ix. Udyat, el ojo de Horus

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Yūgi sonrió tratando de asimilar las noticias y hechos, Yami y Atem le seguían observando.

—¿Tenemos algo en la cara acaso? —cuestionó asertivo Yami.

Atem le codeo y le dedicó una mirada reprobatoria ante su arisca actitud, pero solo recibió un hastiado bufido de entre los labios de su hermano. Yūgi comenzó a formular miles de escenarios, preguntas y posibilidades, su boca se movilizó por sí misma, como si gozará de la misma vitalidad que él, como si viviera.

—¿Si son hermanos, por qué se apellidan distinto?

La expresión hastiada en la cara de Yami se comprimió, en medio de la metamorfosis pudo distinguir el trasfondo que Yūgi reconocería en cualquier lado, dolor.

—Yo... Tengo mejores cosas que hacer —soltó rápido Sennen tratando de sonar enojado, al final solo huyó de la habitación casi corriendo.

Atem le dedicó una sonrisa reconfortante.

—Somos medios hermanos

—Pero eso, no venía en el libro —prolifero el chico de ojos amatistas confundido, pero solo obtuvo una sonrisa divertida.

—Mi madre, era la esposa principal del faraón¹, pero la de Yami... —vio a Atem tratar de disolver el nudo de su garganta tragando saliva—; La de él era una concubina por la cual nuestro padre, Aknamkanon cayó sentimentalmente, ella pronto quedó embarazada al igual que mi madre, el conservó el apellido de su madre cuando ella murió y yo el de papá.

Yūgi abrió los ojos sorprendido ante el nuevo dato, al parecer el libro no siempre le contó toda la historia.

—Nacimos el mismo día y todos lo interpretaron como alguna especie de señal, pronto las especulaciones saltaron a boca del pueblo, se nos reconoció a ambos y gobernados juntos como un ser —el moreno hizo una breve pausa—; Dime Yūgi alguna vez ¿has escuchado la historia de Udyat² y Jireh³?

Yūgi negó de nuevo, confundido, pero sonrió leve al ver como el faraón se acomodaba para comenzar a recitar un relato.

—Hace tiempo el gran Osiris fue asesinado por su propio hermano Seth⁴, simbolizando la continua lucha entre el bien y el mal. Seth triunfó gracias a la intervención de la gran diosa madre Isis quien le devolvió la vida. Horus¹’¹, hijo de Osiris cegado por venganza, al querer honrar la memoria de su padre, decidido se enfrentó a Seth a quien castró, perdiendo Horus su ojo izquierdo en la batalla, Seth¹’¹ dividió el ojo en seis fragmentos que esparció por todo Egipto para evitar así que Horus regresará, pero el dios Thot¹’² reunió los fragmentos del ojo, lo curó y reconstruyó, sustituyéndolo así por el udyat «el que esta completo» para que Horus pudiera recuperar la vista  —Yūgi continuó escuchando atentó, pero solo vio la diversión grabada en el violeta de la mirada contraria—; Su mitología se resume en el cómo cruzaba el cielo en su barca solar durante el día, mientras que por las noches atravesaba el duat¹’³ en otra barca para luchar con la serpiente Apofis y así evitar que resurgiera cada mañana.

—Yo creí que el significado del ojo de Horus cambiaba dependiendo si era el izquierdo o derecho —el mas chico se masajeo la barbilla—; Solo que se popularizo el termino “ojo de Ra” por la referencia al sol...¹’

Atem río por lo bajo enternecido.

—Recuerda... No existe una religión egipcia como tal, puedes hablar a grandes rasgos, pero no en todos lados será igual.

Los amatistas del más bajo se iluminaron curiosos, Atem poso un dedo sobre sus labios en un claro gesto de «shh»

—Ahora calla, deberías escuchar toda la historia...



[Referencias]
• ¹; La gran esposa real —ta hemet nesu en egipcio antiguo—; era la consorte oficial, así mientras el cargo fue ejercido por hermanas o medias hermanas —hijas de la anterior gran esposa real—, procurando traer a un determinado vástago real. En ocasiones el título de faraón era sucedido al hijo de una esposa secundaria, si el heredero pertenecía al faraón. Si bien la mayoría de los egipcios eran monógamos, aclaro, el faraón contaba con otras esposas —y concubinas—, de menor rango.

• ²; Udjat en inglés.

• ³; Jiret, Ajet (Axt), o Sejmet como alternativos.

• ⁴; Sutek y Horu en otros relatos.

• ¹’¹; Seth, representante del desorden y la aridez.

• ¹’²; Tot y muchos otros alternativos.

• ¹’³; Inframundo.

• ¹’⁴; Variante al relato.

[Contexto histórico y explicaciones]
Quiero aclarar las diferencias de Horus y Ra, los pondré en un ligero contexto histórico y mitológico en el que se desarrolla la historia, no es como si supiera mucho, pero sí lo esencial.

Los jeroglíficos representan a las deidades con cuerpo de hombre y cabeza de halcón —la mayoría de las veces—, aunque la iconografía de Horus es mucho más rica.

Horus; Aparece con la corona doble del bajo y alto Egipto, o el disco solar, junto con las alas de halcón desplegadas, incluso una figura leonina con cabeza de hombre u halcón a la manera de la gran esfinge y que se conoce como “Harmajis” (Horus que esta en el Ajet = Horizonte)

Ra; Parece tocar o con el disco solar.

La mitología le atribuye a Horus el honor de ser el creador de la civilización egipcia, y su culto se remonta a la época predinástica, tengo que destacar que durante el Imperio Antiguo el faraón era la representación de Horus en la tierra, sin embargo Ra era tomado como una deidad impulsora del universo.

A lo que voy, la historia sera después de la época predinástica y del imperio antiguo, pero antes del Nuevo Imperio, un punto intermedio donde Horus aun es recordado, pero el culto a Ra esta emergiendo como nacional.

No busquen mucho sentido, esperó que haya aclarado dudas, lamento concebir la mitad de la historia en algunos relatos confusos y mitología con muchas variantes, sólo recuerden que ¡pueden preguntar!

Mis conocimientos de la civilización egipcia no son tan vastos, pero sirven, y supongo que esto sería el final del capítulo, lo dividí en dos partes «Udyat, el ojo de Horus» y «Jireh, ojo de Ra» porque es largo y la historia extensa.

Espero hayan disfrutado del capítulo. Jireh será menos extenso —espero—, pero eso no se sabrá hasta que lo escriba. -u-

La muerte y el juicioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora