Historia de una Abrahamer (TERMINADA)

Capitulo 14

Entonces comenzó a sonar una que parecía en directo, una canción que yo me sabía muy bien; no me lo podía creer... Me giré y allí estaba, Bruno Mars, cantando When I was your man. Por fin le iba a conocer, paró de cantar y se acercó diciendo:
-Hey! Abraham, whats up?
-Bruno Mars- dije sorprendido a la vez que emocionado, estaba allí con el, mi ídolo musical-, estoy súper contento de haberte conocido, de verdad, no me lo esperaba.
-Bueno, era una pequeña sorpresa, porque sabía que querías conocerme ya que tus abrahamers estuvieron una época pidiéndome que escuchase Señorita; la escuché y es una canción genial, y aprovechando que estas el L.A me pidieron que viniese a sorprenderte.
-Pues lo habéis conseguido.
-Sé que en los conciertos de la GiraAM cantabas Tresure así que... ¿quieres cantarla aquí, conmigo?
-Claro, por supuesto que sí.
Cantamos la canción y luego yo salí de cámara mientras le hacían la entrevista a Bruno Mars, mientras esperaba, twittee: "Sin palabras, al haber cantado con Bruno Mars se cumplió otro de mis sueños, y ha sido gracias a mis abrahamers"
Después del programa estuve hablando con Bruno, pero llegó el momento de irse y nos fuimos al estudio a seguir con el disco. Así transcurrieron los días, entre entrevistas y grabar. Un día aprovechando que tenía la mañana libre fuimos al paseo marítimo, allí conocí a un grupo de chicos y cada vez que tenía un rato quedaba con ellos, se llamaban William, el era un chico alto, de pelo moreno y corto; Jennifer, bajita rubia y con los ojos verdes; Miriam, ella era todo lo contrario a Jennifer, alta, morena y con los ojos azules; y Dani, el también era alto, con los ojos muy oscuros y el pelo rubio. Dani y Miriam tenían algo, pero no querían decirlo, William se fijaba en Jennifer pero ella miraba a Dani y le tenía mucha envidia a Miriam, a mi no me llamaba la atención ninguna, quizás un poco más Miriam, su pelo me recordaba al de Itziar, pero me faltaban esos ojazos color miel de Itziar, la echaba mucho de menos; aunque hablaba con ella todos los días, no era lo mismo, necesitaba abrazarla. Aunque cada vez quedaba menos para volver, tan sólo tres semanas quería que acabasen ya.

N.d.r: se que este capítulo es muy corto pero no estoy muy inspirada hoy, el próximo capítulo prometo que será más largó.
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