Sus brillante ojos color chocolate calleron en mi, examinandome de arriba a bajo. Lucía demacrada y podía ver ojeras bajo sus bellos ojos. Su piel estaba lastimada y se notaba delgada y pálida.
- ¿Quien eres tú?.
- Un objeto.
- ¿Como te denominan?
...
Natsu se abrió paso entre la gente, las mujeres de él laboratorio suspiraban al verlo pasar y uno que otro hombre le miraba con recelo.
Al entrar a la oficina de Makarov, el jefe y creador de aquel laboratorio, se le fue entregado las llaves de su oficina y algunos documentos con el sujeto que iba a tratar.
Una simpática mujer de cabello blanco y largo le había entregado la carpeta, y se retiró taconeando con un aura tranquilo.
Natsu salió de la oficina principal y bajo algunos pisos hasta llegar al subterráneo, donde tenían a todos los sujetos de prueba.
Abrió la carpeta y le hecho un rápido ojo al expediente de su sujeto.
>Nombre: Lucy Heartfilia. >Sujeto: LH-567 >Años: 20 Años de Vida. >Género: Femenino. >Razón por la que está en el laboratorio: Se encontró inteligencia desarrollada en la femenina, entre otras habilidades las cuales no ha querido mostrar desde su estadía. >Datos útiles:Su madre murió de cáncer, su padre se suicidó. Abandono la universidad. >Origen:Desconocido. >Grupo Sanguíneo:No registrado.
Bajo aquella breve información, había una foto de la mujer que le tocaba, que resultó solo ser cinco años menor que el.
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La belleza de la joven lo cautivo, su cabello liso y rubio había llamado su atención, y sus ojos chocolate desprendían un brillo especial, sin contar las pequeñas bolsas debajo de sus ojos. A pesar de no tener maquillaje puesto se veía de una forma naturalmente bella.
Al llegar al piso que le tocaba cerro la carpeta y camino mirando las puertas, hasta llegar a la 'LH-567' ingreso la llave y se adentro en el cuarto.
Un guardia lo esperaba, su extraño cabello le pareció cómico a Natsu, era largo y Negro, su rostro tenía algunas perforaciones y sus ojos estaban teñidos de un extraño rojo.
- Le pedimos que se siente en la silla y trate de entablar una conversación con el sujeto. A penas logre esto, debe venir a ver al sujeto dos veces al día mínimo. - Le entregó un papel que tenía los horarios del sujeto - Debe ganar su confianza, descubrir su origen y cuales son sus habilidades.
Y sin más se fue dejando a Natsu en el cuarto.
Frente a él, habían dos sillas, con la diferencia que había una muralla de vidrio interfiriendo entre ambas sillas. Tomo asiento en la silla de su lado y espero.
La puerta del otro lado del vidrio se abrió, un joven empujó delicadamente a la rubia hacia adentro del cuarto con una venda cubriendo sus ojos.
- ¿Ya me puedo quitar la venda? - Su dulce tino de voz congeló a Natsu.
- ¡Si! - Habló cuando logró salir de su hipnosis.
La muchacha se sacó la venda pestañeando un par de veces dejando ver sus onduladas y largas pestañas que hacían lucir sus ojos de chocolate color.
