XVI

2.1K 134 13
                                    

Tenía que admitir que el regalo fue muy lindo de su parte pero aún así, un simple regalo no quitaba su lado peligroso y malo.

"Sabes, me encanta cuando sonríes," dice mirándome fijamente a los ojos.

Me quedé callada por unos segundos, pues no sabía como o que responder.

"Gracias enserio," hice una pequeña pausa, "pero no puedo aceptar tu regalo."

"Por qué? Acaso no te gustó?"

Estaba decidida a decirle cómo me sentía, pero en el momento en que cambió el tono de su voz y la expresión de su rostro, también cambié de opinión

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Estaba decidida a decirle cómo me sentía, pero en el momento en que cambió el tono de su voz y la expresión de su rostro, también cambié de opinión.

Le di mi mejor sonrisa falsa y lo abracé para calmarlo. Después me aparté de él y mentí diciéndole, "No puedo aceptarlo por que yo no te regalé nada."

Él me sonríe abrazandome una vez más, "Tú presencia es suficiente para mí. Yo siempre había querido tenerte conmigo y ahora por fín te tengo."

Hice mi mayor esfuerzo para no llorar, ya que él ya me lo había dejado muy claro, nunca iba dejarme salir.

"Sólo me falta una cosa más de ti," él continuó, "pero tendré que ser muy paciente. Sé que con el tiempo, aprenderás a amarme tanto como yo te amo y así estaremos Siempre Juntos."

En sus sueños, me dije a mi misma, nunca me enamoraría de un demente como él. No sabía por qué pero aquéllas dos palabras me asustaban y mucho. De donde sacaría esa frase? 'Siempre Juntos' De tan sólo pensarlo, causa que me den escalofríos. Justo cuando creí que nunca me iba soltar, dejó de abrazarme.

"Bueno, que descanses muñeca. Mañana será un nuevo día," dice soplándome un beso.

"Buenas Noches," fue lo único que logró salir de mi boca.

En pocos minutos, él ya se encontraba en su recámara y yo acostada en mi cama. Por más que trato dormirme, no puedo. Tan sólo pensar en que Mario podría entrar al cuarto en cualquier momento, me daba miedo. Entonces decidí levantarme a cerrar la puerta con seguro. Sólo así me sentía un poquito más segura. Mañana será un nuevo día, pero dudo que mejore. Mientras esté viviendo aquí, mi vida será una miseria. Ya que no podía dormir, comencé a recordar a mis padres y a mis compañeros de escuela, en especial a Sebas.

Tal vez si le hubiera dado una oportunidad, él me hubiera podido proteger y nada de esto hubiera pasado. Fui una estúpida, pensé.

Obsesionado || Mario Bautista [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora