Me levanté temprano, me di una ducha rápida, me vestí rápido, Me preparé un desayuno, me senté a comer y de repente escuché a alguien gritar mí nombre. Acto seguido sonara la bocina de un auto, camine hasta la ventana. Me asome, vi a Nathan en una camioneta, cuando me vio me hizo seña para que bajara. Lo mire extrañada, pero le hice caso y baje de inmediato.
― ¿Qué es esto? ― le pregunte refiriéndome a la camioneta.
―Hola, Nathan ¿Cómo estás? Bien gracias por preguntar― dijo con un tono irónico, rodé los ojos al escucharlo.
―Ya lo siento ¿Me vas a decir? ― le pregunte si dejar de mirar la camioneta.
―Si es tuya― lo mire confundida― si y no me mires así porque Mark me pidió que te la entregara. Ayer no te la pudo dar por lo que pasó entre ustedes― dijo en voz baja
― ¿Cómo lo supiste? ― esta vez deje de ver la camioneta para verlo a el
― Mark me lo dijo― intente interrumpirlo, pero él siguió hablando― No te preocupes nadie más lo sabes y tampoco te haré preguntas― dijo algo incómodo
― ¡Oh! Gracias― dije y sonreí sin muchas ganas.
―Buena suerte en tu primer día― dijo extendiéndome las llaves y con una enorme sonrisa.
― ¿No vienes? ― pregunte después de subirme a la camioneta
―No, yo estaré atendiendo a otros pacientes de la lista así que no te preocupes― dijo cerrando la puerta de la camioneta
―Se que Jesse no vino y si te preguntas por las llaves, él las tienes.
― Lo supuse, diré que estoy bien Mark me dejo una habitación en su hotel.
―Sabes que mi apartamento no es muy grande, pero siempre tendrás un espacio― dije
―Gracias, pero no va hacer necesario el hotel está bien y necesito un poco de tiempo a solas. En fin, vete tienes un día largo.
Asentí, encendí la camioneta y me dirigí a casa de mi primer paciente.
***
Todo el día he estado atendiendo a los pacientes. Me detuve sólo una vez a comer para evitar marearme. Ahora es que por fin voy a ver al último paciente del día. Estoy acomodando todo en mi maletín antes de bajar de la camioneta. Escuche mi celular sonar lo tome y casi me da un infarto al ver que me está llamando es Mark.
No sé sí contestar o no, es decir ¿Qué le voy a decir? O mejor dicho ¿Qué me va a decir? De seguros se va a disculpar por haberme besado. Y si comienza a decirme cuanto quiere a su novia y cuanto me odia. Me voy a quebrar aquí mismo. Solté un suspiro de frustración, miré el celular y decidí no contestar. Lo guarde en mi bolsillo y me baje de la camioneta.
Me dirigí al portón de la casa, cuando llegue toqué un timbre y me identifique como la doctora. Al instante abrieron, dejándome pasar, no le preste mucha atención a la decoración de la casa. No es muy diferente a la demás que he visto en el día de hoy. Todas son iguales, jardines grandes con fuentes aún más grandes, estilo antiguo o muy moderno y demás excentricidades de los ricos. Llegue a la puerta la cual está abierta entre mire hacia todas las direcciones. Me sorprendí a ver a Stephanie sentada leyendo una revista. Ella ni siquiera se ha dado cuenta de mi presencia hasta que apareció Frank.
― ¡Ashley! Pero que sorpresa, no pensé que te volvería a ver― dijo Frank emocionado
No alcance a contestar cuando Frank ya me está abrazando.
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El Amor Te Recordará
RomanceDespués de haber aceptado la propuesta de Mark y haber conocido el amor de una manera diferente. Ashley Smith decidió marcharse a un internado en Estados Unidos. Ha pasado tres años desde que Ashley dejo a Londres y a Mark. Ninguno ha intentado busc...