Capítulo II: Reencuentro en los baños

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Salí de clase y me dirigí hacia el baño para quitarme la mancha de pintura. Me miré al espejo y abrí el grifo. - Maldita Natalia, siempre haciendome bromas- dije en voz alta pensando que nadie me oía.

- ¿Qué te ha hecho Nath esta vez? - dijo una voz masculina familiar, desde el interior de uno de los váteres. En ese momento se abrió la puerta de uno de los váteres y pude ver al chico de la voz familiar.

-ah Ivan, eres tú, me habia asustado jajaja- dije aliviado.

-¿Qué te ha pasado en la cara? ¿Nath verdad?- me dijo con la repuesta clara.

-Sí, ya sabes como es conmigo, nunca para de hacerme bromas, pero en realidad la quiero- dije mientras me miraba en el espejo y me quitaba la pintura con agua. - ¿Y tú que haces aqui? ¿Un apretón? - le pregunté burlón.

- Que va, me estaba meando y ya he aprovechado para estar con el movil. Tenía matemáticas y me daba pereza escuchar a la pesada de Silvia-. me dijo sin quitarme los ojos de encima.

Silvia era la profesora de matemáticas de todos las clases de tercero. Es buena persona pero se enrolla un montón cuando explica. Puede estar explicandote las fracciones y termina contandote su luna de miel.

-jajaja, ya, se enrolla un montón, pero ya sabes como es-. le respondí

-lo sé, por eso me escapo jajaja. Aunque hayan pasado diez minutos y no hubiese vuelto, ella no se daría cuenta - me contó. - ¿Y tú que tal estas Eric?- preguntó aún sin quitarme ojo de encima.

-Bien, no me puedo quejar- le dije secándome la mejilla.

De pronto Iván se empezó a reir sin razon alguna, o alomejor con alguna que yo no conociese.

-¿Por qué te ries?- le dije desconcertante.

-Me hace gracia como te queda esa bata jajaja. Pareces un doctor y todo jajaja- dijo entre risas.- pero me gusta como te queda.

Su risa cesó y solo le quedó una sonrisa cargada de indirectas en su cara. Sus ojos se fijaron en los mios, también cargados de indirectas.

-Gracias, aunque yo me veo horrible con ella jajaja - le dije sin dejar de mirar sus ojos, sabiendo perfectamente a que iban dirigidas sus indirectas.

Habiendolo previsto, Iván se acercó poco a poco hacia mi, sin dejar de mirarme con sus ojos verdes.

-Iván, no empezemos por favor- le frené.-ya te lo dije hace unas semanas.

- lo siento Eric. Ya sé que me lo dejaste claro, pero yo no he cambiado de parecer...-me dijo con voz apagada.

-Creo que es mejor que me vaya a clase ya, estoy tardando mucho. - le dije sin mirarle a los ojos y un poco enfadado.

Salí del baño con un poco de prisa hacia mi clase. Antes de volver eché una mirada hacia atrás y pude ver a bien llorando frente al espejo. No me queria sentir mal por él otra vez, asi que volví a clase.

-Has tardado mucho, ¿Qué estabas haciendo?- me preguntó Nath curiosa.

-puff, luego te cuento, vas a flipar- la respondí.

-pero no me dejes con la intriga- me dijo con ganas de que se lo contase.

Mas tarde, terminada la tercera hora, bajé al recreo. No sabia donde estaba Nath, hacia un rato que se habia ido al baño y no la habia vuelto a ver. Iba a salir al patio, cuando alguien me llamó a mi espalda.

-Eric...uff...espera...uff- dijo una chica con voz fatigada.

-Nath, ¿Dónde estabas?

-Habia ido al baño y luego he salido a buscarte para ir a la cafeteria a por un bocadillo pero no te he encontrado asi que he ido sola. Y cuando he salido de la cafeteria te he visto a lo lejos y he venido corriendo, ufff menuda carrera por el pasillo- me dijo aún cansada.- por cierto, cuéntame lo que te ha pasado en el ba...- la tapé la boca con la mano para que no dijese nada. En ese momento habia pasado Iván por al lado.

Luces entre miradasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora