50

8.4K 1.3K 261
                                    

Apenas había dormido.

Por muchas vueltas que había dado en la cama, a su mente le había parecido una mejor idea mantenerse en vela prácticamente toda la noche.

No había parado de pensar una y otra vez en la conversación que había tenido con Yoongi.

Se había disculpado, por supuesto que sí; pero aquello no parecía ser suficiente, era como si sintiera que a pesar de haber dicho todas y cada una de las cosas por las que se sentía culpable no hubiesen sido bastantes, como si el hecho de volver a disculparse por ellas una y otra vez fuera la única manera de quitar poco a poco el peso de su culpa.

Pero tampoco podía volver a casa del chico y repetir todas sus palabras e implorar una disculpa.

Era todo jodidamente difícil; o quizás simplemente era que ellos estaban haciéndolo parecer mas complicado de lo que lo era realmente.

No estaba seguro, no estaba seguro de nada excepto de que necesitaba a Yoongi de vuelta a su lado.

Bufó molesto y salió de la cama, agarró una de las sudaderas que había sobre la silla y se la puso sobre los pantalones deportivos con los que había "dormido"; y tras eso, salió del apartamento tratando de no hacer demasiado ruido para no molestar a Hoseok, quien seguía profundamente dormido.

Quizás podría salir a correr, despejar su mente, volver al apartamento, ducharse y marcharse a casa de Yoongi para solucionar, de una vez por todas, todo aquello.

Parecía un buen plan; era un buen plan, solo que decidió saltar algunos de los pasos de su lista y corrió directamente hasta llegar al piso del chico.

Subió en el ascensor, sintiéndose notablemente nervioso y trató de tranquilizarse.

¿Qué esperaba conseguir con eso?

Se dispuso a salir de aquel reducido espacio, pero se congeló en su sitio cuando las puertas se abrieron completamente.

—Y-yoongi, yo, s-siento molestarte—Comenzó—Entiendo si tienes que ir a algún lugar, pero prometo que no serán mas que un par de minutos.

El mayor le miró fijamente desde el exterior del ascensor.

—De hecho, iba a ir a buscarte a casa de Hoseok.

Jimin sonrió levemente sin saber con exactitud porqué.

—¿Podemos hablar?

Yoongi asintió, para justo después caminar hasta la puerta de su apartamento y abrirla, dejando paso al menor.

El chico suspiró profundamente, mentalizándose para comenzar a hablar.

—Hay una cosa que no te he contado, y que creo que es algo que debería haber hecho hace mucho tiempo—Dijo cuando escuchó el sonido de la puerta ser cerrada tras el cuerpo del mayor.

Yoongi frunció el ceño ante aquel comienzo.

—Hoyeon vino a verme antes de que lo nuestro..., bueno, ya sabes...se estropease. Me dijo que no eras de fiar, que debía tener cuidado contigo, y yo juro que no quería que eso me afectase, Yoongi, te lo prometo; pero la duda estaba ahí, y después de ver lo que pasó con Jungkook, yo realmente... pensé que de verdad no podía confiar totalmente en ti. Lo siento..., muchísimo.

—Olvídalo. Hoyeon ya no importa, ¿de acuerdo? Olvidemos todo lo que pasó, ya no tiene ningún sentido.

—¿Ha pasado algo, hyung?—Preguntó al sentir extraño al mayor al decir aquellas palabras.

Yoongi guardó silencio unos segundos.

—Era mentira; todo era mentira.

—¿T-todo?—Dijo presintiendo a lo que el chico se refería.

photograph ◇YM◇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora