumbre esperaba ver un tipo de flor con alguna nota pero no cayó nada, algo decepcionada dejó los libros y agarró su mochila, su última hora era inglés y tenía ya dentro su libro y cuaderno, caminó hasta su salón y abrió la puerta, algunos de sus compañeros estaban platicando, otros escuchando música, ella evitó mirarlos y se acomodó en su lugar, junto a la ventana, la maestra entró y tras de ella Shauna, corrió hasta quedar junto a ella y le sonrió.
—Olvidé inglés, estaba en biblioteca tratando de buscar una copia del libro de matemáticas que la maestra pidió—dijo por lo bajo
—Yo lo tengo, ya termine, te lo presto si quieres—dijo, Shauna asintió y Taylor agarró su mochila cuando en el fondo vio un sobre azul, sonrió porque sabía de que se trataba, más no podía leerlo con su amiga a lado, decidió ignorarlo
Le dio el libro a Shauna y al voltear para ver si habían señales de Karlie su sonrisa desapareció, ella estaba recargada de la barra y estaba riendo con una chica, estaban solas, la inseguridad que tenía le hacía pensar que era su nueva conquista, uno nunca sabe. Decidió prestar atención a la clase por el resto de la hora y olvidarse de la chica problemas.
***
Karlie había decidido asistir a todas sus clases de Inglés, las faltas se habían acumulado y el director le dijo que podía expulsarla, eso obviamente causaría más problemas en su casa, miró la hora y faltaban solo quince minutos para que la clase terminara, podia aguantarlo claro que si, miró por la ventana y vio como habían pequeñas aves en el techo del edificio de enfrente, por primera vez quiso ser una, sentirse libre, estar solo, sola como ella estaba acostumbrada, visitar muchos lugares y no tener que lidiar con alguien, aunque lo asimiló y para ser sincera no le gustaría morir sola, su cabeza estaba hecha un lío, lo único que quería era sentir paz. El timbre la sacó de sus pensamientos y agarró su mochila metiendo su cuaderno dentro, salió ignorando a todos, una vez fuera se sentó en un banco y sacó un cigarrillo de su chaqueta, no tenía noción de cuanto había pasado hasta que vio a acercarse levemente a la chica de Azul, mejor conocida como Taylor Swift.
—Oye tú—le habló y está la miró—¿No antes de había dicho que ese suéter no es nada lindo?
—N-no, pero a mí me gusta—respondió la rubia
—Cambio de palabras, el suéter no es feo, el color, es color de chicos—dijo rodando los ojos ante lo último
—¿Y qué hay con eso?
Bajó el cigarrillo y la miró, ¿Le había respondido?
—No te daré un golpe solo porque tu piel parece ser linda y suave, pero no me gusta que me respondan así—diciendo eso agarró mochila y se fue, pasando por su lado golpeando ligeramente su hombro.
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Holaaaa, ¿Me extrañaron? Porque yo si.
Perdón por dejar todas mis historias demasiado tiempo he tenido un año muy ocupado *se hacia la importante* en fin apartir del lunes comienzo de nuevo.
